Cómo hacer un acodo rápido con Hedera algeriensis 'Gloire de Marengo' (Hiedra)

Definitivo, bajo las mimosas (Acacia dealbata) no hay manera de hacer crecer casi nada. Seguramente habrá alguna planta que prospere a los pies de estos árboles pero de momento no voy a hacer más intentos de plantaciones. 
Ya me han matado una preciosa hortensia cuajando el hoyo inmenso que hice cuando la planté con sus invasivas raíces y bebiéndose hasta la última gota de todo el agua que echaba a la hortensias.
Hace un par de semanas compré una hiedra como alternativa para verdear este arriate. 
Estoy segura que contra ésta no podrán las mimosas. El lugar no tiene demasiado sol pero sí es muy luminoso. El terreno, como todo mi jardín no tiene problemas de drenaje alguno y todo el arriate lo trabajé bastante eliminando todas las raíces, arbustos muertos, etc e hice un cavado con estiércol bien maduro. Así que el terreno no está falto de nutrientes. Aunque lo cierto es que la hiedra tampoco es demasiado exigente en cuanto al medio dónde crece. 
Compré esta variedad, Hedera algeriensis 'Glorie de marengo' porque me parece una hiedra preciosa, con sus manchas verdes azuladas y crema muy claras, casi blancas. Es de hoja bastante grande y creo que armonizará muy bien con la vegetación también en tonos algo azulados de las mimosas. 
Esto precisamente es el acodo. Un sistema de reproducción vegetativa (asexual) mediante el que se logra reproducir un ejemplar provocando que en algún punto intermedio de una de las ramas de la planta madre se emitan raíces manteniendo esta rama en contacto con el suelo. Una vez se han producido las raíces en el punto de contacto de la rama con el suelo la planta que brota es un "clon" de la planta madre. Es decir, genéticamente es idéntica.
Las hiedras emiten raíces adventicias que le permiten aferrarse a las paredes, muros o troncos de árboles sobre los que crecen. 
Pero estas raíces que generalmente brotan en los nudos de las ramas también son el sistema por el que la planta se extiende con facilidad por el suelo dónde crecen. Al caer una rama sobre el suelo de ese punto de contacto, brotan pronto estas raíces  y son un nuevo punto de dónde la planta toma agua y alimentos pudiendo extenderse así y cubrir grandes espacios.
Es esta facilidad para que de los nudos de sus ramas emitan raíces lo que hace idóneo a la hiedra para reproducirla mediante este sistema de acodo. Creo que es mucho más rápido y mucho más seguro que haber hecho esquejes que podría o no prosperar. 
Con el acodo los nuevos brotes siguen abasteciéndose de agua y nutrientes de la planta madre en tanto brotan las raíces que harán autónomas a las nuevas plantas. 
Este proceso de acodo lo hacen muchas plantas de modo natural, sin intervención humana. Seguramente lo habéis observado alguna ven en vuestros jardines. Un día miramos cerca de la planta madre y vemos que hay un nuevo brote de ella a cierta distancia. Si nos fijamos este nuevo "retoño" está unido a la planta madre a través de esa rama que fortuitamente se cayó sobre el suelo y permaneció en contacto con él.
Una vez se han emitido las raíces que pueden abastecer de agua y nutrientes a la nueva planta puede cortarse el vínculo de unión porque en realidad ya tendremos dos plantas
Pretendo que este arriate se cubra con la hiedra y que algunas de sus ramas cuelguen por el muro de piedra sin llegar a cubrirlo porque las piedras son tan bonitas!!  Que no quisiera taparlas del todo.
Quizás debería haber comprado un par más de ejemplares para que el suelo de este arriate se cubra más rápidamente pero no quedaba en el vivero más que el ejemplar que me traje.
Así que opté por hacer un "acodo rápido" que creo que acelerará el proceso de cubrir el suelo con la hiedra.
Digo acodo "rápido" porque en realidad un acodo generalmente se hace curvando una rama de la planta madre hasta hacerla tocar el suelo y parte de esta rama ha de hundirse bajo el sustrato permaneciendo el resto de la rama verticalmente para que siga creciendo. Más adelante dedicaremos una entrada a hacer un acodo clásico con alguna planta.
El día que lo hice no tenía a mano alambre fuerte que hubiera sido lo idóneo y a falta de él usé lo primero que tenía a mano:  unas horquillas del pelo. Sí, de esas que las mujeres usamos para sujetar el pelo en los recogidos!! :)
Antes de plantar la hiedra le hice una limpieza eliminando todas las hojas marchitas y ramitas muertas.
A continuación la  planté del modo habitual y luego extendí sus ramas separándolas entre sí de forma "radial"
 
