Mostrando las entradas para la consulta philadelphus ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta philadelphus ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas

Organizando los trabajos de poda de invierno en el jardín. Unos conceptos muy generales sobre la poda.

Preparadas las tijeras podadoras? Nos hemos adentrado ya en la segunda quincena de febrero y en los jardines con climas como el mío dónde los inviernos son fríos pero en los que a partir de estas fechas es raro que se produzcan grandes heladas, es el momento de poner a punto el equipo de poda y empezar a pensar ya en realizar los primeros trabajos de limpieza y cortes de algunos arbustos caducifolios. 

Conviene revisar tijeras de mano, sierras, tijeras de dos manos... deberían estar en perfecto estado de revista. Nada más odioso que desplazarte hasta un arbusto con la idea de podarlo llevando todo el arsenal de cosas que se precisan y comprobar una vez allí que las tijeras están agarrotadas y no hay manera de hacerlas funcionar o que tienen mugre atrasada desde la última vez que las usamos. Vuelta de nuevo a casa a ver si solucionamos el problema...uffff qué rabia me da!!
Hacer una buena revisión de todo el material nos ahorrará problemas pero sobretodo permitirá que nuestras herramientas puedan hacer bien su función.
A partir de ahora las necesitaremos constantemente así que sería bueno revisarlas ahora y comprobar que funcionan perfectamente y si no es así realizar las reparaciones necesarias.
Y por supuesto, el grado de limpieza y desinfección debería ser escrupuloso. No exagero. Pensad que si podamos una planta con patógenos y de ahí nos vamos a otra a realizar cortes con la misma herramienta, las probabilidades de contagio son bastantes.
Lo ideal "idealísimo" sería una desinfección a conciencia tras cada uso sobre una planta.pero debo reconocer que cuando te tiras horas y horas de arbusto en arbusto recorriendo el jardín mientras vas podándolos se hace algo difícil subir y bajar hasta casa para desinfectarlas totalmente.
Yo os cuento lo que hago que desde luego ya adelanto no es lo idóneo pero... Cuando termino la jornada de poda lavo con agua y jabón las tijeras (y todo el material de poda) restregando bien para eliminar cualquier resto de resinas, maderas o manchas sobre el metal  y las empuñaduras (odio los mangos pegajosos ajajjaja). Las seco bastante bien con un trapo viejo y limpio que tengo para esta finalidad y luego las desinfecto metiéndolas en vertical en un recipiente con peso (para que no se vuelque) lleno de lejía. Las dejo ahí uno o dos minutos, no más, porque la lejía es muy corrosiva para el metal. Las vuelvo a enjuagar bien con agua clara esta vez y a continuación las seco escrupulosamente. Cuidado porque si no se elimina cualquier resto de humedad las tijeras se oxidan!! Y ya están listas para un nuevo uso.
Durante la jornada de trabajo, entre planta y planta, no realizo toda esta limpieza. Lo que hago es llevarme una gamuza de secar y un botecillo con alcohol en una cajita que compré especialmente con este fin. Cuando termino de podar un arbusto, limpio los posibles restos pegadosa las hojas de las tijeras con la gamuza y luego las rocío a conciencia con alcohol. Como se evapora muy pronto, al llegar al siguiente arbusto ya las tengo secas y listas para usar de nuevo.
La cajita me sirve para varias cosas: No siempre dejo las herramientas a cubierto, a veces las pongo en una zona que tengo sobre la caseta de Iker dónde tengo más cosas de jardinería y esta zona aunque techada, no está cerrada por puertas de manera que  no se encuentra a salvo de la humedad.

