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Una ayudita para podar: Set de tijera cortacésped y tijera arreglasetos con batería

Una ayudita en forma de herramientas en un momento del año como este en el que hay que recortar infinidad de pequeños arbustos viene de perlas.
Llevaba tiempo queriendo una pequeña herramienta así. Lo que quería no era un potente arreglasetos. Para empezar porque no tengo setos que haya que cortar. Un par de veces al año cortamos la valla con hiedra que divide mi jardín trasero de la parcela contigua. Pero para este trabajo la persona que me ayuda en el jardín se trae el cortesetos. Indudablemente esta herramienta no valdría para este trabajo que requiere una máquina de muchísima más potencia.
Lo que yo quería era algo que me permitiera podar las lavandas, peinar las salvias o limpiar  "lo gordo" de las Nepetas antes de terminar de quitar todas las ramillas interiores muertas. Arbustos con ramillas no demasiado gruesas. Algo que pudiera llevar con mis herramientas en el transcurso por el jardín de forma cómoda.
Estuve leyendo muchas opiniones de usuarios sobre distintas marcas y modelos y finalmente me decidí por este que he adquirido.
Existía varios modelos "parecidos" de distintas marcas. A pesar que algunos modelos eran de casas muy conocidas, me ha echado para atrás los comentarios negativos de calentamientos, poco tiempo de autonomía o dificultad de montar y desmontar las distintas cuchillas así como lógicamente sobre la falta de potencia de la máquina.
No es este un artículo en el que quiera tratar de las ventajas e inconvenientes de los distintos modelos de arreglasetos. Simplemente quería mostraros este que he adquirido hablando de los factores que yo he tenido en cuenta en el momento de decidirme por uno u otro arreglasetos. Comentaré por tanto sus ventajas e inconvenientes sin compararlas con ningún otro.
Como es lógico en cada jardín habrá unas necesidades y cada jardinero tiene unas u otras prioridades o incluso gustos personales.
Ya sabéis que yo no tengo publicidad de ninguna casa comercial en mi blog. Por tanto no estoy condicionada por ninguna empresa en las opiniones que emito en mi página. Cuando digo que algo me gusta es porque me gusta, sencillamente. Y cuando digo que algo no me funciona es porque no me funciona. Sin más. Ni gano ni pierdo absolutamente nada ni en lo uno ni en lo otro.
He tenido la intención inicialmente de tachar con cualquier programillo la marca comercial de la herramienta que aparece en las fotografías pero luego he pensado que sólo viendo las fotos se sabe marca y si me apuras modelo. Así que finalmente he decidido dejar las fotos tal como las he tomado. 
No se trataba de adquirir un cortasetos a gasolina o eléctrico de gran potencia que no preciso en este momento. Lo que precisaba era un herramienta muy manejable. Todos sabemos que el peso de las herramientas es algo a tener muy en cuenta. Así que el hecho de que fuera muy, muy ligero consideré que era importante. Este pesa sobre 900 gramos. No es mucho, se aguanta perfectamente sin cansarte. Esto es importante tenerlo en cuenta porque cuando llevas mucho tiempo seguido con una herramienta en la mano que pesa un montón terminas por cansarte.
Algo manejable, cómodo, fácil de llevar hasta cualquier punto del jardín sin necesidad de cables. que me obligaría a poner alargos y una parafernalia que estaba segura que con mi forma de ser terminaría usando las tijeras por no ir a por el alargo para enchuffar el arrreglasetos. 
Por tanto debía ser a batería recargable. Esto me llevaba a tratar de elegir un modelo con suficiente autonomía. Cuando te pones a atusar arbustos quieres poder trabajar un buen rato y no verte en la obligación de interrumpir el trabajo para volver a cargar la herramienta. 
Según la página oficial la herramienta puede estar funcionando 100 minutos. Cronometrar esto es difícil en mi situación en la que no puedo estar de pies demasiados minutos y si hago uso de ella sólo puede ser sentada. Sinceramente no he tenido la paciencia de ir sumando los tiempos de uso hasta que se agotaran las baterías ni tampoco estoy en situación de usarla 100 minutos seguidos. 
He confiado por tanto en las muchas opiniones que sobre este aspecto he leído en la Red procedente de usuarios que tenían este modelo.
Consciente de que se trata de una herramienta muy sencilla de la que no podemos esperar que nos corte un seto con ramas muy gruesas, al menos quería decidir sobre la que tuviera mayor potencia. Otros cortasetos de este estilo tenían una potencia inferior a esta cuya batería de litio es de 10,8 V.
Por supuesto una herramienta de estas características tiene un tiempo limitado de uso. Tarde o temprano tienes que poner la máquina a cargar de nuevo. Me informé del tiempo de carga de la batería y que no fuera demasiado consideré que era algo bastante positivo. Este factor sí lo he comprobado y, tal como afirma la marca comercial, la batería tarda tres horas y pico en cargarse.
La facilidad del cambio de cuchillas y que el anclaje al cuerpo de la máquina fuera sólido y firme era una cuestión que yo considero prioritario porque afecta a la seguridad y con esto no se puede jugar!!!
Leí sobre otros modelos que resultaba poco firme el anclaje de las cuchillas. Esto sinceramente me daba bastante miedo. Una herramienta así aunque sea de este tipo que no son de gran potencia, puede ser realmente peligrosa y causar graves heridas si llegara una a cortarse con ellas.
Por el contrario comprobé que sobre este arreglasetos los usuarios hablaban muy bien de la facilidad del cambio de cuchillas y de la firmeza con la que quedaban ancladas a la máquina. Y veo que llevaban razón, en lo uno y en otro. He cambiado ya varias veces las cuchillas y me ha resultado sumamente fácil y sí, quedan bien firmes unidas al cuerpo de la herramienta.
Diría que la mayoría de herramientas de esta gama no cuentan con tres cuchillas, suelen tener una hoja de cizalla para arreglar setos y a lo sumo la cuchilla de corte para el césped.
A mí lo del césped la verdad, como que me importaba bastante poco porque no tengo césped pero si venía incluida pues bueno, mejor. Verdad? y en todo caso seguramente me servirá para recortar alguna zona del borde entre la hierba de caminos o la pradera central en su unión con el acolchado de los arriates. No lo sé. No he probado qué tal funciona esta cuchilla.
Sí me resultaba interesante por el contrario que contara con dos hojas de cizalla, una de 12 cm y otra de 20 cm. 
Me gustaba de esta herramienta que contara con una hoja muy corta. Pensé (y realmente así ha sido cuando he tenido oportunidad de probarla) que a la hora de acicalar un arbusto pequeño lógicamente sería más útil una cuchilla corta que una larga si de lo que se trata es de dar formas redondeadas. 
Quizás para conseguir volúmenes con caras rectas la hoja grande pudiera ser más útil pero en mi jardín no tengo ningún arbusto de esas características de momento.
De todos modos, aunque probablemente haga más uso de la cuchilla corta, indudablemente también le daré utilidad a la más larga.

