Plantando bulbos de narcisos y Allium (Ajos ornamentales)

Con bastante retraso. Pues sí. Pero es los compré no hace mucho. Está pasada la temporada de plantación de estos bulbos de floración primaveral que es en otoño y, cuando los vi a la venta, dudé en comprarlos.
Pero la verdad es que me parecieron de calidad, estaban sanos, eran grandes, sobretodo los narcisos. No presentaban zonas con hongos y parecían firmes al tacto. Así que me traje una bolsa grandecita de mezcla de narcisos y unos cuarenta Allium (ajos ornamentales) que no tiene apellido. Ni idea de la variedad pero bueno, seguro que son bonitos!!
No sé qué pasará con estos bulbos al haber hecho tan tarde la plantación. Espero que todo lo más que ocurra es que se retrasen en su floración aunque pensándolo bien, son órganos que ya están cargados de energía desde el año anterior y puede que florezcan con normalidad. Ya veremos...
Los he plantado en el lilar. He elegido los tonos en los que irán las plantaciones principales: blanco, amarillo y malva. No porque vayan a florecer a la vez, ni coincidiendo entre ambos ni coincidiendo con los demás arbustos porque en realidad solamente conozco el momento de las lilas (Syringa vulgaris) que están en flor en abril. No sé en este jardín cuándo florecerán los narcisos y ajos porque no los he cultivado aquí nunca pero en el otro, los narcisos brotaban en abril y los ajos florecían en mayo. Pero creo que coincidirán los narcisos y las lilas y la Kerria japonica con los ajos. Malva y amarillo/blanco en ambos casos. Dos colores que se complementan de maravilla. Me gusta!!!
Comenté en otra entrada que hay unas cestas estupendas de plástico para cuando se quieren plantar bulbos que una vez han florecido hay que retirar porque no les gusta pasar en tierra hasta la siguiente temporada (como muchas variedades de tulipanes) o que necesitamos esa zona de plantación para otra planta y una vez florecen podemos llevárnoslos todos juntos, con cepellón a otro lugar del jardín dónde pueden terminar de retomar energías y poder recargarse para el año siguiente.
No es el caso porque me gustaría "naturalizar" estos dos bulbos en esta zona. Tanto narcisos como ajos son bulbos que no tienen problema alguno en permanecer años en tierra sin extraerse. A contrario, cada año forman colonias más amplias. 
Hay bulbos, como los tulipanes que no son botánicos que si los dejas en tierra cada año florecen menos y peor, incluso muchas cabezas se van pudriendo. Siempre me ha dado una pereza tremenda sacar los bulbos de la tierra una vez se han laciado las hojas, dejarlos secar, limpiarlos de tierra, ponerles un fungicida y guardarlos en un lugar seco y oscuro cubiertos de serrín o turba seca hasta el año siguiente que es todo lo que se tiene que hacer con las especies que no pueden permanecer en el suelo del jardín de una temporada a otra. No, jamás he estado dispuesta a hacer todo esto así que siempre elijo bulbos que sean resistentes y que puedan dejarse en tierra de un año para otro.
He utilizado el espacio dónde no tengo previsto hacer otras plantaciones y he tenido en cuenta que desde la zona desde la que se visualiza este espacio los bulbos queden detrás de las plantaciones que crecerán en el borde del lilar. Lo he hecho así porque como sabemos, una vez florecen no deben cortarse las hojas ya que el tiempo durante el que tras la floración siguen "laciándose" es el que usan para volver a "recargarse" y poder florecer el año siguiente.
Al florecer agotan en ello la energía que guardan desde la temporada anterior. Si cortamos las hojas inmediatamente después de que florezcan impedimos que el bulbo "se recargue" de energía. Pero claro, esas hojas van poniéndose cada vez más feas y lo mejor es que cuando el resto de las plantas que los rodean comienzan a crecer oculten estas hojas que no son demasiado bonitas.