En una ocasión después de unos días, fui a coger una podadora y estaba oxidada. Afortunadamente eran unas tijeras de esas que venden en las grandes superficies que tan sólo cuestan unos pocos euros. Si me llega a pasar con las de ahora me da un pasmo!! 
Unas buenas tijeras valen un dinero y hay que cuidarlas si queremos que nos duren y que realicen bien su función. Este sistema a mí me resulta cómodo. Después de probar varios sistemas creo que éste de la caja es el que me resulta más práctico (y barato porque creo recordar que me costó 1,5 €).
Antes tenía tijeras de tres al cuarto y no me importaba incluso perderlas pero me convencí de que sólo las herramientas buenas aguantan la tralla que se les da en un jardín grande y son con las que se pueden hacer cortes limpios durante mucho tiempo, así que me he ido comprando un buen equipo de poda. Y como todo lo que cuesta esfuerzo tener, al menos yo, lo cuido.
Entre corte y corte no me gusta dejar las tijeras sobre el suelo húmedo ni sobre las piedras y la manera de tenerlas siempre localizadas es dejarlas sobre la tapa de la cajita abierta, junto al arbusto que voy a podar.
Es una caja de plástico alargada de esas que venden en los chinos creo que para meter los bocadillos. No pesa y tiene las dimensiones suficientes para que me quepan dentro las dos podadoras, las tijeras de cortar flores, la navaja de injertar, el botecito con alcohol y la gamuza que utilizo para limpiarlas de los restos de la poda de un arbusto. Cuando he terminado el día me caben envueltas con otra gamuza limpia que tengo unas vez las he limpiado y secado en profundidad. Las envuelvo porque así evito que les entre humedad ninguna. 
Este es el primer año que no seré yo quién pode mis arbustos. Si eres lector asiduo de este blog sabes que estoy recuperándome de unas fracturas en la pierna así será mi ayudante habitual (del que ya os he hablado varias veces) quién realice estos trabajos. Se nota que es él porque en las fotos que ha sacado se ven las tijeras en el acolchado y no en la caja como le pedí ajajjaja Le mato!! :-).
Qué maniáticos nos volvemos con la edad! Lo reconozco. Me pasa igual con mis cuchillos de cocina, mis tijeras de costura o mis pinceles de pintar al óleo. En realidad no me gusta que nadie use mis herramientas ajjajaj
Lo cierto es que estoy como los conductores cuando van de copiloto y el que conduce el coche cuelga todavía la "L" en el cristal de atrás ajajjajaj Sufriendooo!! Bueno, no pasa nada. Esto también me convencerá de que no hay nadie imprescindible y que los demás (si se tiene la paciencia con ellos de explicarles bien las cosas) también pueden hacer los trabajos que siempre hemos hecho hasta ahora nosotros y con resultados muy parecidos. Un bañito contra nuestra soberbia viene estupendamente bien en la vida. Eh! jejeje Así que quiero convencerme de que durante este mes y el que viene sobretodo, algunos de mis arbustos van a ir a la "peluquería" y los van a dejar aseaditos y estupendos sin sufrir daño alguno.
Estoy pensando que no he colgado nunca un artículo en el que explique como se desmontan unas tijeras de podar y creo que esto estaría bien el saberlo. No es que se haga todos los días pero yo suelo hacerlo cuando comienzo la temporada de poda y así puedo limpiarlas hasta el último rincón. Me comprometo a colgar un post con fotografías explicando el proceso de desmontado. A ver si encuentro un rato!!
Bien, tenemos nuestro equipo de poda listo y planificados los trabajos de poda? Ummm no? Salimos al jardín tijera en mano y a voleo comenzamos? jajaja No. Verdad?
Es cierto que en un jardín pequeño no hay mucho que planificar  y que aunque el mío sea grande, muchos arbustos no han crecido lo suficiente como para precisar todavía verdaderos trabajos de poda ya que les basta por ahora con una poda de formación. No obstante, ya llevo más de tres años plantando montones de rosales y arbustos y aunque no todos, muchos ya sí precisan de cuidados en este sentido. 
Os reconoceré que todavía preciso de múltiples anotaciones. No siempre recuerdo en qué mes florecen algunas plantas y otras, no han tenido tiempo de hacerlo en mi jardín porque se plantaron no hace tanto así que no sé con seguridad cuando lo harán en mi clima. Poco a poco los trabajos de poda van aumentando a medida que aumentan las plantaciones y van creciendo las que se pusieron hace algunas temporadas y este año he pensado que lo mejor era echar mano de mi base de datos.
Seguramente cuando pasen los años, ya no precisaré hacer estas consultas pero de momento me siento más segura consultando la información.
Reconozco que soy bastante metódica y ordenada con las cosas del jardín. Sí, un poco cabeza cuadrada :-) Pero es que yo necesito tener los asuntos de mi jardín perfectamente controlados y a mí me resulta muy cómodo hacerlo de esta manera. Si queréis os cuento:
Cuando cuidaba del otro jardín anterior ya me creé una base de datos dónde anotaba cada planta que compraba y alguna información sobre ella.
Al venir aquí traté de imaginar cuales serían las necesidades que a nivel de información sobre cada planta precisaría en el futuro. Lo pensé muy detenidamente tratando de imaginar mil situaciones. Afortunadamente me pasé por exceso y no por defecto. Y digo esto porque incluí en ella campos que por entonces no precisaba y que ahora me vienen de perlas porque me permiten ordenar el listado de mis plantas por mil criterios.
Es cierto que esta base de datos es útil porque siempre he tenido la constancia de ir anotando en ella toda la información sobre cada planta según he ido comprándolas. Como es lógico de nada vale una base de datos que no está actualizada. 
Compro una planta y anoto en ella desde el tipo de suelo que requiere a la insolación, el momento (teórico) de la poda/podas...incluso cuando ya está plantada, anoto su ubicación en el jardín. 
Esta base de datos cuenta también con una agenda dónde detallo las fechas de aplicación de productos, las dosis, las proporciones. Cómo voy viendo evolucionar las plantaciones en cada momento del año.. En fin, es casi un diario.
Excesivo? ummmm No!! Tener un control de las plantas que tengo de cada variedad a mí me sirve para muchas cosas. Por ejemplo, vosotros recordáis, así, de memoria, cuántos rosales tenéis? O cuántas salvias? Yo no. Cuando en breve prepare los abonos orgánicos tendré que echar la cuenta de los que precisan y los que no precisan abono (los recién plantados por ejemplo) y en base a ello realizar la cantidad de mezcla que precisaré.
Escribiendo este artículo acabo de descubrir que tengo unas 45 salvias jajajajja Para qué me vale saber esto? Pues por ejemplo para organizar los trabajos que tendrá que ir haciendo mi ayudante. No es lo mismo calcular cuánto le llevará podar tres Amelanchier pequeños que 45 salvias. Está claro.
Es más, creo que tener anotados los trabajos que se van realizando en el jardín es un sistema estupendo para saber si una técnica da o no resultados aplicada en un momento dado. Es difícil recordar de una temporada a otra cuando hemos fertilizado, aplicado aceite insecticida o podado un arbusto concreto. Tener las cosas anotadas a mí al menos, me sirve para comprobar los resultados y en caso de no ser satisfactorios, variarlos. Además, hay plantaciones que no requieren una poda regular si no que puede hacerse cada equis años. Quién recuerda si hace dos o tres temporadas se podaron?
Hasta que no vemos crecer una planta en nuestro jardín no sabemos su comportamiento. Una cosa es la consulta que hagamos en un manual (muchas veces escrito por autores de países o zonas con climas muy distintos al nuestro) y otra cosa es el comportamiento concreto de nuestra planta.  El manual o el blog de jardinería puede aconsejar la poda en un mes concreto pero eso sería adecuado en el clima del que está hablando. Es posible que en nuestro jardín esta misma poda haya que adelantarla un poco o retrasarla. Por eso conviene anotar cuando aplicamos cualquier técnica jardinera (poda, abonos, purines,  enmiendas del suelo, productos que aplicamos, proporciones de los mismos...) para tener seguridad de qué hemos hecho y si los efectos no son los deseamos poder modificarlos en el sentido que sea preciso. 
A la hora de decidir el orden en que se irán realizando las podas he tenido muy en cuenta el clima de mi jardín. Este es un factor determinante. Ya llevo varias temporadas viendo crecer muchos de los arbustos que hay en él y puedo saber de qué manera se comportan con seguridad. Los que llevan poco tiempo, en realidad solo será preciso aplicarles podas de formación y esperaré a ver resultados aplicándolas en el mes que teóricamente tengo anotado que se deben realizar. Al año que viene tendré oportunidad de hacer los cambios que vea necesarios.