La marca comercial para mí es importante. Que sea de una casa que ofrezca garantías en caso de avería me deja más tranquila que adquirir una máquina que no sé como va a responder la empresa.
Por último os comentaré un aspecto que no conocía antes de adquirirlas. Es que tiene un "doble" pulsador para accionarla. Es decir, para que funcione debes accionar de una parte un pulsador ubicado bajo la empuñadura y a la vez empujar una especie de tecla en la parte superior. Este detalle reconozco que, como estamos acostumbrados a que las máquinas funcionen simplemente pulsando un sólo pulsador, se te hace raro tener que apretar a la vez en la tecla de arriba pero lo cierto es que es un magnífico sistema para evitar que la máquina se accione por accidente y nos lesionemos.
Bueno, hasta aquí los asuntos que yo consideré para decidirme. Luego indudablemente, siempre hay un margen de riesgo ya que hasta que tienes una herramienta en casa y la pruebas realmente no sabes con seguridad el funcionamiento.


He querido probarla en algunos arbustos antes de hablaros de ella. He arreglado con ella varias Salvia microphilla y greggii y ha funcionado a la perfección.
Como os comenté, a la hora de acicalar en detalle las Nepeta, resulta práctico eliminar primero la mayoría de ramas largas y secas que casi cubren la parte central del arbusto y bajo las que se encuentra el nuevo crecimiento. Para este tipo de limpieza también me ha resultado muy, muy práctica porque simplemente "acariciando" las plantas sin llegar a tocar las hojas nuevas, en dos segundos eliminas todo este material muerto.