No me gusta que los grupos de bulbos crezcan en una posición demasiado artificiosa de modo que al plantaros, suelo elegir su lugar definitivo literalmente "tirándolo" sobre el espacio que les asigno y allí dónde caen, los planto. Bueno, claro, si alguno rueda a un lugar escondido o inadecuado lo cambio de posición jajaja
Preferiría que los narcisos, como no son demasiados, crearan un centro más tupido y luego alguno alrededor más suelto, más separado para que al brotar tengan un aspecto más natural. 
El terreno dónde estoy plantando está recién preparado. Así que está labrado, bien nutrido.. incluso con una buena capa de estiércol en la parte superior, como necesitan los bulbos. de modo que solo he necesitado abrir los hoyos necesarios para introducir los bulbos.
Ajos tenía bastantes más y he preferido diseminar un poco la zona con ellos. Como decía "tirándolos" sobre el terreno de manera que por todo el lilar cayera alguno. En unas zonas más compactos, en otras alguno que otro suelto. Incluso alguno alejado del resto. Creo que es así como nacen en la naturaleza de modo natural, no formando círculos perfectos.
Suele decirse que la profundidad a la que deben plantarse los bulbos es aproximadamente al doble de la altura que tienen ellos mismos. Pero vamos, yo no uso una regla para medir ni mucho menos. Lo hago un poco a cálculo. Cuánto más pequeños son, más superficialmente los planto; cuánto más grandes, más profundamente los introduzco. No hace falta decir que la posición es la lógica, con la parte por dónde brotará el tallo hacia arriba!! 

Una vez abiertos los espacios dónde iban no he tenido más que colocar las cebollas en la posición correcta y volver a cubrirlos con tierra apretando ligeramente sobre el sustrato. Después, un riego que rellene bien los espacios con aire que pudieran haber quedado y que además aportará la hidratación precisa para los bulbos. Y a esperar!!!

Rosales premiados. ADR (Allmeneine Deutsche Rosenneuheitenprüfung) y otros galardones a variedades de rosas

En ocasiones vemos que en los libros, catálogos de venta o en páginas web dedicadas al cultivo de rosales que una variedad de rosal tiene el premio o la denominación " ADR" (Allmeneine Deutsche Rosenneuheitenprüfung).

Alguno de nosotros seguramente nos hemos preguntado qué es esta denominación. Pues bien, un rosal que consigue este galardón es un rosal que disfruta de un certificado de calidad.
Se trata de uno de los premios más respetados en lo que hace a Europa. Cuando los cultivadores presentan a examen sus nuevas variedades éstas son cultivadas sin uso de pesticida alguno durante varios años en por lo menos once lugares de Alemania. Durante este tiempo se evalúan características como la resistencia a heladas, aroma, abundancia en la floración, etc.
Superar esta prueba es un respaldo bastante sólido a la hora de decidirnos a comprar un rosal que deseamos sea muy resistente a las enfermedades. Evidentemente los rosales distinguidos con esta denominación adquieren inmediatamente ante el público rosero un gran valor.
Debemos saber no obstante que no todos los cultivadores presentan sus rosales a examen y por tanto que un rosal no tenga esta denominación no significa necesariamente que no sea resistentes a las plagas y enfermedades.
Aclaremos sin embargo que esta certificación de calidad puede retirarse si la variedad deja de cumplir los niveles de calidad que ADR exige.
Si tenéis curiosidad por saber qué rosales han sido premiados en los últimos años con esta certificación ADR son éstos desde 2010:






Esta certificación de calidad no es única. En Inglaterra existen otras. En este país una de las valoraciones  de mayor prestigio son las otorgadas por la RNRS (The Royal National Rose Society) la Real Sociedad Nacional de la Rosa, fundada en 1876 y con su campo experimental e St. Albans. El jurado está formado no únicamente por cultivadores profesionales, también forman parte de el aficionados.

Al igual que  la calificación ADR, la de RNRS valora aspectos tan importantes como la inmunidaad a las enfermedades la fragancia o la abundancia de floración. Esta Sociedad otorga varios premios que valoran distintas características de los rosales. El más importante es el trofeo internacional del presidente para conseguirlo la variedad debe haber obtenido  una medalla de oro y ser considerado además como el mejor rosal del año.
La fragancia de una variedad de rosal esta premiada con la medalla conmemorativa de Henry Edland.
Por último, digamos también que la RSH (Royal Horticultural Society) concede premios de mérito no solo a variedades de rosales si no a nuevas variedades de plantas que son un claro avance con relación a las que las han precedido. En opinión de algunos los premios concedidos por la RSH no tienen la categoría que los que se consiguen de la RNRS.