Como os decía, he sacado el listado de las plantas que deberían podarse durante estos meses de enero, febrero y marzo. No me gusta podar en pleno invierno, de ahí que aunque la información que tengo sobre estos arbustos diga que se debe realizar la poda en este mes, yo he preferido aplazarla hasta este de febrero. 
Y no me gusta podar en pleno enero porque la mayoría de plantas que se podan cuando están en reposo son mucho más sensibles a la congelación porque no pueden cicatrizar sus heridas, lo que a su vez las convierte en presa fácil para sufrir enfermedades que pueden contraer a través de los cortes. Incluso son muchos los tallos que acaban muriendo tras la poda al penetrar la helada dentro de ellos. Así que limito la poda de enero a almendros y plantas absolutamente resistentes. El resto las agrupo con las de febrero. Iré colgando artículos sobre la poda de algunos de los arbustos que figuran en estos listados. Algunos tratarán sobre su poda de formación ya que los que tengo en el jardín de estas variedades no son adultos todavía. Otros ya sí podrá versar sobre la poda de mantenimiento al haber alcanzado el arbusto un nivel de desarrollo suficiente.
De ser un clima más cálido algunos arbustos estarían ya podados. Si fuera más frío, decidiría retrasar un poco la poda de algunas plantaciones que fueran algo delicadas porque aunque es difícil que vengan heladas profundas, todavía puede hacer bastante frío e incluso caer alguna helada suave que dañe algunas de las plantaciones menos resistentes (recordemos lo que decíamos en un artículo reciente sobre las estrategias de las plantas para adaptarse al frío y las heladas)
Este año es todo distinto como os decía antes. No poder realizar yo directamente la poda me obliga a organizar todo el trabajo para liar lo menos posible a mi ayudante y que pueda tener claro qué toca podar en cada momento. No es alguien con experiencia en este trabajo así que no puedo exigirle que sea él quién decida qué planta se poda ahora y cual podemos aplazarla unas semanas.
En todo caso, y esto creo que es de especial relevancia, pienso que hay que tener dos cosas muy claras en mente:
Antes de realizar cualquier tipo de poda es imprescindible conocer y comprender los hábitos que en cuanto a crecimiento tienen nuestros arbustos. Sí, ver cuando florece y en qué tipo de rama lo hace. No pasa nada por dejar un arbusto sin podar un par de años mientras lo observamos y comprendemos de qué manera crece y produce flores. 
Me habréis leído en muchos artículos que yo no podo mis rosales los primeros años. Cada rosal es un mundo y crece a su aire. Los dejo crecer de forma que me permita ver cual es su tendencia, su "estilo". Los observo, trato de entender de qué manera crecen y cuando ya están asentados y comienzan a tomar cuerpo empiezo a podarlos sabiendo cual es su tendencia de crecimiento y tratando de practicarle el tipo de poda que más se ajuste a su forma natural.
Pues con los arbustos igual. Es mejor dejarlos a su aire en el jardín un tiempo y ver de "qué pie cojean" para estar seguros de que si finalmente nos decidimos en el futuro a podarlos, hacer un trabajo adecuado a la especie o variedad.
Sólo entonces, cuando hayamos comprendido su comportamiento, podemos aplicar una poda correcta. Sin saber nada de un arbusto es una barbaridad meterle las tijeras!!
En segundo lugar, no debe podarse sin saber para qué se poda. Podar por podar no tiene sentido alguno. Puede ser para aumentar la floración, para acotar el tamaño de una planta que está superando el espacio que se le tiene asignado, porque se trata de un arbusto cuyo estado de envejecimiento ha provocado que poco a poco se deteriore y llegue a casi morir...en fin, los motivos pueden ser múltiples. Pero también podemos tener arbustos jóvenes en nuestro jardín que están creciendo y floreciendo de maravilla. Es absurdo podar algo que no lo precisa.
En la naturaleza nadie poda. O mejor dicho, de alguna manera podría decirse que ella misma se autopoda dejando caer ramas viejas o enfermas o dañadas por el viento. Los animales a veces comen partes de sus ramas.
Es verdad que las plantas en la Naturaleza las plantas crecen en su hábitat. En un jardín por el contrario las cultivamos en condiciones artificiales. Algunas veces eliminándoles las competencias de otras plantas que tendrían cerca cuando crecen de forma natural.
Y en todo caso no tienen la ayuda del jardinero que hace declinar la balanza hacia el lado que él desea ayudando más a unas plantas en detrimento de otras (malas hierbas por ejemplo). En la Naturaleza solo sobreviven los mejores.
En un jardín por el contrario cultivamos los arbustos normalmente por razones estéticas y aplicamos las podas para fomentar su producción de flores o de frutos.
Pero además, la poda en un jardín en ocasiones beneficia la salud del ejemplar al eliminar ramas muertas o que crecen hacia dentro permitiendo que el aire y la luz puedan llegar a su interior. También mediante la poda pueden crearse con las plantas zonas de sombras necesarias en un jardín o lo contrario. 
En todo caso, como decimos, siempre será necesario tener clara cual es la finalidad que tenemos cuando nos disponemos  podar un arbusto.
Es difícil explicar todo lo referente a los trabajos de poda así de corrido pero creo que hay unas nociones básicas por dónde uno debe comenzar a aprender.
La poda no es ningún misterio ni ciencia oculta que haya que desentrañar, ni es imposible de realizar por alguien sin demasiada experiencia. Es simplemente cuestión de observación y con ella llegar a entender como funciona cada planta en algunos aspectos (especialmente la floración). Entendiendo ésto, es fácil determinar el momento en que debe podarse cada planta. El "cómo" también. Aunque reconozco que ésto ya tiene bastantes más matices.
Llevo ya días preparando unos artículos sobre poda. Trataré de ofrecer bastante detalle en ellos y brindar la información de manera ordenada, metódica y a ser posible, fácil de entender. Pero lleva su tiempo confeccionarlos!!
Vamos a dar unas cuántas generalizaciones (hay excepciones, eh!) que aunque soy consciente de que la mayoría de quién me lee sabe de sobra. Pero no quiero olvidarme de cuando hace ya muchos años, leía los pocos libros de jardinería que caían en mis manos y llegaba a hacerme un verdadero lío con algunos términos. Son conceptos que hoy los tienes por la mano y parece mentira que en algún momento no los supieras. Pero es así, nadie nació enseñado!!
Partamos de una premisa: el momento de la floración determina cuándo se poda. En qué tipo de ramas están las yemas florales determinará cómo se poda.
Empecemos por tanto por un término imprescindible de tener claro. Qué es en jardinería una "temporada". Por temporada se entiende el período que va desde que comienza la actividad vegetativa que suele ser a principios de año hasta que finaliza en otoño/invierno. Muchas plantas luego entran en letargo y cuando vuelven a despertar en febrero/marzo entran en la siguiente temporada.
Saber esto nos ayudará a saber distinguir la edad de las ramas. Este aspecto es de suma importancia a la hora de podar.
Veamos. Las ramas que broten en un arbusto de nuestro jardín durante la primavera/otoño, serán ramas de la última temporada.
Estas mismas ramas, cuando lleguen al invierno y cesen en su crecimiento serán ya consideradas ramas de un añoEs cierto que no tendrán un año (12 meses) de edad pero habrán pasado ya su primer período vegetativo. Esto conviene tenerlo claro para no liarnos!!
A la hora de podar es imprescindible saber distinguirlas. Vamos a ello!!
Veamos. Son ramas de un año aquellas que crecieron durante la temporada anterior. Suelen brotar en la parte externa del arbusto directamente desde el suelo y no se han ramificado todavía (lo harán la siguiente temporada). Pero ojo!! También son las ramitas laterales que brotan de una rama de dos o de una de tres años. En definitiva son las ramas que han crecido durante la última temporada.
Las ramas de dos años son los tallos que ya tienen ramificaciones.. En el primer año brotó del suelo y durante la segunda temporada este tallo emitió sus ramificaciones. Han pasado ya por dos veranos y dos inviernos.
Las ramas de tres años tienen una doble ramificación y han crecido ya durante tres temporadas.
Cuando hablemos de "madera vieja" estaremos hablando de ramas que tienen más de tres temporadas de edad.