También he querido experimentar con arbustos de ramas algo más gruesas como un Ligustrum ovalifolium y lo cierto es que me han gustado mucho los resultados. Ha cortado sin dificultad las ramas que si bien no son muy gruesas, desde luego son de bastante más calibre que una salvia.
Por último, he querido probar el recorte de varias Lavandula officinalis con ella y por motivos de comodidad para mí puesto que debo estar sentada y me resulta más cómodo hacer las fotografías en esta zona, he elegido esta del jardín trasero para que veáis los resultados.


Creo que ha quedado bien podada. Está redondita. No? Ha sido fácil hacer las lavandas. Pasando suavemente la cuchilla tratando de seguir la trayectoria de un arco para dar forma redondeada. Igual que cuando se hace con tijeras podadoras pero muchísimo más rápido y menos cansados.

Como se aprecia en esta última fotografía los cortes son limpios, sin desgarros.

En fin, esto es lo que os puedo decir de momento sobre esta herramienta. Según vaya usándola imagino que algún fallo encontraré. De momento ha cumplido con creces las expectativas que tenía sobre ella. El manejo ha sido fácil y como digo la batería ha dado para podar bastantes plantas.
Ojo!! Es lo que es. Es decir, una tijera arreglasetos que sirve para cortar arbustos que no tengan ramas demasiado gruesas.

Cómo se podan y se reproducen por división las Nepetas. Paso a paso.

Hoy vamos a podar una Nepeta. En concreto una Nepeta 'Mussinii'. Hace unos años, cuando cuidaba del otro jardín me apetecía cultivar una hierba gatera. La busqué durante alguna temporada sin éxito alguno y en una ocasión, por fin, en un vivero al que fui quedaba un ejemplar en unas condiciones deplorables. Estaba francamente mal pero a pesar de ello me la traje para casa. Recuerdo perfectamente la decepción que supuso. No pasó antes de morir de una pequeña matita de cuatro ramas alargadas y despobladas que se desparramaban hacia los lados sin fuerza alguna para sostenerse por sí mismas. Eso, una planta sin gracia ninguna. No recuerdo si llegué a ver la flor. La cuestión es que me dije que vaya planta tan decepcionante y me olvidé de las Nepetas.
Pasó algún tiempo y un verano, el de 2013, fuimos a visitar la rosaleda de David Austin en Albrighton. Cuando en El Jardín del León vi esta Nepeta no reconocí en ella aquella plantita esmirriada que yo tuve en mi jardín. Tuve que acercarme y leer el cartelito que indicaba de qué se trataba. Nepeta x faassenii 'Six Hills Giant'!! Anotada en la lista de compras pendientes jaajjaja
No la tenían a la venta en el vivero pero no olvidé aquella planta y tan pronto llegué de nuevo a España empecé a buscarla. Nada, ni la variedad de David Austin ni ninguna otra. Qué fastidio!! Hay que ver cuando una quiere una planta y no la encuentra qué coraje da. No es cierto? :-)