Las enfermedades de los rosales (I) El oídio (Spaerotheca pannosa). Qué es y cómo se desarrolla sobre nuestras rosas

Las enfermedades que pueden padecer nuestros rosales son múltiples pero son las enfermedades criptogámicas las que representan más del  90 % siendo los causantes los hongos u otros organismos filamentosos.
Los daños que estas enfermedades ocasionan en los rosales son también muy variables y oscilan entre causar lesiones ocasionales consistentes en unas simples manchas momentáneas hasta llegar a provocar la muerte del rosal y ello en función de la capacidad de expansión que tenga el hongo.
Si las condiciones son las adecuadas para el desarrollo de los hongos éstos pueden alcanzar una gran velocidad en su expansión. De otra parte todos sabemos que hay variedades de rosales más y menos propensas al contagio de estos hongos.
Así pues, elegir bien las variedades de rosales que cultivamos en nuestros jardines y conocer las condiciones idóneas para la expansión a gran velocidad de estos parásitos criptogámicos será muy importante para poder limitar esta velocidad e incluso elaborar ciertos programas de prevención de tratamientos o aplicación de técnicas de cultivo que impidan o limiten el contagio.
Sin pretensiones de llegar a niveles de cientificidad que no son objetivo de este blog, podemos echar un vistazo hoy a una de las enfermedades criptogámicas que todos conocemos.

OÍDIO del rosal

Lo cierto es que a pesar de ser la más conocida de las enfermedades fúngicas debido a que los hongos parásitos que la producen tienen una gran facilidad de expansión, no es la que constituye el mayor peligro para nuestras plantas. Eso sí, necesita de numerosos tratamientos debidos a su facilidad de propagación.  Debemos saber que aunque esta enfermedad perjudica como es lógico la planta,  salvo en que el ataque sea de gravedad extrema, rara vez puede ocasionar la muerte de rosal.
http://commons.wikimedia.org/wiki/Category:Podosphaera_pannosa?uselang=es#mediaviewer/File:Podosphaera_pannosa_1.jpg
Síntomas: El Oídio es una enfermedad de las plantas que es fácil de identificar. Es conocido también como mal blanco, cenicilla o ceniza. Casi todos hemos tenido este problema en nuestros jardines en mayor o menor grado: una especie de polvillo blanquecino que cubre sobretodo el envés de las hojas nuevas llegando en ocasiones a afectar a tallos y  hasta los capullos y que provoca generalmente el abarquillamiento y caída de las hojas afectadas.
http://es.slideshare.net/yurihcalle/fitopatologia-oidium 

Si frotamos con los dedos este polvillo veremos debajo de él y sobre la hoja pequeños puntitos necróticos que son las zonas afectadas y destruidas por el hongo mediante la introducción de haustorios en la superficie de la hoja para alimentarse. Sobre la cutícula de las hojas crece el micelio, el elemento blanquecino que todos conocemos.


