Habéis comprado alguna vez un hormiguero? Yo sí. Que no fuera consciente no significa que no lo haya adquirido. Pero además, es que no me lo han cobrado!! Qué contenta estoy con un hormiguero dentro del cepellón de mi Cornus sanguinea (Cornejo rojo) !!
Ahora en serio. Esta mañana mi ayudante se ha dispuesto a plantar el Cornus que había adquirido hace unos días en un vivero de Madrid. Me gusta mirar y remirar las plantas antes de meterlas en tierra. A veces no sé ni qué miro pero las reviso. Es una costumbre de siempre. Las saco del contenedor, observo el estado de sus raíces. Veo la tierra. Compruebo que no tengan insectos o cosas raras...aprovecho para eliminar ramillas u hojas muertas, en fin, las acicalo un poco mientras reviso en qué estado está el cepellón de la planta antes de verlo desaparecer bajo tierra.
Estaba buscándole la ubicación correcta cuando me percato que una hormiga sube justo desde la base de los tallos hacia arriba. Pensé que sería una de los millones que tengo en el jardín. Cuando al rato, otra...otra más...ummmm!! Me fui al extremo de las ramas a ver si había pulgón. Ni rastro de áfido alguno. Qué raro! Pensé...Cada vez había más entre las ramitas inferiores del Cornus así que lo saqué del contenedor y me encontré la "guarida" con la despensa llena. Qué majas ellas, tan currantas y previsoras...
Fijaos en las galerías que tenían construidas...
Una vez les concedí mentalmente la medalla al mérito al trabajo, con un palillo he eliminado los viandas de las pobres hormigas y he destruido los "pasillo" del hormiguero que he tenido al alcance. Las hormigas salían del centro de la planta así que seguro que tenía que haber un pasadizo desde la cámara principal hasta allí pero no he querido toquetear demasiado el cepellón para no arriesgarme a romper las raíces. al trabajo desde luego no estaba dispuesta a plantar el Cornus con habitantes en sus raíces así que he llenado un capazo con agua y le he echado un chorro generoso de jabón potásico y he dejado en remojo el cepellón para que las hormigas se ahogasen.
Fijaos en las galerías que tenían construidas...
Una vez les concedí mentalmente la medalla al mérito al trabajo, con un palillo he eliminado los viandas de las pobres hormigas y he destruido los "pasillo" del hormiguero que he tenido al alcance. Las hormigas salían del centro de la planta así que seguro que tenía que haber un pasadizo desde la cámara principal hasta allí pero no he querido toquetear demasiado el cepellón para no arriesgarme a romper las raíces. al trabajo desde luego no estaba dispuesta a plantar el Cornus con habitantes en sus raíces así que he llenado un capazo con agua y le he echado un chorro generoso de jabón potásico y he dejado en remojo el cepellón para que las hormigas se ahogasen.