Decíamos antes que la ubicación de las yemas florales en un tipo u otro de ramas nos va a determinar de qué modo podaremos un arbusto. Bien, pues el momento en que lo podaremos estará determinado por el momento de la floración (que a su vez estará determinado por las temperaturas).

Creo que estas ilustraciones que he realizado nos ayudará a entender un poco más. Ya veréis como es pura lógica!! :-).
Veamos, vamos a observar tres arbustos, una Kerria japonica 'Pleniflora', un Philadelphus y una Buddleja davidii. Por qué he elegido estos tres arbustos? Habíamos dicho que el clima y de qué forma florecen los arbustos (si han creado ya o no sus yemas florales y en qué tipo de ramas lo han hecho) son los dos factores que determinarán el momento y el modo de la poda pues bien estos tres arbustos florecen en momentos distintos y de forma diferente.
Los arbustos ornamentales pueden florecer en primavera. Pensemos un poco!! Si florecen en primavera es porque tienen ya formadas sus yemas florales en las ramas que brotaron la temporada pasada de crecimiento (o más anterior). No? (No pueden hacerlo en las ramas de la presente temporada porque ahora están en parada vegetativa o a punto de salir de ella)
Qué pasará si podamos ahora? Tan sencillo como que eliminaremos esas yemas que contienen las flores que se deberían abrir en primavera y nos quedaríamos sin floración.
Por tanto, deberemos podarlos una vez termine su período de floración
Si lo que pretendemos es aumentar su producción floral no deberíamos tardar en podarlos cuando las flores decaigan, así tendrán más tiempo para desarrollar antes de que lleguen el frío o las heladas las ramas nuevas que llevarán las yemas de floración de la próxima temporada.
El modo de podarlos está condicionado por el tipo de madera dónde brotan sus yemas florales. Estas yemas pueden estar presentes de varias formas. Veamos alguna de ellas:
En tallos de un año: Suelen ser arbustos sin una estructura propiamente dicha. Sus ramas rápidamente envejecen y dejan de florecer. Deben eliminarse cada año al menos un tercio de estas ramas envejecidas para mantener fomentar que broten tallos nuevos que son los más floríferos. A la vez, esta eliminación permite que el arbusto no se enmarañe con madera muchas veces muerta.
Ejemplo de este tipo de plantas serían los celindos, las espíreas, las forsitias, etc.

En tallos de dos años y que ya han producido ramas laterales. Es decir, sobre tallos que brotaron desde el suelo hace dos temporadas, que en la anterior (el año pasado) formaron ramas laterales (y por tanto tienen un año). Se entiende. Verdad?
Un ejemplo de ellas son las Kerrias (aunque esta planta también produce algunas flores en tallos que parten del suelo y que por tanto son de un año)

