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Independizar los "hijos" de nuestras plantas. Reproducción vegetativa (asexual)

Las plantas que introducimos en el jardín dedican sus primeras temporadas a formar un gran cepellón de raíces más que a crecer o florecer. Lo observamos siempre. Verdad? Pensemos en los rosales recién plantados. Algunos incluso no llegan a florecer la primera temporada o lo hacen en forma de tres o cuatro rosas. Todo ser vivo aspira a perpetuarse y a extenderse en el espacio y en el tiempo y las plantas no son ninguna excepción. Una vez han desarrollado este gran sistema de raíces pueden dedicarse a crecer y florecer pero además, dan un paso más: algunas empiezan a intentar extenderse más allá de la zona dónde se cultivan inicialmente. Cada una lo hace mediante un sistema.
Dos son las formas fundamentales de reproducción de las plantas
1.- Una es la reproducción sexual. La hemos tratado en varias ocasiones en algunos artículos Recordemos los semilleros de hortalizas o los de vivaces o la manera de reproducir mediante semillas una Althaea rosea (Malvarrosa).
La planta nueva que surge cuando se usa este sistema de reproducción es semejante a las plantas progenitoras pero no idénticas. 
Hablamos en plural porque en algunas plantas, el fruto es el producto de la polinizacion de una flor perteneciente a un ejemplar mediante el polen de otra flor de otro ejemplar. No en todas pero sí en algunas.
Cuando el polen (componente masculina) y el pistilo (componente femenina) pertenecen a la misma flor se dice que se trata de una polinización autógama.
Por el contrario, si polen y pistilos pertenecen a flores diferentes, sean del mismo árbol o de distinto árbol, se conoce como polinización alógama.
En el caso de los frutales más comunes, es mucho más frecuente que los óvulos de las flores de un frutal sean fecundados por el polen que proviene de otros frutales.
En todo caso, la semilla que se formará en el fruto proviene del material genético de dos padres y la planta resultante de la germinación de esta semilla siendo semejante a sus progenitores (porque contiene ADN de ambos) genéticamente no será idéntica a ninguno de ellos.
La reproducción sexual da lugar a mayor variabilidad en la población de una especie, es decir, produce individuos diferentes y por tanto con más probabilidades de que, para mediante la selección natural, pueda adaptarse (o no) al entorno dado que los nuevos individuos tienen características de ambos progenitores.
Son como nuestros hijos. Se nos parecen pero no son idénticos a nosotros (Afortunadamente jajajajja). Suelen tener características de su padre y de su madre pero constituyen ejemplares únicos.
Este tipo de reproducción es mucho más compleja que la que trataremos a continuación y sobre la que versa este artículo.

2.- La segunda forma de multiplicación es la asexual o vegetativa. Se produce cuando se divide una parte de una planta (Sea tallo, rama, raíz, rizoma, etc.) y se desarrolla por separado hasta que se convierte en una nueva planta.
Es un sistema de multiplicación muy difundido y existen muchas variantes. En este tipo de reproducción solo se precisa de un progenitor en contraposición a la reproducción sexual que precisa de dos. 
Todas estas variantes producirán nuevas plantas idénticas genéticamente a la planta progenitora. Es decir, es un clon de la misma.
Este tipo de reproducción tiene, como todo, sus ventajas e inconvenientes. De una parte requiere de mucha menos energía para la reproducción de la planta y da origen en poco tiempo a gran cantidad de individuos.
Por el contrario, al originar individuos idénticos los ejemplares resultantes tienen poca variabilidad. Usando de él "echan a una carta" su capacidad de adaptación al medio dónde crecen.