Ahora no recuerdo de qué forma. La cuestión es que contacté un día con Bemi (Autora del blog 'El jardín de Bemi') y tan pronto le conté mis dificultades para encontrar esta planta me envió una cajita con unas cuantas plantas: un par de esquejitos de Nepeta racemosa 'Grog' junto con un par de Beschorneria yuccoides y un precioso rosal que hoy crece en mi jardín trasero, un Rosa ‘Perle d´Or’. Qué alegría sentí al ver que prosperaban todas sus plantas!!! Ahora cada vez que paso al lado de ellas me acuerdo de su generosidad. Es fantástico esto de tener amigos jardineros a los que a veces no conocemos en persona pero que no es óbice para que tengan comportamientos tan estupendos como el que tuvo ella conmigo.
Entre las hierbas gateras de la rosaleda de David Austin que me enamoraron y los consejos que me dio Bemi animándome a cultivar varias en mi jardín (ya que son tremendamente fáciles y agradecidas), empecé a buscar en la red y en uno de mis pedidos  a Promesse de Fleurs incluí por fin la Nepeta x faassenii 'Six Hills Giant' que tanto había deseado y ya que la tenían en existencias, pedí otra como la de Bemi.
La temporada pasada pude comprar algunos ejemplares en Los Peñotes, pero todas son Nepeta 'Mussinii'. No es la que más me gusta porque se trata de la variedad que crece más abigarrada, más compacta y aunque es igualmente bonita, a la hora de efectuar su limpieza, al tener tallos más delicados y apretados que las otras variedades, cuesta más dejarla bien aseada.
Bueno, menudo rollo acabo de contar!! En fin, esta es la historia de las nepetas en mi jardín. Hoy, como os decía, podaremos una de ellas.
Por cierto, se la suele llamar hierba gatera porque una de sus variedades, en concreto Nepeta cataria, atrae poderosamente a los gatos. Los felinos se restriegan en ella, la lamen, incluso la ingieren y provoca en ellos una especie de euforia que podría calificarse de narcotizante. Pero aclaremos que es esta Nepeta y no las otras variedades de las que estamos hablando las que resultan irresistibles para los gatos.
La hierba gatera es una mata que en climas como el mío se castiga bastante durante el invierno. Es perfectamente resistente a las heladas pero gran parte de las ramillas que se desarrollan durante la temporada anterior terminan secas y con las hojas muertas y en este momento tienen un aspecto que deja bastante que desear como podéis ver en estas fotografías.
Es una vivaz que tiende a tupirse bastante y a extenderse hacia los lados, lo que permite que se reproduzca mediante división de manera muy sencilla.
Este crecimiento extendido la convierte en una planta muy útil para cubrir las zonas que nos interese evitando malas hierbas. Eso sí, hay que dejarla su espacio para que crezca de forma natural y airosa y permitirle desparramar sus ramas inferiores sobre el suelo
Hay quienes ven en ella una planta desgarbada y poco airosa. Quizás es cierto en determinados estilos de jardín. Sin embargo creo que en estilo del mío va a la perfección. A mí me gusta ese aire un poco alocado, fresco e informal que tiene.
Con sus preciosas espigas florales en tonos que dependiendo de la variedad juegan entre el azul, malva y casi morado.

Es muy resistente al calor y a la escasez en el riego. Igualmente no precisa de suelos demasiado nutridos y crece a sus anchas en una ubicación de semisombra. También a pleno sol pero tengo comprobado que están más felices las que no les da todo el día la luz solar. Esta que podamos hoy se plantó en mayo del año pasado lo que os puede hacer una idea de su rápido crecimiento.
Se aconseja cultivar nepetas a los pies de rosales porque parece que evita la presencia de pulgones en las plantas cercanas.
Además es un gran atractivo a todo tipo de insectos y sus hojas tienen un agradable perfume además de servir para condimentar algunas carnes o efectuar infusiones con ellas. 
Tiene un largo periodo de floración. Creo que depende del clima pero en el mío florecen en primavera y luego, si se les va eliminando las espigas florales y se recorta 2/3 de la planta al terminar la floración vuelve de nuevo a producir una segunda en otoño que dura hasta casi el invierno.
Al igual que bastantes variedades de salvias y lavandas, las Nepeta deberían podarse dos veces al año. Una poda bien apurada ahora, al comenzar a brotar, y de nuevo tras la floración esta vez con un corte más ligero.
Bueno pues manos a la obra. La poda no tiene misterio alguno. Deberemos eliminar de la planta todo el material muerto. Si nos fijamos gran parte de su desarrollo del año anterior está seco. Casi que solo está verde la parte central de la planta.


Si levantamos la mata comprobamos que es por debajo por dónde hay más ramas secas. Así que tijeras sin contemplaciones!!

Creo que es más fácil comenzar por hacer un recorte de todas estas ramas secas sin pararnos en el detalle. La recortamos todo a su alrededor..

Una vez eliminado la gran parte de ramas secas llega el momento de detenernos a eliminar hojitas y ramillas muertas entre las ramas que están brotando nuevas en el centro de la planta.
Fijaos en el centro, está lleno de ramillas y material que hay que desechar. Muchas ramillas se sueltan del centro tan sólo tirando un poco pero si vemos que no se desprenden, con las tijeras separamos las que se resistan.

Esta variedad, como os comentaba arriba, crece bastante tupida lo que dificulta su limpieza. Además, las ramas son menos vigorosas, más tiernas con lo que al limpiar es casi inevitable romper algunas de las recién brotadas.
Yo aconsejaría ser bastante meticulosos en esta poda y limpieza. Cuánto más limpias las dejemos menos posibilidad habrá de que se acumule en su zona central demasiada humedad y que lleguen a tener oídio.