Antes de usar las horquillas las he forzado un poco para que quedaran un poco abiertas y que así las ramas de la hiedra no se dañaran. 
Cada 25/30 cm he ido sujetando las ramas al suelo procurando hacerlo allí dónde veía puntos de crecimiento (nudos) que es dónde la hiedra emitirá raíces.
Como el terreno no está demasiado suelto las horquillas me han valido para este fin. Quizás en un terreno que estuviera más recientemente trabajado y la tierra estuviera algo más suelta hubiera sido preciso usar los alambres doblados en forma de "U" que son más fuertes pero ya digo, me han valido las horquillas. 
En los puntos más cercanos de las ramas al nacimiento de la planta lógicamente las ramas tendían a levantarse así que ahí sencillamente he colocado una piedra que sujetará la rama contra el suelo y le permitirá que broten raíces hacia abajo.
Es conveniente cortar los extremos de todas las ramas para favorecer que emitan ramillas laterales.
Ahora es preciso mantener un buen nivel de hidratación del suelo para favorecer la emisión de raicillas.
Y eso es todo!! Fácil. Verdad!! 

"Las mejores ideas para cultivar tu huerto"

Estos días, por circunstancias personales no puedo colgar artículos que precisen de fotografías del jardín. Ando fuera de casa y en situación bastante peculiar con muchísimas horas sin hacer nada, mano sobre mano y ya sabeis qué es eso para quienes como nosotros los jardineros estamos acostumbrados a no parar: secillamente desesperante ajajjaja No?
Así que ayer por la tarde, para entretenerme un poco y despejarme un rato, me fui a dar una vuelta a un centro de El Corte Inglés que me pillaba cerca de donde estoy. A la sección de libros. La verdad es que no encontré gran cosa. Ni siquiera había demasiados buenos libros. Es mucho más fácil encontrar libros de jardinería a través de su página que comprarlos presencialmente.
Reconozco que siento cierta frustración cuando no encuentro nada que me me guste. Y que doy vueltas y vueltas entre las estanterías a la espera de hallar alguna cosa que me entusiasme, que despierte mi curiosidad o que sea alguno de los buenos libros que conozco y aún no tengo.
Del grupo de libros sobre jardinería, pasé a los dedicados a cultivos de huertos y ya me iba a ir de la Sección cuando otro cliente dejó en la estantería este sobre el que escribo el artículo:
"Las mejores ideas para cultivar tu huerto". de Armelle Cottenceau & Rosen Le Page. Editorial Libros Cúpula. 208 páginas. 21,50 €.
Debo de reconocer que si no hubiera tenido previsto pasar la tarde de ayer y todo el día de hoy con un montón de horas muertas, sin hacer nada y con la necesidad de rellenar el tiempo con algo de lectura, quizás no lo hubiera comprado. Pero lo compré como el que compra una revista de estas de divulgación para entretenerse y ayudarse a pasar las horas. Y me lo traje sin demasiado convencimiento!!
Pero me ha sorprendido. No voy a decir que alguien que lleve años cultivando un huerto descubra algo importante en él pero para alguien que se inicia como yo... sí, creo que es un libro del que no puede esperarse ni el nivel del desarrollo de materias ni la profundidad que ofrecería un buen manual. No se trata de un manual. Se trata de una recopilación de pequeños detalles, ideas, trucos..ofrecidas de forma muy entretenida.
Ameno, muy ameno. Con muchas ilustraciones que lo convierten en agradable a la vista. Con buenas explicaciones breves pero muy claras. Con la materia ordenada... me ha enganchado. Si fuera un libro de cocina lo calificaría como de recopilación de recetas bien explicadas, surtidas y que abarcan la mayor parte de la cocina cotidiana a la que nos enfrentamos sin meterse demasiado en profundidades pero ofreciendo a alguien que se acerca por primera vez a los fogones algunos truquillos para salir airoso de una cena improvisada. 
Llevo leído como tres cuartas partes y mi impresión es la que os comento. Así que si alguien está en la tesitura de comenzar a cultivar hortalizas y, como yo, no sabe por dónde empezar... animaría a que si tiene la oportunidad, lo adquiera (junto a un buen manual, por supuesto ;)  ) 
Son un surtido de ideas sueltas, sobre un montón de aspecto. No se trata de capítulos dónde trate los temas de modo extenso. Es un libro entretenido, tampoco tiene pretensiones de ir mucho más allá pero entra en algunos detalles y da algunas ideas que creo que son muy sugerentes y a tener en cuenta para todos los que tenemos pequeños huertos. Y sí, creo que es lo que ofrece su título: buenas ideas para cultivar los huertos :)



