Reconozco que no puedo ser imparcial del todo cuando hablo de este rosal
pero prometo intentarlo. Y es que han sido tantas las alegrías que me ha
proporcionado que debo admitir que soy muy benevolente con cualquiera de sus
fallos.
Ha habido algunas amigas jardineras que me ha preguntado por qué no había
colgado una entrada sobre un rosal del que tanto y tanto he hablado en los
Grupos de jardinería dónde nos movemos hasta hacerme casi pesada "colgando" fotografías de mis rosas :P . La respuesta es sencilla: porque
actualmente no hay ningún rosal Pierre de Ronsard en mi jardín. Pero llevo un
par de días empezando a preparar el pedido de rosales a raíz desnuda de este
invierno y he pensado que no sería mal momento para colgar un par de entradas
hablando sobre él.
Qué puedo decir que no haya dicho ya? Lo he cultivado desde 2011 hasta este
año 2014. Han sido cuatro floraciones a las que he asistido…y siempre la última
ha superado a la anterior. He dejado de cultivarlo cuando ya está maduro. Una
pena porque estoy segura que hubiera
seguido aprendiendo sobre él, sobre su crecimiento y su comportamiento en un
jardín con el clima de Madrid.
Es un rosal que se comercializa (por Meilland)
además de como Pierre de Ronsard,
también como Eden Rose 85 y que está
registrado con el nombre de “Melviolin”
. Su año de introducción es 1985 y forma parte de la colección “Romántica” de Meilland. Y es que produce unas rosas con
un aire antiguo precioso!
Los capullos, redondeados, tardan en abrirse. Lo que se agradece porque
te permite asistir a todo el proceso con deleite… adopta tantas formas hasta
llegar a ser una rosa madura..
Pierre de Ronsard tiene una característica poco frecuente, el tono verdoso
muy pálido de los pétalos externos. Me
parecen exquisitos!! Por el contraste
que producen con la gama de rosas del resto de pétalos.
La rosa es de tamaño bastante grande,
ahuecada, con muchísimo pétalo y unos
bonitos estambres dorados. Presenta al
abrirse un corazón de tonos más intenso que los pétalos externos que la
envuelven con un color mantequilla. En parte me parecen un delicioso helado de
fresa y vainilla!!
Quiero dejar constancia aquí para eliminar cualquier preocupación de quién
lo cultive por primera vez un hecho que a mí me tuvo con el alma en vilo: es un
rosal que no sé si siempre, pero que en muchas ocasiones suele dar el primer año unas rosas mucho más pálidas que las que da en
años sucesivos, lo que decepciona un poco. Observo de todas formas que mirando
fotografías de Pierre de Ronsard cultivados en américa parece que la rosa desde
el principio adopta los tonos característicos.
Los que yo he cultivado, que
han sido cinco, esto que comento sobre la palidez del primer año les ha pasado
a todos, pero no en el mismo grado. El de la esquina del jardín fue mucho más pálido que uno que tenía en el
patio delantero pero también éste tuvo rosas de colores menos intensos que las
que luego se abrieron en los años siguientes.
La mayoría de las rosas no nacen en solitario, en general florecen en forma de
grupos, algunos muy, muy numerosos que cuajan el rosal en mayo produciendo
un espectáculo increíble.
Otra cualidad estupenda es que la rosa puede
usarse como flor cortada. Permanece muchísimos días en muy buenas
condiciones en agua.
He comprobado muchas veces el efecto
de la lluvia sobre este rosal: ni se ha inmutado!! No le ha ocurrido como a
otros rosales, por poner un ejemplo diría Golden Celebration, que es caerle el
agua encima y deteriorarse la rosa… Ello es posible debido a que los pétalos de
Pierre de Ronsard son bastante gruesos lo que la convierte en una rosa muy
resistente.
No se puede decir lo mismo de su
resistencia al sol. Pero claro, es que cuando se habla de sol hay que
aclarar de qué sol se habla. Estoy segura que en el norte de España este rosal
se encuentra a sus anchas a pleno sol. En un clima riguroso como el mío, sobre
todo debido al sol achicharrante del verano, creo que es preferible cultivarlo
a cubierto de los rayos de sol del mediodía que quema las rosas con facilidad.