http://commons.wikimedia.org/wiki/Category:Podosphaera_pannosa?uselang=es#mediaviewer/File:Podosphaera_pannosa_(Wallr.)_de_Bary_5027009.jpg
De qué forma crece sobre nuestros rosales
Es en el crecimiento joven dónde se desarrolla con más facilidad, las hojas viejas raramente son afectadas.  Y según algunos estudios  la razón de esta especie de “tolerancia” es el grosor de la cutícula y la pared epidérmica externa. Aunque no está demostrado si lo que dificulta la penetración del hongo es este grosor que parece hacerles inmunes o si se trata de otros cambios fisiológicos del rosal lo que realmente perjudica al parásito.
En todo caso lo que sí parece ser seguro es que en algunas variedades de rosales se produce una reacción inmediata al ser atacadas por el hongo generando una especie de barrera que impide la propagación de la enfermedad. Parece ser que los rosales de hojas de textura fina son más fáciles de contagiar que los que cuentan con un follaje de hojas gruesas y cerosas.
Lo curioso es que parece haberse comprobado  que en los pedicelos (“rabito” que sostiene la flor bajo el cáliz) de estos rosales con hojas resistentes se produce un mayor y más rápido crecimiento del micelio pudiéndose establecer la enfermedad en la planta en un corto periodo de tiempo en que se den las condiciones favorables para el hongo aunque no se produzca en las hojas.
También se ha observado que un crecimiento vigoroso del rosal está asociado a un nivel superior de infección. Es precisamente cuando se producen muchos brotes nuevos cuando aumenta el crecimiento de hongo, y por el contrario, este crecimiento disminuye a medida que este material nuevo va madurando.  Por tanto es de vital importancia la aplicación de abonos equilibrados en lo que hace al nitrógeno.
Otras fuentes señalan además la correcta hidratación de las raíces como condición indispensable en la lucha contra esta enfermedad. Estemos por tanto muy atentos para que el suelo dónde crecen las raíces de nuestros rosales no presenten sequedad que pueda favorecer de alguna manera los contagios
Qué hongo produce el oídio?
El agente patógeno  que provoca lo que conocemos como oídio es Sphaerotheca pannosa var. Rosae y en él son destacables  sus filamentos micelianos (hifas) que se desarrollan sobre la superficie externa de la planta. Se trata por tanto de un hongo de crecimiento externo en forma de micelio blanquecino. Sobre este micelio crecen los conidióforos que producirán las conidias (esporas asexuales). Ya, ya sé que esto es un rollo intragable y que estos términos para los profanos como yo parecen designar pecados inconfesables jajajaja  A pesar de ello seguiré con vuestro permiso ;)
http://recursos.cnice.mec.es/biologia/bachillerato/segundo/biologia/ud07/02_07_04_02_043.html#
La forma que este hongo tiene de nutrirse es introduciendo en la células más superficiales de las hojas unos órganos  llamados haustorios y que además de para succionar el alimento le sirve de anclaje al hongo. Es decir, es un hongo ectofito (externo) que no penetra en el interior de las hojas si no que lo hace solo superficialmente.
http://selva-del-leon.blogspot.com.es/2012/03/oidio.html


Su ciclo vital:
La enfermedad suele incubarse entre 5 y 10 días y si las temperaturas están por debajo de 10º y por encima de los 30 se reduce considerablemente la producción de conidias (Esporas).  
Si el hongo  se encuentra en unas condiciones en las que su propagación se dificulte puede conservarse en diferentes estadios durante mucho tiempo  a la espera de que las condiciones le sean propicias para su posibilidad de contaminación.  Es decir, permanece hibernando una vez ha “inoculado” el huésped (planta) subsistiendo en las yemas en forma inactiva.
Cuando estas condiciones favorables se dan, a las tres o cuatro horas de haberse depositado las conidias sobre las hojas  comienzan su germinación. Tras unas 16/20 asistimos a un crecimiento rápido del micelio produciéndose muchas ramificaciones en él. Ya a las 48/72 horas hay presencia de esporas en las hojas jóvenes y no tardarán ya en aparecer los síntomas que todos conocemos de la enfermedad.
A partir de aquí es la disminución de la humedad relativa la que favorecerá la liberación al aire de las esporas.  Y es precisamente a mediodía o primera hora de la tarde cuando parece producirse la mayor liberación de éstas. Vemos pues que para que maduren los conidios es precisa la presencia de luz. De hecho parece que los datos que se pueden extraer de las investigaciones tienden a demostrar que es a mediodía,  entre las 13 y las 15 horas, cuando se produce la mayor dispersión de esporas. Estos estudios respaldarían incluso el hecho de que las esporas germinadas a esas horas causan un mayor daño.
Resumiendo podríamos decir que sus fases de desarrollo son tres:
  • La latencia durante la que en invierno el hongo permanece latente e inactivo en las yemas afectadas en forma de micelio formado por una masa de filamentos (hifas).  
  • Al llegar de nuevo la actividad vegetativa en el inicio de la primavera, cuando vuelven a darse las condiciones que requiere el hongo, el micelio vuelve a activarse iniciando de nuevo su actividad vegetativa.  Las yemas infectadas por los hongos hasta ahora latentes, brotan algo más tarde que las sanas de manera que al producirse las nuevas conidias ya tiene “preparado” y disponible material vegetativo nuevo dónde asentarse y dónde rápidamente se producirá abundante crecimiento de micelio que invadirá rápidamente nuevos brotes y hojas.
  • Durante la primavera y el verano se produce la contaminación secundaria que sería la tercera fase.
Sobre este tejido recientemente infestado a partir de aquellas contaminaciones primarias se desarrolla más micelio que invade nuevos órganos  y en los que de nuevo se desarrollan nuevos conidióforos y se dan nuevas liberaciones de conidias repitiéndose el ciclo mientras las condiciones ambientales le son favorables.
Con estas nuevas dispersiones de conidias se contaminan otras yemas que permanecerán latentes durante el siguiente invierno para iniciar de nuevo su actividad en la siguiente primavera.
El ciclo de vida puede completarlo en tan solo cinco días si las condiciones le son favorables, pudiendo tardar más de quince en situaciones adversas.