Falso ébano, Codeso o Lluvia de oro (¿Laburnum anagyroides o Laburnum x watereri 'Vossii'?) (I)

Iba a esperar a que abrieran sus flores el Codeso antes de colgar este artículo pero así, apenas apuntando algunas que resplandecen entre los verdes grisáceos de sus hojas me parecen de una delicadez y de un movimiento tan grácil que hace al arbolito encantador antes de que llegue el momento de gran esplendor que será cuando todo él se cuaje de racimos largos y colgantes de flores amarillas 
Es conocido por varios nombres comunes, desde Falso ébano, codeso o lluvia de oro e incluso hay quién lo llama Citiso. Puede alcanzar los seis o siete metros y  es uno de los arboles de jardín de mas espectacular floración.
El único inconveniente de él es su poca longevidad y que todas sus partes son tóxicas así que hay que llevar cuidado en el caso de que haya niños o mascotas en el jardín que puedan ingerirlas.
Empieza a florecer ahora, al inicio de la primavera y todo él se cuaja de racimos colgantes de flores que no pueden negar la familia a la que pertenecen (Papilionaceas o leguminosas) y tiene ciertos parecidos con los de otra planta preciosa y también espectacular, la Glicinia (que también es leguminosa). De hecho es habitual ver combinaciones de ambas plantas formando túneles arqueados bajo los que cuelgan los racimos de ambos y dando lugar a un espectáculo impactante.
Son arbolitos de fácil cultivo porque ni en cuanto a suelos ni en cuanto a temperaturas son delicados. Necesita eso sí que el verano se riegue en abundancia pero en invierno no tenga encharcamientos. Quizás la ubicación en mi jardín fuera idónea si contara con un clima algo más suave pero en el mío puede que por los veranos tan calurosos debiera haberlo situado algo más en semisombra de lo que está.
Si veo que sufre durante el estilo lo trasladaré cerca de una Wisteria chinensis (Glicinia) que tengo dónde estará más preservado del sol del mediodía. 
El que tengo plantado  no estoy segura de la variedad. Al comprarlo, en la etiqueta ponía Laburnum anagyroides 'Vossi', está claro que quién lo etiquetó se hizo un lío o confundía una de las especies de Laburnum y el híbrido e hizo un "refrito" con los nombres.
El cruce de las dos especies del género Laburnum (Laburnum anagyroides y Laburnum alpinum) dio lugar a un híbrido con características de ambos, Laburnum x watereri 'Vossii'.
He estado consultando fotografías e información en libros y en la Red pero no logro tener claro qué tengo en el jardín. Seguramente según vaya madurando el árbol pueda identificarlo. Probablemente sea el híbrido ya que es más frecuente que esté a la venta en jardinería pero vamos, no lo puedo saber aún con seguridad. En fin, también está bien que haya algo de misterio :)
En próximos artículos lo mostraré en la plenitud de la floración.