Ahora sí!! Ahora esta Nepeta 'Mussinii' tiene un aspecto digno. Qué cambio. Verdad? ;)
Ah!! Se me olvidaba. Una última cosa. Si con el paso de las temporadas la mata llega a hacerse demasiado grande y ocupa más espacio del que le habíais asignado, podéis aprovechar el momento de la poda para dividir las matas. Yo creo que aunque los esquejes son muy fácil de arraigar, la división es el más rápido y cómodo sistema de reproducción.
En esta siguiente fotografía se ve la Nepeta con las ramas un poco levantadas. Tan sólo tendréis que clavar la pala de punta recta en medio de forma vertical. Hacer palanca con ella y un trozo de la planta se desgajará de la planta madre con sus raíces. Lista para que planteis el nuevo ejemplar dónde os convenga. Fácil!1 O no? :P

En poco tiempo esta bonita planta estará cuajada de flores y nos parecerá que habrá merecido la pena detenernos un ratillo en su cuidado.


Poda de tres tipos de Salvia (arbustivas, herbáceas y de roseta)

Como bien sabéis hay tantas variedades de salvias que tratar de afrontar la poda de todas y cada una de ellas resulta imposible. En este artículo nos acercaremos a tres tipos distintos de salvias (que no variedades) que tienen crecimientos bien diferentes: las salvias arbustivas que desarrollan ramas leñosas; las salvias herbáceas cuya parte aérea suele deteriorarse mucho e incluso llegar a desaparecer en jardines con heladas y por último las salvias que además de ser herbáceas forma roseta de hojas en su base.
Comenzaremos con el post de hoy una serie que irá tratando sobre la poda de algunos arbustos de jardín. Como sabemos las salvias arbustivas no son exactamente arbustos si no que técnicamente se trata de lo que se conoce como un "subarbusto". Es decir, algo a caballo entre un arbusto con ramas totalmente lignificadas y una vivaz. Algunas de las salvias forman una estructura leñosa (sobretodo en su base) que permanece a lo largo de toda la temporada y puede decirse que puede tratarse a los efectos de la poda como si fuera un arbusto. Otras en cambio conservan su parte aérea a duras penas durante el invierno.
Lógicamente irán apareciendo según sea preciso afrontar su poda en mi jardín. No hace falta insistir que la fecha de las podas depende en buena parte de la climatología y lógicamente si vosotros vivís en zonas más cálidas que la mía podrá variar en algo el momento de podar algunos arbustos.
Estos artículos que versarán sobre la poda de arbustos concretos pretendo alternarlos con otros artículos en los que hablaremos de la poda en general y en los que intentaré dar unas nociones globales que podrán aplicarse a todas las plantaciones del jardín para que quién no tenga demasiada idea sobre el tema pueda podar las plantas de su jardín sin demasiada inseguridad.
Bien, el primer grupo de salvias que vamos a tratar hoy son las salvias arbustivas. Es decir, aquellas que forman una estructura leñosa. Todos las conocemos porque son tan agradecidas tan floríferas, tan sanas, tan poco exigentes...que es difícil no querer cultivarlas en nuestro jardín. Una vez asentadas son bastante resistentes tanto al frío como a riegos reducidos.
No incluiremos aquí la Salvia officinalis que además de haber colgado ya un artículo hablando de su poda, a mí me gusta podarla a conciencia una vez ha florecido en mayo.
Sigamos. Estas salvias arbustivas si no las podamos cada año al tener un crecimiento tan rápido e intenso se convierten rápidamente en matas arbustivas muy leñosas y cuya producción de flores irá bajando progresivamente según envejezca la planta. Además, las floraciones no se repetirán.
Les pasa un poco lo mismo que a las lavandas. Son arbustos que la poda puede retrasar el envejecimiento del arbusto pero que tarde o temprano terminan por lignificarse y al cabo de un tiempo es preferible sustituir las plantas en el jardín ya que son de reproducción muy fácil mediante esquejes.
Pero con independencia de que sean arbustos de vida no muy larga, está claro que queremos que produzcan varias floraciones durante la temporada y que las matas se mantengan lo más hermosas y tupidas posibles. Verdad?
Este tipo de salvias precisan de más de una poda al año. Quede claro hoy estamos hablando de la poda intensa de cara al invierno o una vez ha terminado el riesgo de heladas fuertes. Esta poda la podemos efectuar, según sea nuestro clima, en otoño de cara ya al invierno o ahora al final del invierno. Ambos momentos tienen sus ventajas e inconvenientes. Las matas estarán más bonitas durante los meses del invierno si las dejamos "acicaladas" al final del otoño pero en jardines como el mío, con frío, prefiero que las ramas, aunque deterioradas por el rigor del invierno, protejan un poco de las bajas temperaturas a la parte central y baja del arbusto.
Podarlas en otoño, si vienen días buenos que animen a brotar las ramas, pueden dar lugar a crecimientos que no soportarían el invierno. O sea, que al final tendría matas no muy lucidas (como tengo ahora) durante el invierno. Pero vamos, el momento de la poda ya depende de vuestras preferencias y de vuestro jardín.
De todos modos a mí me parecen hermosísimos los tonos rojizos que adquieren sus hojas con el frío.
Más adelante, ya en verano, aplicaremos una segunda poda. Esta vez mucho más suave, sin apurar tanto. Eliminando todos los restos de espigas florales secas y tratando de recortar unos centímetros de tallos con hojas para fomentar que rebroten y las matas se hagan más redondeadas y tupidas a la vez, claro está, que fomentará que vuelvan a florecer durante todo el otoño.
Tras esta poda ligera veraniega, en cuanto las temperaturas vuelven a suavizarse en otoño, nos premiarán con una nueva floración hasta que llegan los fríos.
Además de estas dos podas (y entre ellas) tendremos muchas más flores y durante más tiempo si vamos eliminando de vez en cuando las flores marchitas mientras dure cada período de floración
Vamos a ver de manera práctica la poda de dos salvias de este tipo. Una Salvia gregii y una Salvia microphylla.
Como podemos ver en las fotografías partimos de una mata crecida desde el verano sin que se acicale en ningún momento porque desde septiembre llevo sin poder atender personalmente el jardín.
En su interior hay mucha ramita muerta y hojas secas. Es preferible recortar la mata casi a la altura que quedará finalmente. Asi es más fácil ir abriéndola con las manos y revisar que en su interior no dejamos ramas muertas u hojas secas. Una buena limpieza de la estructura que quedará evitará enfermedades y el desarrollo de plagas.
Ya veis que la poda ha sido bastante apurada. No conviene llegar demasiado abajo y llegar a la parte muy leñosa porque dejaríamos a la salvia con pocas posibilidades de volver a rebrotar (como le pasa a  las lavandas).