Condiciones ambientales que resultan favorables para el desarrollo del oídio
Es más probable que se den problemas de este hongo cuando tenemos noches frescas y días cálidos (es decir, en primavera) o cuando la humedad que hay alrededor de los rosales no puede evaporarse por competo a lo largo del día.
El coctel más letal es humedad muy alta, en torno al 70/80 % y temperaturas suaves y es cuando se ve favorecido su desarrollo más rápido. Vamos, las primaveras muy húmedas.
Su desarrollo se ve ralentizado cuando las temperaturas superan los 35º, es decir en verano.
Retomando de nuevo su crecimiento cuando en otoño nuevamente descienden las temperaturas y sube la humedad relativa. Comprobamos por tanto que aunque no precisan de la presencia de agua para su desarrollo sí necesitan que la humedad del aire sea alta.
El escenario más favorable para que Sphaerotheca pannosa se desarrolle se da cuando se produce varias veces seguidas ciclos de noche/día con las siguientes características:
Noches en las que la humedad relativa es muy alta (90-99 %) o haya agua en superficie y a la vez la temperatura ronde los 15/16 %. Esta situación permite que los conidios se forme y germinen. 
Si a la vez, se produce de día una temperatura sobre los 26º y una humedad relativa entre 40/70 % la liberación de los conidios se verá favorecida. 
Los estudios demuestran que tres son los factores que intervienen de forma muy directa y clara en el desarrollo y propagación del oídio, las temperaturas, la humedad relativa y la presencia de agua libre sobre la vegetación .
  • La temperatura es el factor más importante: Aunque sin ser tan rápido, el desarrollo puede producirse entre los 5 y los 35º. Pero cuando las hifas se desarrollan a mayor velocidad es entre los 20 y los 35º, es decir, al final de la primavera. Es en este margen de temperaturas cuando las esporas germinan con mayor facilidad. El verano, con el aumento de las temperaturas traerá también la disminución del oídio cuando el termómetro marque temperaturas superiores a los 35 grados. Pero no bajemos la guardia porque puede regresar en otoño cuando descienden las temperaturas y en muchas zonas geográficas es un período de abundancia de lluvias.
  • Otro factor determinante, como hemos visto, para el desarrollo de Sphaerotheca pannosa son los niveles de humedad atmosférica que afectan a la producción  y germinación de las esporas  y más tarde a su diseminación. Estos cambios favorecen la constante producción y maduración de estas espor
  Algunos estudios publican datos relevantes:
 La producción de esporas se ve favorecida por una humedad relativa alta.
 La maduración de estas esporas se verá  beneficiada cuando hay una humedad relativa baja. Y ya sabemos que tras la maduración de las esporas el viento se encarga de su diseminación con lo que el contagio está servido.
Es lo que decíamos más arriba, noches con altas humedades relativas permite la constante producción de conidias que durante el día con temperaturas suaves y una humedad relativa no excesivamente alta  maduran y se propagan.
No olvidemos de otra parte que a pesar de que la humedad del ambiente no sea alta por motivo de la transpiración de las hojas su superficie puede llegar a niveles de humedad bastante altos lo que hace posible que germinen las esporas.
  • La lluvia o la presencia de agua libre produce el lavado y arrastre hacia el suelo de las esporas dónde no son viables. Además de limpiar el aire de esporas también las limpia de las hojas. Igualmente el hecho de que haya agua sobre los órganos vegetales dificulta la germinación de las conidias y el crecimiento del micelio y por tanto a la larga en estas situaciones de agua libre se dificulta la dispersión de las esporas. Sabemos que la gravedad con la que afecta el oídio en zonas geográficas muy secas y con mucha insolación es mucho menor. Sabemos que en zonas geográficas dónde se dan unos inviernos muy rigurosos y una fuerte insolación y sequedad ambiental el oídio se produce con menor virulencia. Madrid, dónde yo tengo mi jardín sería una zona que se ajustaría a estos parámetros con unas primaveras con días calurosos y una humedad ambienta muy baja.