Pensamientos entre hortalizas

Ya sabéis que esto de la huerta es totalmente nuevo para mí quizás por eso ando tan entusiasmada con sus progresos. Seguramente es la falta de costumbre...:) Quisiera de todos modos que este estado de constante sorpresa me durara mucho, mucho tiempo... porque mira que es grato sorprenderse y seguir maravillándose con las cosas que acontecen!! Verdad!! :)

Eliminar todas las malas hierbas del jardín?

Nos producen casi terror. Son la pesadilla de los jardineros ( y de sus espaldas). Luchamos incansables contra ellas a sabiendas que a duras penas ganaremos alguna batalla pero jamás la guerra. Pero este afán de eliminación no está llevado únicamente por lo que de competencia en nutrientes, espacio y agua puedan representar contra nuestras plantas ornamentales. Se trata también de que muchas veces tenemos la idea de que estéticamente afean y denotan o dan la impresión de un jardín descuidado.

Y sí, está claro que cierto control sobre ellas es necesario pero esa casi obsesión en erradicarlas totalmente? Yo creo que no tiene sentido alguno. Cuántas veces realizamos actos mecánicos sin preguntarnos las razones y si realmente aportan o benefician en algo!!
Evidentemente que no se trata de dejar el jardín en manos de toda hierba silvestre que quiera quedarse a vivir en él permitiendo que se desarrolle cuando y dónde quiera. Ni que las ornamentales acaben asfixiadas entre matas de hierbas que juegan con ventaja porque están genéticamente mejor preparadas que las que cultivamos en el jardín para hacer frente a situaciones adversas.
Yo, desde luego no estoy dispuesta a que el jardín se convierta en una selva (salvo que fuera de helechos y hermosas plantas de bosque jajaja) ni que mis arbustos luchen en desventaja por el agua y los nutrientes rodeados de yerbajos que compiten con ellos y que los pongan en peligro.
No, no es esta la idea. Pero debemos pensar que el jardín no es exactamente un medio natural en sentido estricto. Se trata de naturaleza, sí, pero de una especie de "naturaleza domada" y aspiramos a que esta "doma" venga de la mano exclusivamente de nuestros  intereses.
Son estos intereses en realidad lo que nos ha llevado incluso a denominar como "malas hierbas" a plantas que en realidad muchas veces de malas no tienen nada. Sencilllamente crecen allí dónde no tenemos previsto que lo hagan o no nos conviene.
Son éstos intereses los que debiéramos cuestionarnos alguna vez. En la medida en que logremos en nuestros jardines una convivencia en armonía y equilibrio entre los distintos elementos que habitan en él será un jardín mucho más sano y mucho más hermoso. Quizás no tan perfectamente "limpio", pulcro y ordenado pero indudablemente mucho más rico y con mucha más vida en ebullición. Aspirar a erradicar totalmente una parte de su vida en favor de otra solo aboca a un desequilibrio a la larga pernicioso incluso para las especies que queremos proteger.
Ejemplos a miles:: Vemos los dichosos pulgones y más de uno lo identifica con descuido o con desidia  del jardinero.  Y que no se le ocurra a un diente de león aparecer en nuestro césped porque allí nos dirigimos sin demora, herramienta en mano, a arrancarlo de cuajo, son el terror de los que se obsesionan con tener praderas perfectas de césped!! (incluso en zonas que  realmente es un despropósito el intentarlo) No queremos pulgones!! Ni uno!! No queremos oídio!! No queremos una sola mancha que ensucie la perfección de las hojas de nuestros rosales!! . No queremos nada que no hayamos puestos nosotros libres y voluntariamente.  La visión de cuatro o cinco redondeles troquelados en las hojas con una precisión asombrosa nos horripila en lugar de pensar qué maravillosas son las capacidades de algunos insectos.
Nada de eso, salimos preocupados de la zona pensando de qué modo eliminar al cortador y si es pronto, mejor. Quizás aprender a ver que sigue habiendo belleza en la ausencia de perfección nos haría vivir la jardinería de un modo algo más relajado. Pero sobretodo la variedad de vida que habita en´el jardín nos lo agradecería ;)
Porque está demostrado, en ese afán de eliminar toda plaga o enfermedad que pudiera afectar, aunque sea levemente y sin hacer peligrar a nuestras plantas, nos lleva a aplicaciones de químicos que puede que de momento cumplan su función al erradicar al "invasor" pero a la larga solo redunda en perjuicio del medio ambiente y de nuestras plantas porque eliminan junto a los indeseables, a otros insectos absolutamente beneficiosos para el jardín (sus depredadores naturales) dejándolos sin alimento o sin cobijo y provocando que cuando regresan las plagas tengan campo abierto para desarrollarse al no tener ya quién les ponga freno .