Aún así se le ha dado un buen corte de pelo!! Tratamos de dejar la mata bastante redondeada. En pocas semanas comenzarán a brotar con fuerza y empezarán a sacar sus primeras flores de la primavera pero tendremos que esperar al otoño para verlas en todo su esplendor. No olvidemos que las salvias son eminentemente plantas de floración otoñal.
A Salvia greggii se le puede aplicar el mismo tipo de poda. Recortar primero grosso modo de manera que nos permita limpiar bien de material muerto el interior de la mata y luego terminar de redondear bien la mata apurando en la distancia sin llegar cortar a nivel del suelo.
El siguiente grupo son las salvias herbáceas. Se trata de plantas cuyas ramas tienen un gran crecimiento. De tallos verdes que no llegan a lignificar del todo. Con hojas generalmente más grandes y carnosas que las del grupo anterior y de bonitas formas. 
Me parecen aún más hermosas que las anteriores. Cultivo en mi jardín sólo tres variedades que podríamos encuadrar en este grupo: Salvia 'Indigo Spires' Salvia farinacea y Salvia leucantha. Las tres preciosas!!
El primer año no supe cultivar bien Salvia 'Indigo Spires'. Luego intuí como tenía que tratarla y llevo dos temporadas encantada con ella.
Se trata de un tipo de salvias que comienzan a florecer en la primavera. Se muestran lozanas y con preciosas hojas hasta que llega el verano. S. 'Indigo Spires' sólo aguanta el calor tremendo del estío que hace en el jardín trasero dónde la cultivo si hago aportaciones de agua cada día. De lo contrario se lacia.
Cuando llega el calor deja de florecer y se deteriora. Es el momento de hacer una poda sin contemplaciones: cortar todos los tallos a unos 10/15 cm del suelo. En muy pocas semanas vemos que vuelve a brotar con fuerza. De nuevo la planta luce preciosa, con hojas sin churrascar y produciendo panículas florales hasta que llegan los fríos.
Con las primeras heladas parte de sus tallos se congelan. Si viviera en un jardín sin heladas la podaría justo cuando se daña por la primera helada pero en mi jardín creo que conviene esperar a casi empezada la primavera para podar estas salvias a pocos centímetros del suelo.
Os muestro la evolución de la mía.
Son salvias las de este grupo algo menos resistentes (aunque rebrotan luego sin problema) a los fríos y que generalmente en climas como el mío no resisten el invierno llegando incluso a desaparecer su parte aérea. De ahí que aunque me afea bastante la zona el mantenerla así de deteriorada, aguanto hasta que llega febrero o marzo para efectuarle la segunda poda intensa. De nuevo cortamos los tallos a 15 cm del suelo. Tan pronto comienza la primavera ya la tenemos en marcha otra vez!!
Las salvias de este grupo suelen ser algo invasivas. Las matas van extendiéndose poco a poco ocupando cada vez más espacio a su alrededor. S. Spire en cambio no se comporta así pero en general son salvias cuyas matas deberemos dividir cada algunos años, cosa estupenda porque nos permite aumentar nuestras existencias de forma gratuita!!
Por lo demás no es nada enfermiza, factor que al menos yo cada día tengo más en cuenta!!
Es un planta magnífica que aconsejo a cualquier que quiera tener un salvia que no se cansa de florecer en preciosos tonos violáceos. Además es un imán para abejorros y todo tipo de insectos y mariposas!! El problema es que la encontré en un vivero una vez y jamás he vuelto a poder comprar otro ejemplar por mucho que he preguntado :-)


