Cómo pasa el tiempo!! Ya la segunda vez que realizo este trabajo.
El año pasado por esta época, os hablaba de la importancia de esta técnica de jardinería. De sus ventajas y de los beneficios que aporta al suelo del jardín así como del sistema que utilicé y como siempre, con fotos paso a paso, fui mostrando de qué manera lo hice. Claro, la temporada anterior fue la primera. Todos los bancales eran nuevos y hubo que preparar toda la tierra previamente antes de protegerla con el mulch. Este año en cambio ya no parto de cero. Mi jardín comienza a hacerse mayor!! ajjajaja Es broma, claro!! :)
Dado que en estas dos entradas que os pongo a continuación y que podéis visitar pinchando en el enlace, contienen bastante información sobre esta técnica de jardinería hoy me limitaré a mostraros como he puesto una buena capa de estiércol bajo el acolchado que ya puse el año pasado. Si tenéis interés en leerlos aquí están los vínculos:
¿Os pongo ahora una imagen que me hace temblar las piernas? Un montón de estiércol!! Porque sé lo que supone. Mil paseos de carretilla arriba y abajo recorriendo un jardín en pendiente que no es nada pequeño!! Pero en fin, todo sea por nuestros queridos jardines..
Os muestro como he ido haciendo este trabajo pero antes quería comentar algo que me parece de suma importancia: El momento del año en que se aplican los acolchados es algo a tener en cuenta.
Pensemos que esta capa protectora lo que hace es preservar las condiciones del suelo. Si la ponemos sobre un suelo helado estaremos "guardando" y preservando las condiciones heladas de ese suelo. Con el acolchado impediremos que el sol caliente el suelo y por tanto las raíces crecerán en un suelo que seguirá helado aún cuando exteriormente esté calentando el sol.
Igualmente si ponemos un acolchado sobre un suelo recalentado y reseco en verano, lo que estamos haciendo es guardar ese calor y sequedad bajo él.
Lo ideal es poner el acolchado al inicio de la primavera (cuando el suelo se ha atemperado ya y ha perdido el frío que le proporciona las heladas del invierno) y en otoño (Cuando el suelo ya ha perdido las altas temperaturas que alcanza en verano).
No he regado antes de hacer este trabajo porque ha llovido mucho estos días de atrás y el suelo tiene humedad suficiente. Regar ahora a riesgo de heladas nocturnas no creo que sea conveniente. Pero sí es cierto que si el suelo está seco conviene antes de acolchar aplicar un buen riego.
Bueno, ahora sí, aquí tenéis un "paso a paso".Por supuesto no es más que la forma que yo tengo que hacerlo, ni la única, ni la mejor imagino. Pero hacerlo por este orden y de esta forma me resulta cómodo y me está dando buenos resultados de momento.
1.- Lo primero ha sido retirar con la escoba metálica toda la capa de acolchado formada por madera troceada hacia un lado fuera del bancal.
Como podéis ver, sí, salen algunas malas hierbas pero no demasiadas. El acolchado mitiga en buena parte este problema.
2.- Con el escardador he cortado las malas hierbas que he podido. La verdad es que es una herramienta que te permite cortar la mayoría de hierbas si el suelo está bien trabajado y por tanto no está endurecido. De otra forma hay que hacer demasiada fuerza.
Es cierto que cortando algunas de las malas hierbas no se soluciona el problema pero la verdad, "hacerse a mano", hierba a hierba, un jardín tan grande...como que no me veo con fuerzas para afrontar tamaño trabajo!!
3.- A continuación, con la escoba metálica retiro la mayoría de las hierbas ya cortadas. Podría dejar muchas porque se compostarían debajo del acolchado pero algunas otras ya sabéis que vuelven a enraizar. No obstante, alguna siempre se escapa, claro.
Ahora tenemos el suelo limpito de yerbas y listo para protegerse. No lo he labrado porque mi suelo está muy trabajado del año pasado cuando preparé los bancales y no suelo pisotearlo mucho lo cual hace que no esté demasiado compactado.
4.- Es cuestión de traer ahora en la carretilla el estiércol que necesitaremos.
5.- Extiendo sobre el suelo una capa bien generosa.
Cómo me gusta el aspecto del suelo limpio y con esa capa negra del estiércol encima!! El bancal da aspecto aseado, cuidado... :P
6.- Y por último, tendremos que reponer sobre el estiércol la madera troceada que habíamos retirado anteriormente y que hace de mulching o acolchado.
Et voilâ!! El bancal limpito, nutrido y protegido!! Este, claro...no quiero deciros la de metros de bancales que tengo por hacer!! Poco a poco...