Hoy os traigo una perenne que me parece adorable, Monarda fistulosa Var. 'Menthifolia'. De otro híbrido (Monarda 'Prärienacht') os hablé en el otoño de hace dos años. En aquel artículo os comentaba las condiciones idóneas de cultivo de manera que si alguien tiene interés en conocerlas puede pinchar en el enlace.
En esta ocasión tan sólo quería mostraros sus bellísimas inflorescencias a modo de penachos de color violeta oscuro. Agrupadas en el tercio superior de las ramas, Monarda fistulosa Var. 'Menthioli' forma matas erectas que aunque algunas páginas de viveros europeos hablan de 60 cm al menos en mi jardín alcanza sin dificultad los 90 cm de alta y unos 60/65 de ancho.
Me encanta las brácteas bajo los verticilos que forman sus flores. Los de esta variedad en concreto destacan por lo vistosos.
A todos los jardineros nos encantan las flores. Sin duda pero las plantas nos pueden proporcionar mucho más que flores. De hecho ubiqué en en lugar dónde crece esta bergamota precisamente no por sus flores, que son preciosas, si no por su aroma.
Esta curva del camino que se inicia tan pronto se traspasa el portón de entrada al jardín trasero es una zona de constante paso para nosotros y resulta una delicia aspirar el delicioso aroma que desprenden sus hojas.
Si se frotan entre los dedos la fragancia es más intensa pero sin necesidad de tocarla la mata desprende un aroma claramente perceptible al pasar a su lado.
No observo grandes diferencias entre Monarda didyma y esta Monarda fistulosa var. 'Menthifolia' salvo las llamativas brácteas de esta última y que sus flores son de un color quizás más brillante, algo más intenso.
Las bergamotas resisten perfectamente las heladas que suelen producirse en mi zona (La Sierra Oeste de Madrid) y tiene un largo período de interés dado que sus inflorescencia siguen siendo bonitas cuando se secan y como os comenté en el otro artículo yo suelo dejarlas sin cortar. También es cierto que permitir que las flores fructifiquen sobre la planta no es un modo de animarla a seguir floreciendo.
También las necesidades de cultivo son iguales para las dos. Una ubicación pleno sol/semisombra, suelo con bastante materia orgánica pero sobretodo no dejar secar el terreno dónde crece, especialmente en verano.
Me parece una perenne ideal para mezclar con arbustos o incluso otras vivaces. Además tiene una ventaja, los tallos son suficientemente rígidos como para mantenerse erguida sin precisar tutores para sostenerla. A diferencia de las variedades antiguas, los híbridos que se ofrecen en el mercado no son tendentes a contraer enfermedades ni plagas.