En tallos de madera vieja (de tres o más años). Solo comienzan a florecer una vez desarrollan ramas que hayan tenido tiempo ya de formar ramificaciones y cuya madera ya se considera muy madura o vieja. Estos arbustos no precisan normalmente mucha poda porque siguen floreciendo mucho tiempo en madera vieja. Ejemplo de este grupo serían los guillomos o el hamamelis.
Por el contrario, los arbustos que florecen al final de la primavera o en verano suelen hacerlo sobre la madera de este mismo año. Si florecen más tarde, es decir, más allá de junio, es porque lo hacen en madera de la temporada (Las ramas que brotarán tras el invierno). Son arbustos que crecen durante toda la primavera y el verano mientras van formando de nuevo la estructura de tallos que eliminamos en la poda. Al llegar el verano/otoño, producen la floración.
Si podamos ahora, no estaremos eliminando ninguna yema floral. Por tanto, podemos podarlas ahora, al final del invierno (si son resistentes). Así tendrán más tiempo de formar las ramas que contendrán las yemas florales que producirán las flores en verano/otoño.
En climas más suaves que el mío, también podríamos podar estos arbustos al llegar el otoño, pasada ya su floración. Yo prefiero hacerlo cuando el riesgo de heladas está lejos. Especialmente las plantaciones que no son muy resistentes. Además, durante el invierno, las ramas aunque deterioradas y secas ya por el frío, no dejan de proteger la base del arbusto.
Suelen ser arbustos que precisan mucha poda. Muchas veces con cortes a matasarra. Esta poda intensa favorece que broten con fuerza y florezcan en abundancia.
Podemos citar como ejemplos de arbustos que florecen en madera del año, las budleias, las santolinas, los hibiscos...

De momento vamos a dejar aquí estas breves y elementalísimas nociones de poda. Ya digo, tendremos ocasión de tratar la poda en profundidad en próximos artículos.
Como os comentaba antes, he realizado en mi base de datos las consultas de qué arbustos se podan en cada mes y estas imágenes que os incluyo a continuación son el resultado. 
Debo aclarar que no es mi intención podar la mayoría de arbustos aunque figuran en ellos aunque siempre está bien el tener anotado un momento indicativo para próximas temporadas (y que evidentemente modificaré según vea como se desarrollan estos arbustos en mi jardín con mi clima)
Digo esto para que no se tomen estos listados como una información válida para establecer el momento de poda de todos y cada uno de los arbustos que figuran en él se trata del clima que se trate. Éste se establece como venimos diciendo según el clima de cada jardín y según las necesidades de cada arbusto. Incluso aclararé que la mayoría de ellos no los podé desde que se plantaron y puede que no los pode en años. Repito, la poda no tiene sentido si no tiene una finalidad.
Primero porque mi jardín es muy joven y muchas de las plantaciones aún no precisan de poda alguna y segundo porque, como comentábamos, tiene que haber una razón concreta que me haga pensar que es preciso podar y de momento no todos necesitan ahora mismo de una poda que vaya más allá de la de formación.
Como podéis comprobar en estos cuadros no solo figuran arbustos propiamente dichos. También están incluidos algunos subarbustos y vivaces que precisan de división o limpieza al comenzar la temporada. Si bien no se trata de trabajos estrictamente de poda sí requieren eliminación de ramas secas, pinzados, recortes o limpiezas de hojas muertas que de alguna manera se asemejan a la poda. 
Los que tienen coloreado su nombre serán los artículos que iré escribiendo sobre su poda.
No están incluidos los rosales. Estos son un mundo aparte para mí y como tal los trato siempre en el blog. Son mis niños mimados :-)
Durante el mes de enero ya veis que hay pocos y en realidad no he realizado la poda de ninguno todavía.

Ahora, a mediados de febrero ya comienza a animarse las cosas.

Tan pronto inicia marzo es el momento de la mayoría. Ya sí que no hay peligro alguno de heladas. De todos modos los inviernos ya sabéis que son muy variables así que de un año a otro puede avanzarse o retrasarse la poda un par de semanas.
Si veo que las temperaturas aumentan y que se aleja del todo las heladas adelantaré la poda de alguno de ellos si es que lo precisan.
Y hasta aquí el artículo de hoy. Comienza una época de actividad intensa en nuestro jardín. Me permitís un consejo? Tomároslo con calma. Sin correr. Sin prisas. Derrochar unos minutos mirando el arbusto en su totalidad antes de comenzar.
Empezad siempre por lo obvio y lo que hay que eliminarse sí o sí: la madera muerta, enferma o débil y luego id avanzando despacio. Pensando cara rama importante que elimináis. Retiraros un poco de nuevo del arbusto para verlo en su totalidad. Ello os permitirá tener una imagen del conjunto para aplicar una poda que contribuya a darle un porte equilibrado. 
La poda no debería ser mutilación brutal si no una técnica lo menos agresiva posible para que nuestros arbustos ornamentales luzcan lo más hermosos posibles. La Naturaleza les dio un porte, un aire, una forma de crecer natural y hermosa. La poda debería respetar en la medida de lo posible ese porte natural y no empeñarnos en hacer crecer las plantas del modo que no es propio de ellas.
Y en último extremo. Ninguna planta se va a morir por ello. Si no sabemos con seguridad si cortar o no una rama, seamos prudentes pero sin atemorizarnos. Tened la seguridad de que no pasa nada por equivocarnos. Nuestras plantas nos lo van a perdonar ajjajaja Son mucho más fuertes de lo que pensamos!! Y en todo caso, nuestros errores nos van a ayudar a aprender a podar mejor para la siguiente temporada de poda.

Deutzia scabra 'Pride of Rochester'

Espero que cuando pasen un par de años esta Deutzia scabra 'Prinde of Rochester' se haya convertido en un precioso arbusto de casi dos metros. Al paso que va no me extraña. La compré muy pequeñita el verano pasado. La vi en flor en el vivero y no pude resistirme a la preciosidad de sus delicadas flores. Considerando que va a comenzar su segunda temporada en el jardín, la verdad es que ha crecido muchísimo. Todavía no es un arbusto de esos "imponentes" como es el caso de mi Philadelphus arbolito. Pero claro, es que aquel se tomó su tiempo en convertirse en lo que es hoy y esta pobre Deutzia es muy jovencita. Tampoco vamos a pedir peras al olmo. No? :)

Philadelphus, Weigelias y Deutzias son arbustos semejantes en varios aspectos. Los tres son de fácil cultivo. Cuando son ejemplares adultos producen unas floraciones que los convierten por unas semanas en protagonistas absolutos de la zona del jardín dónde crecen. Los tres crecen sin demasiadas exigencias de suelo siempre que no estén siempre encharcados por problemas de drenaje. Los tres adquieren con el paso de los años un buen tamaño y ninguno de ellos son adecuados para jardines pequeños precisamente por esta razón. 