Nos falta tiempo para fumigar incluso antes de que lleguen los problemas. Y sí, está bien prevenir cuando ya hemos tenido problemas de enfermedades que han arriesgado nuestras plantas en temporadas anteriores. Evidentemente no se trata de permitir que las esporas del oídio campen a sus anchas invadiendo todo el jardín pero si no han hecho jamás su aparición en él, tiene algún sentido la aplicación de tanta química?
Quizás esa actitud de "por si las moscas" que tantas veces nos conduce a cargarnos a la espalda la mochila para aplicar fitosanitarios de forma preventiva sin haber realmente razones para ello, es hora de ponerla en cuestión y plantearse con buenas dosis de sensatez cuándo sí y cuándo no, está justificada su aplicación.
Pero es que además se nos olvida que, afortunadamente, nuestras rosas están ahí fuera, con otros seres vivos y que los efectos de esa coexistencia a veces no son tan nefastos. Es más, de no ser por muchos de estos efectos, no llegaríamos a disfrutar de nuestras rosas. Por poner un ejemplo: Afortunadamente contamos con la "ayuda" de microorganismos que se encargan de bajar los nutrientes que produce nuestros acolchados de humus de lombriz y estiércol a niveles inferiores del suelo y que las raíces puedan tomarlo para nutrirse. E igualmente tenemos la fortuna de que las abejas polinicen nuestros árboles y lleguen a dar frutas que luego nos alimentan.
Por añadidura no caemos en la cuenta que generalmente son las condiciones inadecuadas de cultivos que nosotros mismos aplicamos (distancias entre ejemplares, riegos,nutrientes, ubicaciones inadecuados...etc), las que provocan la aparición de esas mismas plagas y enfermedades contra las que presentamos batallas incansables. Las condiciones de cultivo y nuestras malas prácticas provocando con estas fumigaciones indiscriminadas resistencias en plagas y enfermedades que solo hacen agravar el problema. Es posible que pensar más en cambiar algunas de estas condiciones y técnicas nos resultara mucho más fácil, más cómodo, más barato y sobretodo más eficaz que luchar contra toda la vida que pensamos que atenta contra nuestras queridas ornamentales.
Entre estos elementos que tienen la desgracia de no ser seres vivos que el jardinero ha "autorizado" su presencia en el jardín están las malas hierbas. Puede que debiéramos plantear un jardín algo más generoso, dónde quepan si no todos, sí más.
No sé...creo que aspirar a tener un jardín o un huerto casi tan asépticos como un quirófano además de insalubre para nuestras propias plantas, es una aspiración que a mí se me antoja un sinsentido.
Acotar, poner freno a estas hierbas adventicias, sí. Tratar de erradicarlas por completo, no. En absoluto. Son muchas las ventajas que reportan en nuestros huertos y jardines manteniéndolas a raya:
En mi caso no tengo césped, eliminarlas totalmente (aunque fuera solo de forma momentánea porque volvería a surgir) sería eliminar una cubierta vegetal de las zonas dónde crecen y que supondría dejar el suelo sin protección alguna frente a la erosión que produce el agua del riego y la lluvia, así como frente a la radiación solar en verano, con el riesgo de que las altas temperaturas destruyan el humus y los microorganismos presentes en él. Igualmente frente a las heladas en invierno la cubierta vegetal que constituyen las malas hierbas es un sistema que protege al suelo y con ellos las raíces de las plantas.
Mi jardín presenta bastante pendiente en algunas zonas, de ahí que al hacer algunas plantaciones me vea obligada a "construir" alcorques cuya horizontalidad la tengo que ganar aportando tierra en la mitad saliente del mismo. El nacimiento de algunas malas hierbas en´este borde ayuda a fijar el terreno impidiendo que en la primera lluvia fuerte se desmorone y facilita que no haya escapes del agua de riego cuando éste se llena.
Y si digo la verdad, controlándolas un poco, acotándolas...no me parece que estas hierbas afeen el jardín, quizás porque mi aspiración no es un jardín clásico, encorsetado, con setos escrupulosamente recortados y arriates en perfecto orden, si no más bien un jardín algo más natural, campestre, dónde algunas matas de ciertas malas hierbas no le restan belleza si no al contrario, pueden aportar una nota de naturalidad que a mi me encanta. De hecho en estos días que he estado limpiando y preparando uno de los setos he dejado entre otras "malas hierbas" alguna mata de amapolas para que florezcan  entre los arbustos. Por qué no? Me parecen preciosas!! Por qué eliminar los Geranium molle siendo unas plantas tan encantadoras que no llegan a ser invasivas y que salpican el suelo con sus pequeñas florecillas rosas?
Fotografía de Aiwok en Wikipedia
Fotograia de Kenpei en Wikipedia
Dejo casi todas las matitas que brotan, me gusta verlas entre los arbustos!! Aquí tenemos a la retama a punto de florecer coexistiendo con una mata de amapolas y una pamplina (Fumaria officinalis)...bonitas, eh? :)