Otra que no se cansa de florecer es Salvia farinacea. De porte más reducido pero de preciosos tonos azulados en sus flores. En mi jardín no se presenta tan resistente. De hecho he perdido alguna durante el invierno. Aún así cada año suelo comprar algún ejemplar porque luce preciosa en la parte delantera de los arriates mezcladas con las rosas.

El último grupo de salvias que aunque también son herbáceas presenta un tipo de crecimiento bastante distinto de las anteriores, son las salvias que desarrollan una roseta de hojas en su base.
Imagino que habrá más variedades que podrían englobarse en este grupo pero yo solo cultivo Salvia nemorosa (con muchos cultivares)
Mata de Salvia nemorosa comenzando a florecer delante del rosal y entre dos matas de Salvia officinalis 
Tampoco se mantienen durante la estación fría en muy buenas condiciones en mi clima. Muchas hojas basales se deterioran y hay algunos ejemplares que casi me cuesta localizar entre el acolchado. Quedan ligeramente prendidos de la roseta basal los tallos que en su momento sostuvieron las flores y que ahora, en este momento del invierno, se han tornado secos, pajizos y duros dando un aspecto bastante deplorable a la planta.
Salvia nemorosa a la izquierda de un Pittosporum tobira 'nana' y delante de Rosa 'New Dawn'
Más que poda deberíamos hablar de "limpieza" porque muchos de estos tallos apenas tiras con los dedos un poco de ellos y rápidamente se desprenden. El resto de tallos secos que no lo haga simplemente tendremos que cortarlos lo más bajo posible. Eliminaremos también cualquier hoja quemada o enferma.
Pienso que las salvias que tengo de este tipo llegarán en pocas temporadas a tupirse demasiado y quizás será necesario dividirlas.
Además de esta poda, la eliminación constante de las espigas florales secas mientras se produce la floración alarga indudablemente ésta.


Hay muchísimas variedades de salvias y siendo como son plantas que no dan ni demasiado trabajo ni problemas de enfermedades resultan muy adecuadas para cultivar en jardines dónde tengan que soportar algo de falta de agua. Tampoco son demasiado exigentes en lo que hace a nutrientes del suelo así que sin duda se trata de una especie muy a tener en cuenta a la hora de rellenar bancales que estarán cuajados de flores especialmente durante el otoño.

Día de pleno invierno en el jardín. La luz convierte en encajes la vegetación.

Distinto. Siempre es distinto. Por miles de veces que se recorra, en cada oportunidad la paleta de colores que se vierte sobre él, la vegetación, la temperatura, todo cambia. Hoy, un día de riguroso invierno, el protagonista es el agua. Agua en forma de vapor ascendiendo desde el suelo entibiado por los tímidos rayos de sol que lograban vencer y traspasar la fina neblina; agua líquida goteando sobre el suelo desde los árboles, agua empapando las hojas y madera que cubren las plantaciones. Agua.