Hacerlos crecer en espacios exiguos impide que adopten su estructura y forma natural que es precisamente la que los convierte en una belleza cuando están en flor. Los tres florecen casi en el mismo momento del año y en las ramas brotadas la temporada anterior, de manera que a los tres les conviene una poda muy semejante.

Deutzia scabra perteneciente a la familia de las saxifragáceas, las deutzias son arbustos caducifolios sin grandes requerimientos que pueden alcanzar más de dos metros, incluso tres de alto.

A pesar de que en algunas partes se dice que no soporta la sequía, la verdad es que la mía se riega bastante poco. De hecho por encontrarse algo apartada de los setos y tener que alargar un poco de manguera hasta ella, la he tenido meses sin riego (no en verano que lo hacía a mano, con manguera) y ha aguantado perfectamente. También es muy resistente a heladas incluso profundas y a suelos de no demasiada calidad aunque no le gustan por supuesto, los suelos encharcados o con mal drenaje pero es que este tipo de suelos le gustan a muy pocas plantas. Verdad? :)


Al igual que las weigelias y las celindas, Deutzia scabra florece en las ramas de un año ahora al final de la primavera. Ramas que durante el primera año brotan y será durante el segundo cuando de las axilas de sus hojas broten ramillas cortas en cuyos extremo formarán las inflorescencias de bonitas flores muy dobles en general blancas pero que pueden ser rosadas o incluso malvas en algunas variedades. Los pétalos externos tienen unas ligeras pinceladas en tonos rosados de una delicadeza que me chiflan!!


En alguna parte leí que forma frutos en forma de cápsulas pero las flores del año pasado cayeron al suelo sin formar nada así que no he tenido la oportunidad de verlos.
No es un arbusto para un jardín pequeño. Como comentábamos antes, para lucir todo su esplendor precisa espacio a su alrededor para adoptar su porte natural que es el más bonito: un gran arbusto estrecho en al base y con una copa amplísima formada por largas ramas que se curvan hacia el exterior.

Brotan sus ramas desde la base y cuando el arbusto está enraizado va emitiendo retoños incluso algo retirados del centro de la planta. En la fotografía siguiente puede verse como está emergiendo un pequeño brote a la derecha. 
Para reproducir Deutzia scabra puede esquejarse pero yo creo que lo más fácil es tomar uno de estos brotes que salen a los pies del arbusto tratando de sacarlo del suelo con algo de raíces con lo cual ya tendríamos un pequeño ejemplar enraizado.
Lo que menos me gusta es el tacto de sus hojas, un tanto ásperas y algo rudas, no sé, poco refinadas :) de un verde que no siendo nada del otro mundo tiene una bonita tonalidad. Bordes ligeramente dentados y ubicadas en el tallo de manera opuesta.
Si de algo precisa para florecer con profusión es de estar a pleno sol. Puede cultivarse en semisombra pero la floración no será tan abundante.
Se trata de un arbusto de crecimiento muy rápido que es fácil que se "desmadre" si no lo mantenemos rejuvenecido mediante una adecuada poda. Esta no debería retrasarse mucho después de la floración. Al igual que las weigelias, de podarlas muy tarde, la madera nacida en el año no tendrá tiempo de estar madura cuando vengan las heladas y es en estos brotes de la temporada anterior precisamente dónde florece.
Mencionaría su agradable aroma a pesar de reconocer que no tiene demasiada intensidad. Si te acercas a las flores percibes un delicado y agradable aroma muy sutil, muy levemente. Al menos esa es mi impresión.

Creo que este arbusto se encuentra feliz en mi jardín. Está sacando ahora unos tallos nuevos cuyo calibre es tan exageradamente mayor que las ramas del año pasado que hacen indicar que el arbusto ha enraizado perfectamente y que se va a dedicar a crecer a partir de que termine su floración. Incluso las hojas de estos brotes nuevos son muchísimo más grandes que las del resto de las ramas. Bien... seguirá contando con el cuidado de esta jardinera que está deseando verlo "subir" frente a la fachada del garaje y que el año que viene sí llegue a ser ya un foco de atención en esta parte central del jardín.


Philadelphus (Celindo) de arbusto abandonado a foco de interés en el jardín.

La primera vez que lo vi ni siquiera reconocí que era un Philadelphus. Unos troncos resecos, con la corteza desprendiéndose, altos como de metro y medio y en el extremo unas ramas tortuosas  que brotaban sin orden ni concierto sin formar una copa armónica en absoluto y en direcciones nada adecuadas. Al pasar  a su lado me dije "Tú,  lo que seas, te quedan tres telediarios" jejejje 

La siguiente ya estaba brotado y reconocí enseguida qué era: un viejo, descuidado y horrible Philadelphus.

A los pies de una plataforma muy grande de hormigón que hay en la parte baja de las terrazas que bordean la casa, si se mira desde arriba, mal que mal, pero desde abajo yo miraba aquel arbusto que no se regaba hacía un siglo y que no sabía lo que era un buen abonado y ...la verdad, aquella ubicación me descolocaba mirándolo desde la parte más baja del jardín.
Los Philadelphus suelen brotar en forma de mata y son de un gran crecimiento, por eso son difíciles de contener y al final acaparan el espacio asignado a las plantas compañeras que están a su lado. Solo con una poda adecuada se pueden mantener acotándoles el espacio.
Lo salvó primero mi respeto por las plantas que tienen mucha edad porque siempre pienso cuánto han tenido que luchar contra sequías, plagas, suelos pobres...para llegar a tener el tamaño que tienen. Pero lo cierto es que con respeto y todo, las posibilidades de que aquel arbusto durara muchos años más eran pocas si no se rejuvenecía. Y en segundo lugar el hecho de que tuviera esta formación, tipo arbolito. 
Las matas de celindos que brotan desde el suelo todas sus ramas formando arbustos redondeados, reconozco que solo me gustan cuando están en flor y tampoco es que me entusiasmen demasiado. Ya antes de comenzar a hacer el jardín tenía ganas de tener uno tipo arbolito que es como me parecen más elegantes estas plantas, con sus ramas arqueadas desde lo alto y curvas, así que quería en algún momento comprar uno y tratar de formarlo desde pequeño. 
Reconsideré mi decisión casi en firme de eliminar este ejemplar medio muerto. Pensé que era magnífico no tener que formar durante años un celindo recién comprado. Esta estructura con los pies despejados, sacando desde lo alto las ramas largas y que están a suficiente altura como para que puedan arquearse hacia el suelo como un enorme paraguas florido, este tipo de Philadelphus, sí, estos como el mío me encantan!!