O estos cardos (Silybum marianum) no son acaso espectaculares?

Os muestro esta fotografía: Primero para mostrar cuan efectivas son a veces algunas técnicas de cultivo como es el acolchado para mantener bastante a raya las malas hierbas sin recurrir a herbicidas o técnicas agresivas. Del alcorque de este Liquidambar, apenas he tenido que arrancar un par de pequeñas malas hierbas. Está cubierto por una capa gruesa de hojas desde el otoño y las hierbas salen dónde el suelo no está cubierto, fuera del alcorque.
Quizás está bien eliminar las hierbas que nacen dentro de las zonas de plantación próximas a los puntos de crecimiento pero tampoco está mal dejar las que ya no representan competencia con los arbustos o árboles. Las plantas pueden coexistir si se lo permitimos, y lo pueden hacer con menos intervención de nuestra parte.
Incluso algunas, cuando tras su cultivo en el huerto, se incorporan al suelo, actúan como mejorantes de éste. Otras pueden usarse como plantas medicinales o como condimento en la cocina.
Vemos pues que no todo son problemas y desventajas. También tiene beneficios el que convivan este tipo de plantas con "nuestras preferidas". Es el caso de ciertas plantas adventicias de la familia de  las leguminosas que fijan el nitrógeno en sus raíces permitiendo su acceso a otras plantas cercanas.
Para no extenderme más mencionaré otra gran ventana, quizás la mejor: Algunas son comestibles!! Y están estupendas incluías en nuestras ensaladas o cocinadas. Eso sí, es importante saber reconocerlas y estar bien seguros de su identificación antes de usarlas para el consumo!! Y por supuesto no haber aplicado química alguna sobre ellas...
Y si no, decidme si no resulta tentadora estas dos imágenes de Fernando Martínez Flores :) Son realmente apetitosas no?