Dejamos aquí las explicaciones sobre el comportamiento de este hongo y de qué modo se desarrolla sobre nuestros rosales para continuar en una próxima entrada en la que trataremos las formas en que podemos prevenir el oídio y quétratamientos podemos aplicar si nuestros rosales ya han sido contagiados.

Mi jardín como lo ven los pájaros...

Mientras ayer limpiaba de malas hierbas una zona que se me ha descuidado un poco, mi marido subió a la plataforma dónde ubica su telescopio para observa el firmamento. Es una de sus aficiones, mirar estrellas!! (Me acaba de rectificar y dice que no solo mira estrellas, que mira nebulosas,
planetas..."objetos celestes" es la expresión jajajaj )Vale, Pues eso, que pusimos una plataforma a la altura de la cumbrera del tejado y allí se sube como un gamo a contemplar el cielo.
Lo habitual, lógicamente, es que suba de noche. Sobretodo las noches sin luna y sin viento. Pero ayer le apetecía hacer unas fotos desde allí y son éstas que cuelgo en la entrada.
Casi no reconozco mi jardín. Es todo una masa de árboles en la que casi no se distingue nada. Se me ha ocurrido al verlas que esto que muestran es lo que ven los pájaros cuando sobrevuelan mi jardín. Son curiosas estas fotografías...veis la sombra de un "humano" proyectada sobre los árboles? jejejje es el del telescopio!!
Cuesta reconocer qué zonas se ven. Si me fijo bien distingo los dos pinos grandes del final de jardín en el tercio superior de la foto, más o menos en el medio. Y delante de ellos los dos olmos que ahora están sin hojas...ummm...y en el medio, justo en el medio de la foto se vislumbra entre el resto del arbolado mi pequeño olivo.
Están hechas al atardecer por eso tienen esa luz tan dorada. Aquí se ve mejor el olivo, también en el medio, algo más de cerca...
Y mimosas!! Muchas mimosas...que ya están preparándose para el protagonismo que tendrán al inicio de la primavera.
Las casas a lo lejos de una de las urbanizaciones cercanas...se ve tan chiquitas!!!
Se divisa con claridad las bolsas de seda con procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) en algunos pinos de mi vecino. Si queréis saber más sobre la procesionaria podéis visitar la página de Waste.ideal. Tiene incluso un vídeo explicativo absolutamente interesantes dónde nos explica que la solución no es fumigar con las repercusiones negativas para el resto de la flora y fauna y que se han hecho pruebas que demuestran que los resultados en pinares fumigados comparándolos con otros que nohan recibido fumigaciones no tienen grandes diferencias. Abogan por los depredadores naturales. Os recomiendo, de verdad, ver este vídeo, estoy segura que os parecerá muy interesante e ilustrativo!!
 
Así es, favorecer las visitas de pájaros e insectos a nuestros jardines es favorecer un control natural de las plagas. Plantar arbustos y árboles que produzcan frutos que es les pueda servir de alimento en invierno, cuando escasea la comida en el entorno, es una manera de atraerlos a nuestro espacio. Fabricar habitáculos que les sirvan para resguardarse durante el invierno e incluso para anidar también es una estupenda idea. Y es que ellos, los seres vivos que viven en nuestro jardín, también son nuestro jardín!! Ese mundo rebosante de vida dónde pueden convivir si ayudamos a ellos, infinidad de seres que aunque algunas veces nos dejan las hojas de los rosales no tan perfectos como quisiéramos...a cambio, hace una estupenda labor insecticida. Mucho más efectiva y mucho menos perjudicial para el entorno que el uso indiscriminado de productos químicos.
Debiéramos ser conscientes de las repercusiones de nuestra intervención en ese equilibrio que la naturaleza mantiene a largo plazo. 
Cada día soy más consciente de que debo asumir que tengo un espacio lleno de vida que cuidar y no un lugar aséptico de laboratorio dónde solo debo permitir que crezca la flor más perfecta... Deben coexistir en él multitud de seres vivos. Al fin y al cabo, con mi consentimiento o sin él, lo harán. Porque tratar de controlar absolutamente este espacio lleno de vida es pura quimera. Quizás debiera acostumbrarme un poco más al hecho de que las plagas, si no llegan a desarrollarse de un modo peligroso para la superveniencia de las especies, generalmente, se solucionan con sus depredadores naturales y proporcionando a las plantas las condiciones idóneas de cultivo... y al fin y al cabo, me pregunto a veces si esa perfección que anhelamos en flores y hojas es menos hermosa con la presencia (y efectos) de estos seres vivos que habitan en nuestros jardines. En la naturaleza nada es tan rotundamente perfecto en lo puntual y en cambio el conjunto...ay!! Cómo nos emociona. Verdad? Por qué nuestros jardines debieran aspirar a esa perfección?