Desconozco de qué variedad se trata y lo la verdad es que me encantaría saberlo. Así que si algún lector viendo las fotos tiene la amabilidad de decírmela estaría muy agradecida :)

Bien, pensé que sí, estaba viejo y descuidado y estaba muy mal formado pero era un Philadelphus de muchísimos años y hasta que yo llegara a tener con uno nuevo un ejemplar de estas dimensiones deberían pasar muchos años así que decidí conservarlo.
Eso sí, era preciso practicarle una buena poda de renovación si no quería perderlo. Estaba demasiado viejo y había sufrido demasiado tiempo el descuido así que pensé que de perdidos, al río y siendo consciente de la barbaridad que era practicarle esta poda en verano, lo hice arriesgando el arbusto!!

Entre nosotros, ajajjaja el riesgo no era total. Pensé que podía morir la parte alta, la de los troncos gruesos y viejos pero que el arbusto tenía unas ramas en un lateral que brotaban desde el suelo y que podría con ellas, en el caso de perder la planta madre, tratar de trenzarlas y formar de nuevo un arbusto con la misma estructura que éste con el paso de algunos años. En caso de haber visto que no rebrotaba hubiera tomado estas ramas bajas con la mayor cantidad posible de cepellón y lo hubiera trasladado a otra ubicación del jardín. Así que era riesgo pero no tanto, la verdad :)

Está plantado en una zona con el suelo exageradamente inclinado de modo que el agua de riego no había manera de que penetrara en las raíces. Dicho y hecho, esperé a que terminara la floración y lo podé a conciencia. En realidad solo dejé los troncos que partían desde el suelo y corté todas las ramas que brotaban de su parte superior.

Aprovechando que teníamos que poner el riego en el seto sur, tras la poda nivelé el suelo a su alrededor de manera que la base quedara horizontal. Le hice un poco de alcorque para que retuviera el agua del riego pero es una zona tan inclinada que el alcorque dura intacto muy poco y hay que ir rehaciéndolo constantemente. De todos modos ya lo considero fuera de peligro así que como no es un arbusto que requiera demasiado riego el alcorque no lo rehago cada vez que es necesario.
Tras ello lo aboné bien en profundidad.  Hace dos años no tenía compost de propia fabricación así que cavé un poco para eliminar el suelo superficial pobre y reseco y lo sustituí con una mezcla de un buen sustrato y estiércol bien fermentado. Acolché bien todo el alcorque para que se mantuvieran frescas y húmedas las raíces más tiempo y para protegerlo del calor y de la erosión. Y cuidé su hidratación durante todo aquel verano y hasta que el arbusto entró en letarlo. 

En cuanto empezaron a brotar las ramas nuevas vi el cambio. Nada que ver con su pasado. Hojas grandes, sanas y bonitas y ramas vigorosas creciendo con fuerza. El pobre celindo pensaría que le había venido Dios a ver ajajajja :) Cuándo se vio en otra igual acostumbrado como estaba al abandono absoluto! Rieguito frecuente, nutrición, buen acolchado... y lo ha sabido agradecer. Vaya que sí! 

Tanto ha cambiado este arbusto que incluso ya ni me molesta su ubicación. De un ejemplar casi muerto de puro abandono ha pasado a ser un Philadelphus digno de ser un punto focal en la parte central del jardín. No hay duda, es un ejemplar precioso. No os parece? 
Está plantado en un lugar que lo hace visible desde muchísimo sitios del jardín. Y desde cualquier punto que se mire es una verdadera belleza ahora que está en plena floración. Desde las terrazas de la casa se ve precioso ahora que está florido y desde cualquier parte de la zona central del jardín se te van los ojos a un ejemplar tan bonito :)

Me alegro mucho de no eliminarlo y haber invertido en él mis cuidados y tratar de sacarlo adelante y convertirlo en un ejemplar precioso como es ahora. Lo pensé el otoño pasado pero se me pasó el momento adecuado. A ver si éste otoño saco un rato para separar las ramas pequeñas que brotan desde abajo con una buena cantidad de raíces y me la llevo a otra parte del jardín para forma con ella un ejemplar que con el paso del tiempo se parezca a este.

Estas ramas que ahora son verdes, tiernas y claras. Aún sin lignificar.. cuando llegue la primavera siguiente estarán maduras y de sus laterales brotarán ramillas cortas que serán las que porten los capullos de las flores. Se habrán tornado oscuras y la madera se habrá lignificado. 
Lo interesante es ir eliminando las ramas viejas y poco productivas para incentivar que broten nuevas ramas nuevas que florecerán la siguiente temporada.
Mantener un celindo no es nada complicado si entendemos de qué modo florece. Las flores brotan en las ramas brotadas durante la temporada anterior. Ya en plena floración comienzan a salir vástagos nuevos que se distinguen perfectamente por su color verde. Estas ramas no florecerán este año, debe madurar su madera antes y esto lo hará durante los meses que transcurran hasta que llegue el invierno y la planta entre en parada vegetativa.