A mí también me encanta prepararme alguna ensalada con las achicorias que crecen a montones en mi jardín sin haberlas invitado yo a venir a él :) o hacer una tortilla con las "collejas" (Silene vulgaris) que brotan y florecen preciosas cada año en un murete y además son gratis!!
Fotografía de D. Gordon El Robertson en Wikipedia

Debo hacer una mención muy especial D. Fernando Martínez Flores profesor y gran entendido en estas materias. También activo participante en Foros de huertos y jardinería de gran difusión. Gracias  a él (entre otros) he podido identificar la mayoría de "malas hierbas" de mi jardín. Fernando Martínez Flores ofrece incluso interesantes cursos sobre estos temas. Os animaría a que le echarais un vistazo al programa del próximo curso que tiene  previsto impartir pinchando en este enlace y veáis los contenidos, estoy convencida que a muchos les animará a inscribirse en él.
Se trata de: Curso práctico avanzado de identificación de flora alicantina (25 y 26 de abril de 2015)
CURSOS ORGANIZADOS POR: el Departamento de Ciencias Ambientales y Recursos Naturales de la Universidad de Alicante y el periodo de inscripción es hasta el 22 de abril de 2015.
PREINSCRIPCIÓN: Enviando este documento (Pinchad) cumplimentado a cursos.dcarn@ua.es
PROGRAMA: para ver los contenidos, este es el enlace
Más información en la web del Departamento o en la misma Secretaría (Teléfonos de contacto: 965 90 3740 / 3815)

Los púrpuras: Corylus maxima `Purpurea' (Avellano de Lambert)

Cuántos matices de color puede llegar a tener el avellano de Lambert!! Suelen crecer con varios pies y forman espléndidos arbustos que alcanzan con los años los cuatro o cinco metros.
En verano producen avellanas comestibles y en invierno sus largos amentos permanecen en sus ramas tras tirar la hoja.
 Me encantan estas hojas con esos dibujos que parecen hechos a plumilla. Más oscuras oscuras ahora que luego, en verano, cuando se torna más verde.



He situado uno frente a otro porque no es autofértil y precisa la presencia de otro ejemplar para fructificar.
En todo caso no ha sido la expectativa de comer avellanas el motivo de haberlos introducido en el jardín, han sido sus preciosas hojas con sus maravillosos colores.



Olmo siberiano (Ulmus pumila)

En pocos días han brotado mis olmos siberianos (Ulmus pumila). Qué rapidez!! Apenas sacan las hojas y ya están cuajados de sámaras (los frutos). Ahora que comienzan a subir las temperaturas vierten sobre el seto norte su sombra no demasiado espesa. Proyecté este seto teniendo en cuenta la frescura que aportan los dos olmos cercanos a él protegiendo algunas plantaciones del sol del mediodía, cosa que les irá estupendamente. 
Tienen ya sus años y han alcanzado una buena altura. Son árboles maduros ya que indudablemente tienen sus inconvenientes. Todos las conocemos: sus raíces agresivas se extienden superficialmente a metros y metros de distancia del tronco. Detectan la presencia de agua y hacia allí se encaminan. De vez en cuándo, en cuanto veo brotar del suelo sus brotes,  tengo que desenterrarlos y arrancarlos junto con la raíz lo mejor que puedo, de lo contrario se apoderan de los cultivos cerca de dónde brotan.

Pero como otros árboles en mi jardín, no me gustaría prescindir de ellos. Aportan verticalidad con su gran envergadura ya; refrescan la zona con su sombra y en otoño adquieren bonita coloración. A lo que hay que añadir el gran volumen de hojas que utilizo para acolchar el suelo de los setos tras su caída.

No son árboles espectaculares, pero tienen sus encantos. Sus ramas inferiores se extienden horizontales sobre los arbustos y trazan sobre ellos curvas que me parecen preciosas. Por no hablar del sonido que produce el viento al moverlas!! 