No sé cómo reaccionará cuando cultive este rosal en el jardín actual. En
todo caso lo plantaré en una zona sin el sol del mediodía como digo. En el otro
estaba a pleno sol. Desde la mañana a la noche el sol incidía sobre él castigando
excesivamente sus rosas que palidecían en unos días según iban abriéndose y permaneciendo bajo aquel
calor achicharrante que había en mi jardín. De hecho las pocas rosas que sacaba
tras la primera floración en primavera se tornaban pálidas en poco tiempo.
A mí personalmente me gusta ese “cabeceo”
que tiene y que se presenta también en muchas de las rosas de David Austin.
Cuando el rosal es arbustivo entiendo que moleste esta característica pero
tratándose de un trepador, creo que le da un aire de una languidez romántica
preciosa y además, visto desde abajo facilita la contemplación de la rosa. Me gusta
el delicioso arqueo de sus tallos bajo el peso de una rosa de bastante tamaño.
Por lo que hace a su resistencia a plagas y enfermedades, se trata de un rosal vigoroso, fuerte, sano, robusto…De
esos rosales que no te dan quebraderos de cabeza. En alguna ocasión algo de
pulgón, nada preocupante. Jamás ha cogido una enfermedad ni una plaga que lo
hiciera poner en peligro. Nada enfermizo.
Tiene una vegetación brillante y
bonita. Con unas hojas que tienden a cierta redondez, dentadas y bastante
grandes de un precioso verde oscuro. Con ramas flexibles muy fáciles de guiar
adosado a una celosía o una pared. No es un rosal excesivamente ramificado. Más
bien tiende a echar, tras la floración y partiendo de las principales, largas
ramas laterales que se pueden ir colocando adosadas si molesta el aire algo
despeinado que puede ir adquiriendo según avanza la temporada.
Por el peso de tanta rosa y porque es un rosal de una envergadura importante, hay que asegurarse de que está bien anclado
y con sujeciones fuertes. Cuando madura llega fácilmente a los 3 metros y pico
de alto por 2,5 de ancho y lo hace a una velocidad vertiginosa!! Y si no, mirad estas fotografías, entre una y otra solamente ha transcurrido un año
Rosal Pierre de Ronsard - Primavera de 2011 |
El hecho de que emita fuertes ramas
desde la base desde el principio de cultivarse facilita enormemente la
formación de una estructura que cubra una pared o una celosía. Quiero decir que no es uno de esos rosales a
los que les cuesta evidenciar su tendencia trepadora.
La poda es realmente fácil si se forma un
estructura de cinco o seis ramas principales que se las hace crecer lo más
horizontalmente posible. De esas ramas (que hay que ir eliminando según van
envejeciendo) brotarán las ramas laterales que serán las portadoras de las
flores. Si alguien está interesado en ver con detalle la poda que he aplicado a
este rosal estos años puede hacerlo en
la entrada que colgué sobre la poda de rosales trepadores.
Prometí ser ecuánime. Vamos con las limitaciones.. . No huele. Voy a aclarar esto.
No huele en mi jardín, al menos yo no detecto un olor que vaya más allá del
típico olor a vegetación pero no lo
calificaría de aroma Sí es cierto
que he oído decir a otros jardineros que lo cultivan que sus ejemplares sí
tienen cierto aroma. En todo caso no leí a nadie que reconociera un gran aroma…
Y por último el tema de si es o no
refloreciente. A ver, me hubiera gustado cultivarlo durante un par o tres
más de temporadas para afirmar con rotundidad si es o no refloreciente en mi
jardín. Puedo decir que los cuatro años que lo cultivé floreció de manera
magnífica en primavera y que luego echaba de vez en cuando alguna rosa pero sin
poder calificarlo como segunda floración ni mucho menos.
El hecho de haber escuchado a gente que afirmaba que era un rosal de
floración continuada y a otros que aseguraban una segunda floración en otoño
aunque como es lo normal, más tenue me hizo pensar que quizás aplicándole una
poda de las ramas portadoras de las rosas después de mustiarse éstas podría
provocar una floración posterior. Y eso
intenté después de florecer esta primavera de 2014 pero fue imposible aplicarlo
porque ya no vivíamos allí y al coincidir con la mudanza y con el comienzo de
la creación del nuevo jardín , solo tenía oportunidad de ver el rosal muy de
tarde en tarde... Tendré que esperar a que un nuevo Pierre de Ronsard crezca en
mi jardín para saberlo J
En definitiva, creo que es un rosal maravilloso. Que proporciona muchas
alegrías y pocas decepciones si uno sabe qué debe esperar de él.