De todos modos para quién esté interesado en ver de forma práctica la poda de este Philadelphus me comprometo a colgar aquí un tutorial con fotografias y explicaciones paso a paso cuando llegue el momento.
Sí, antes de eliminar ejemplares de cierta edad en un jardín hay que sopesar las cosas. En ocasiones, con un poco de trabajo, una buena poda, cuidar de la hidratación y una buena nutrición cambia radicalmente muchas plantas y ellas saben premiarnos el esfuerzo cambiando y convirtiéndose de nuevo en plantas que nos deleita y cuya floración podremos disfrutar muchos años más. Ha merecido la pena salvar mi pobre celindo viejo. No hay duda.


Tardío este año, pero llegó el tiempo de los lilos!!

El año pasado a mediados de abril ya estaban en flor los lilos. La floración de la temporada pasada siendo como fue preciosa, no supera la de este año. Este año están que se salen!!

Normal. Han pasado del descuido total durante años y años a llevar ya dos añitos con buen riego, con nutrientes, con acolchados, practicándoles limpiezas de ramas muertas y de flores pasadas.


Mis lilos son agradecidos. Son viejecitos y están mal formados pero se les perdona con esta explosión de malvas, de algún blanco, pero sobretodo de delicados tonos malva.



Me asombra el contraste entre la rigidez y lo lignificado del interior del arbusto con la blandura de sus ramas. Ese arqueo producido por el peso de las panículas.
Los otros lilos, los que tengo al final del jardín junto a las escaleras de piedra este año apenas han dado flor. Se trasladaron el año pasado y han sufrido con el trasplante así que habrá que esperar a que se vuelvan a asentar bien para que de nuevo broten sus yemas de flor.
Pero éste, el lilo más grande que tengo en el jardín, parece que este año quiere compensar las otras ausencias. Tendré que hacerle sin falta una buena limpieza tras la floración a riesgo de que el año que viene se vea menos florido. Pero es imprescindible rejuvenecerlo. De todos modos me gusta su aspecto anciano. La corteza de sus troncos llenas de líquenes que demuestran que ya no es un chaval. 

No puede estar más cuajadito de flores!! Esta mañana, justo antes de colgar este artículo mi lilo se vencía bajo el peso de las flores cargadas de agua por la lluvia de esta noche y el aroma fresco y limpio, la visión de las gotas de agua chorreando de racimo en racimo, las hojas sobre las que se estaban depositados diminutos charcos de agua...tanto contraste de texturas y de colores. Lo reconozco!! Me abruma a veces tantas sensaciones ajjajaja 

Tenía pensado cuando planté la Robinia speudoacacia ponerla un poco más allá pero decidí formar una pareja de hecho con este lilo precisamente porque me encanta el contraste entre los dos tonos de las hojas. La robinia de un verde claro jugoso, Syringa vulgaris en tonos más azulados.
Este lilo crece a los pies de una de las terrazas del jardín delantero. A la misma altura que la joven Robinia. 
Mi viejo lilo sirvió de cobijo a un precioso Rosa 'Golden Celebration' que me traje del otro jardín y que estuvo a punto de morir por el trasplante porque fui incapaz de sacarlo del suelo con suficientes raíces. Pero se recuperó. Vaya que si se recuperó!! Este año junto a los pies del lilo emergen un montón de ramas del rosal que me preocupé de plantar bastante hundido su punto de injerto precisamente para eso, para que salieran muchos tallos del suelo y formara con el tiempo una mata más ancha que alta. 
La robinia y las ramas del lilo protegerán este rosal de las temperaturas tórridas del verano y aquí, las rosas de Golden Celebration pueden durar algo más. Es un rosal tan absolutamente hermoso pero de rosa tan delicada!! Tardé en encontrarle un buen lugar pero creo que este, cobijado un poco entre la exuberancia de sus compañeros, será un perfecto sitio para él.
Me encanta venir desde abajo del jardín y ver esta parte baja de la terraza. No es desde dónde el lilo se ve más bonito pero las piedras de la terraza, las ramas colgantes del celindo conforman un espacio umbrío y fresco a los pies de los arbustos. Un pequeño espacio tapizado de un acolchado de madera troceada que aloja alguna mata de narcisos....me parece hermoso!! :)
Está exuberante este rincón!! Es un espacio justo frente a la puerta de casa. Lo primero que uno ve al salir al jardín, así que era cuestión de pensar muy bien qué se plantaba en él.  Conservé un viejo Celindo (Philadelphus) del que no sé la variedad. Pero le hice una rigurosa limpieza para rejuvenecerlo en su totalidad y aunque el año pasado se puso precioso de flores este año no quiero pensar qué será cuando florezca!! Está inmenso. A rebosar de ramas cuajadas de capullos que en breve abrirán llenando el arbusto de "mariposas" blancas y deliciosa aroma. Tengo otro celindo de crecimiento muy distinto. Tipo arbolito cuya estructura me gusta más aún. 
Y cerca, ya sobre la terraza superior otro rosal!! Rosa 'Sally Holmes' de preciosas, sencillas y grandes rosas blancas.
Aunque tardíos porque los puse en tierra a destiempo, los narcisos abren ahora y salpican de un vibrante amarillo los pies de un Pyrus calleryana 'Chanticleer' que me hace morir de impaciencia por ver sus yemas que aún no abrieron del todo. Tengo cierto temor porque es un árbol que planté el otoño pasado y que aún no ha llegado a brotar nunca en mi jardín. Espero con algo de ansiedad llegar a ver abrir sus hojas!!

No hago más que pasar por esta zona estos días. Cuánto disfruto admirando la infinita gama de colores de la vegetación. Las distintas texturas, las distintas caídas de las ramas. Entre las de la Robinia emergen las panículas violetas de las lilas que entremezclan sus hojas casi acorazonadas con sus vecinas, tan distintas en todo...forman para mi gusto una mezcla deliciosa.
Las necesidades de cultivo y poda las podéis consultar si os interesa en este artículo en el que escribí largo y tendido sobre los lilos: Syriga vulgaris, ese dulce aroma de primavera. Hoy prefería hablaros de los lilos desde otro punto de vista. Más en relación con las plantaciones que lo rodean. Feliz fin de semana, amigos.  :)

Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...