Justo en estos días es cuando más me gustan. Con sus ramas cuajadas de sámaras (frutos alados, con forma que hace fácil su transporte por el viento) en racimos...a miles!! No duran mucho así, no tardando caerán secas sobre el suelo, con aspecto y tacto de papel.

Tenía mis dudas en la identificación y afortunadamente cuento con amigos especialistas a los que no hay planta que se les resista ;) En este caso ha sido Héctor Hernández Zapata quién me ha identificado los olmos como Ulmus pumila u Olmo siberiano.
Por cierto, Héctor lleva una página, "Autóctonas en el jardín" que os invito a visitar por lo interesante de su contenido. Una página que hace un recorrido por esas plantas que deberíamos utilizar con más frecuencia en nuestros jardines. 
Por lo que se ve son los único resistentes a la "Grafiosis" una enfermedad que afecta a los olmos autóctonos y que se transmite a través de un insecto coleóptero, la "galeruca del olmo" (Galerucella luteola) que perfora y roe las hojas produciendo su defoliación de forma prematura. 
Én esta imagen de Didier Descoues en Wikipedia puede verse  el "simpático" bichito que, transportando adheridas las esporas del hongo en su cuerpo las va diseminando por todo el árbol.
Bien, pues parece que los olmos siberianos (Ulmus pumila) tienen cierta resistencia a esta enfermedad afortunadamente. Yo no he apreciado síntoma alguno en los míos. Todo lo contrario, gozan de una salud enviable!! 

Clemátide macropetala (Clematis macropetala) azul o malva?

Qué difícil es calificar a veces la gama de azules y malvas... Según de dónde le venga la luz, según la hora del día...las flores de esta clemátide me parecen claramente azules; otras veces un azul con tintes malvas...En todo caso gamas bonitas siempre y siempre difíciles de captar para una pésima fotógrafa como yo!! 

Esta está plantada en el jardín trasero, en la fachada norte de la casa para que tenga los pies en la sombra. A dos metros del suelo parte un arco de bastante anchura que cruz la terraza trasera orientada al este pero a esa altura cuando crezca y se soporte en él recibirá bastante sol. 
Eso quieren estas trepadoras caducifolias (aunque hay alguna variedad de hoja perenne), los pies a la sombra y la cabeza al sol. El suelo húmedo, rico y con materia orgánica y que mantenga cierto grado de humedad cosa que puede lograrse cubriendo los pies de la clemátide con otra planta o simplemente con alguna piedra o acolchado que mantenga el frescor.

La forma de plantarlas también es importante para evitar en alguna medida el típico marchitamiento que con cierta frecuencia les afecta. y por supuesto, aplicarles una poda correcta dependiendo del grupo al que pertenecen. Para ambos aspectos tengo publicados dos artículos por si es de interés para quién lea este.

Esta Clematis macropetala pertenece al Grupo 1, así que precisa poca poda. Las clemátides de este grupo florecen sobre la madera del año anterior, así que si se elimina con las podas también eliminamos la floración de la temporada siguiente. Si acaso, tras la floración, una poda de aclareo y limpieza de madera muerta o enferma y cuando veamos que se enmaraña demasiado o que sobrepasa el espacio asignado,
Florece una sola vez al año, al inicio de la primavera y lo hace de modo espectacular cubriendo de flores su vegetación compuesta de preciosas hojas de un verde claro. 

Tardan un tiempo en asentarse y en "echar a correr" pero una vez lo hacen, son imparables. De ahí que proporcionarles un buen soporte sea prácticamente imprescindible si no queremos que acaben sus tallos sobre las plantas que no deseamos o directamente en el suelo. 
Como decía ésta crecerá sobre un arco metálico sólidamente anclado a la fachada de la casa. Llegan a adquirir un tamaño respetable por lo que el peso que puede alcanzar es un asunto a tener en cuenta. Espero que se ésta se encuentre a sus anchas en esta ubicación!!

Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...