Me gusta acercarme al lugar en el que ha estado un pájaro tras levantar el vuelo y ver la tierra que después de escarbar buscando bichitos ha ido a parar a mi camino de piedra ajjajaj siempre pienso que en el pico se ha llevado unos cuántos pulgones!! :) Que solo ha ensuciado un poco el camino pero que no ha dañado al resto de seres vivos como hago yo cuándo fumigo...en fin, es un tema que daría para hablar largo y tendido!! Esto solo eran unos pensamientos que me vinieron al colgar estas fotografías para compartirlas con vosotros.

Se presiente...

La semana pasada nevó y las noches de estos últimos días han venido de la mano de muy bajas temperaturas y de un viento que hiela los huesos. Es invierno, sí, debiera de estar todo el jardín parado..Pero no lo está. 

Hoy he comenzado mi paseo algo más tarde que de costumbre. El sol ya bañaba el jardín con sus tibios rayos.

La mañana está muy desapacible. Un viento gélido hace vencer los árboles y produce una hermosa melodía con el crujir de sus ramas. Entre ellas se atisba el cielo limpio de nubes y los rayos de sol inundan el jardín tiñéndolo de unos tonos precoces para el tiempo en que nos encontramos.
En mi camino hacia la zona que algún día espero que será el Jardín Secreto, cuando a ratos paraba el viento, notaba la calidez del sol. Me han llamado la atención las yemas del almendro que comienzan a despertar preparándose para su gran fiesta cuando pronto se cubra todo él de miles de flores blancas.

El paseo de esta mañana me ha hecho percibir que algo comienza a latir. Se alargan los días y las plantas lo notan. Un aumento de luz que es suficiente para que algunas incluso se activen ya!! La savia latente empuja ya las yemas de Crataegus Azarollus y las invita a abrirse.

Me gusta pasear por el jardín de forma pausada. Lo he dicho mil veces. Verdad? Pero es que es así!! Se descubre tanto mirando con detenimiento, parándose a cada rato, observando despacio lo que hay en él...y hay tanto!!
Ahí estaba esta mañana una de mis Budleia Davidii, aguantando con sus hojas contra viento y marea y eso que no está precisamente en una zona resguardada. Pero así son algunos arbustos, más resistentes de lo que a veces creemos.

Algunos rosales (y ahora que lo pienso son los que más sol reciben) tienen las yemas claramente activas y otros..Ay qué poquito les falta para comenzar!! (Sally Holmes


Incluso algún otro como Pricess Anne y Rugosa Hansa muestra sus diminutas y vírgenes hojitas ya brotadas asomando apenas entre la hojarasca del acolchado.

Los botones de un Salix empiezan a dejar asomar sus preciosos amentos como un pompón de terciopelo.

Los níspero (Eryobotria japonica) siguen en flor. Es de los pocos árboles que florecen en invierno y su alrededor es un constante zumbar con las abejas al reclamo de sus flores. Mirad éstas!! Tan afanadas en su recolección...jajaja Qué hermoso, verdad!! Aspirar el aroma de estas bonitas flores es una delicia. Nunca hasta este año me había parado a contemplar sus aterciopelados cálices que albergan unas flores tan delicadas dónde pareen no caber tanto estambre...



Los brotes de Viburnum rhytidophyllum están distintos de estos días de atrás, como si una vida nueva los recorriera...

Un día bonito a pesar de lo gélido del viento. En el aire y en la luz de hoy se presiente ya el latir que se hará esperar todavía un poco más para estallar, pero no tanto, no tanto!!... Y cuando llegue de nuevo ese baile, como siempre, en el ciclo de las estaciones, lo comenzará Acacia dealbata (Mimosa). Ella ya está preparada para inundar el espacio de dulce aroma con sus botones florales formados!!

Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...