Cómo y cuándo podar las lavandas (Lavandula angustifolia)

Lavandula angustifolia o lavanda (también conocida como espliego y lavándula), es un arbusto de tamaño no demasiado grande, de hoja agrisada perenne y aroma delicioso al frotarlas. Pero son sus flores (en todas las gamas de malvas incluso algunas en blanco) en forma de espigas las que tienen más aroma y llenan de perfume la zona dónde se cultiva.

Es muy frecuente ver lavandas en los jardines, en las partes frontales de los arriates y a los bordes de los caminos porque son de fácil cultivo. Amantes de los suelos con buen drenaje, arenosos, incluso no excesivamente ricos en nutrientes, pero sobretodo, detestan un riego en exceso.
Este exceso de riego debemos saber que provoca fuertes crecimientos pero baja la intensidad del aroma de la floración.
Florecen en verano cubriéndose de espigas terminales en la parte superior de largos tallos sobresaliendo del arbusto que puede alcanzar tranquilamente el metro de altura y diámetro. Existe no obstante variedades algo de crecimiento algo más limitado como esta que os muestro en las fotografías, Se trata de Lavandula angustifolia 'Hidcote' que crece algo más compacta y no alcanza el tamaño tan grande.

El caballo de batalla de estas plantas es su tipo de crecimiento. Son arbustos con una gran tendencia a tornarse leñoso y hay que saber que la madera lignificada y vieja no brota de manera que es frecuente ver en los jardines matas de lavandas con los pies despoblados y un crecimiento bastante desgarbado.
Esta tendencia hay que tenerla muy presente a la hora del mantenimiento con las podas. De todos modos mentalicémonos, tarde o temprano las lavandas hay que renovarlas tras unos cuantos años en el jardín porque es inevitable que el arbusto envejezca. Podemos, mediante la poda retrasar este envejecimiento pero a la larga se lignificarán, crecerán en exceso y se despoblarán brotando mayormente en la zona superior del arbusto dejando desnuda la parte inferior y adoptando formas no demasiado bonitas.
Si observamos dentro del arbusto, aún siendo jóvenes, veremos que la vegetación interna está como seca presentándose las hojas verdes y tiernas en el exterior del arbusto.

Como digo, con la poda retrasaremos el envejecimiento aunque no podamos lamentablemente evitarlo con el tiempo.
Es muy importante tener en cuenta su crecimiento para, mediante la poda procurar mantener el arbuto lo más brotado posible, es decir, que emita muchas ramitas que tapen la zona interna que suele ser seca y despoblada. Estas ramificaciones que favorecemos con las podas además de cubrir el interior permitirán que la floración sea muy abundante.

¿Cuándo debemos podar las lavandas? Es conveniente hacerlo dos veces al año:
Primera poda: Final invierno/inicio primavera: Al final del invierno o, en climas fríos como el mío, al inicio de la temporada, tan pronto como comienza el crecimiento efectuaremos la primera poda de la temporada. en este momento le suelo aplicar una poda bastante severa. Eso sí, sin llegar a cortar la zona lignificada porque esta madera ya no rebrota como he comentado.
Este año he aplicado un pequeño truco que leí el otro día no recuerdo en qué libro de poda y que me ha ido bien. Se trata comenzar la poda recortando con las tijeras dos especies de "franjas" que crucen el arbusto de punta a punta en los dos sentidos. Estas franjas me han servido de "orientación" al proporcionarme ya el contorno que tendría finalmente la esfera.

No sé si se aprecia bien en esta foto. En esta segunda he coloreado estas dos franjas para tratar de hacerme entender mejor. A partir de hacer estas dos franjas ya solo quedaba ir recortando las cuatro partes que aún quedaban sin podar procurando darle una forma lo más redondeada posible.


Segunda poda: Tras la floración del verano. La segunda poda la realizo tras la floración para eliminar las espigas florales una vez secas. Me permite limpiar la planta de ramas muertas, con crecimientos excesivos u orientaciones que afeen la forma general del arbusto. Además esta segunda poda favorecerá que ramifique más con lo que estaremos ayudando también a mantener el arbusto más compacto y tupido.
Siendo tras el verano y antes de que lleguen las heladas, pueden efectuarse ligeras podas para mantener la forma del arbusto a nuestro gusto o limitar un poco el crecimiento si el espacio del que disponemos para él vemos que está siendo sobrepasado.

En mi opinión es importante no  podar una vez inicia bien el crecimiento de primavera porque haciéndolo estaríamos renunciando a su floración.
Aquí tenemos ya la lavanda podada.

Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...