Muchos de estos sistemas de reproducción vegetativa los hemos ido viendo a lo largo de estos años en muchos artículos en este blog
* Hicimos un acodo simple en un rosal 
* y otro aéreo en un Melia azedarach no hace mucho. 
* Vimos como reproducir por estolones una mata de violetas
* Sacamos nuevos ejemplares con retoños (hijuelos laterales)  de una Ajania pacifica
* Por división reprodujimos un Chrysanthemum frutescens hace ya tiempo. 
* Reprodujimos mediante esqueje un Rosa 'Charles Austin' y también unas tomateras una vez brotaron sus raíces metida un trocito de rama en agua, 

Aunque a largo plazo y cuando se analiza a nivel de la Naturaleza, este tipo de reproducción tiene sus desventajas, cuando se trata de un jardín, obtener nuevos ejemplares de plantas sin haber hecho nada o poco para que se reproduzcan es una gran satisfacción. Hablemos hoy de este tipo de "hijos" de las plantas que cultivamos en nuestro jardín y que ellas solitas (o casi) se reproducen de modo vegetativo dando lugar a plantas que pueden vivir posteriormente de modo independiente.
Algunos de los arbustos que os mostraré están cultivados en este jardín desde antaño pero otros los he introducido yo en estos últimos años. Estos últimos ya empiezan a ser maduros y han desarrollado un sistema de raíces que les permite intentar reproducirse. Alguno de ellos veremos que ya emiten largas raíces que se extienden por los alrededores; otros brotan desde ellas formando pequeñas plantas al lado de la planta madre; y en otros casos he sido yo la que he intervenido en esta reproducción acodando alguna de sus ramas. 
Cuando al inicio de la temporada incorporo al suelo el estiércol maduro y debo retirar para ello previamente el acolchado me resulta práctico "independizar" estos hijos y conseguir así plantas gratis que crecerán en otras partes del jardín sin haber hecho prácticamente ninguna inversión ni de tiempo ni de dinero.

Ventajas de estos "hijos" en relación a las plantas compradas.
  • La gratuidad es el primero que nos viene a la cabeza.
  • Pero gozan de una gran ventaja en relación a las plantas que compramos en un vivero o adquirimos en una página web: Son plantas que han crecido desde el inicio en nuestro jardín. Por tanto son totalmente resistentes en nuestra zona climática y están complemente adaptadas a la climatología, suelo y demás condiciones de crecimiento.
  • Pero además, cuentan con algo de lo que suelen carecer las plantas que traemos del vivero: Antes de independizarlas han desarrollado un magnífico sistema de raíces que les va a permitir sobrevivir una vez estén separadas de la planta madre con mucha más facilidad que las compradas.

Quiero mostraros hoy algunos de estos nuevos ejemplares que en breve crecerán en algunos rincones de mi jardín. Mientras se asientan un poco y comienzan a crecer independientes de la planta progenitora, los he metido en un contenedor y los he ubicado en una zona dónde estarán a resguardo del sol fuerte del mediodía.
Son plantas como digo, con un sistema radicular ya formado pero que hasta ahora, obtenían el agua y los nutrientes de la planta de la que provienen, así que conviene esperar a que desarrollen aún más raíces antes de ubicarlas en su lugar definitivo.

1.- En el primer caso no será un ejemplar si no varios los que habré obtenido de estos brotes de raíz de Sorbaria Sorbifolia 'Sem'. Un precioso arbustos, bello en todas las estaciones y que no presenta ningún problema de cultivo en mi jardín si está preservado del sol algunas horas del día.
La verdad es que hasta que ha empezado a brotar no me he dado cuenta de que había pequeños brotes saliendo de la tierra cercana a dónde crece la planta madre.



Al arrodillarme para levantar el acolchado del rosal que crece al lado (Rosa 'Gertrude jekyll') vi que del suelo asomaban preciosas ramillas tiernas. Como no quería que el rosal se vea invadido por esta planta simplemente tiré del brote más próximo al rosal et voilâ lo que apareció!: Una larga raíz que crecía horizontalmente al suelo y de la que cada poco brotaba hacia arriba un pequeño tallo.


Tiré con cuidado de no estropear las raicillas y corté la raíz en una zona próxima a la planta madre.
Aquí tenéis varias raíces. Cada trozo que tiene ya raíces desarrolladas constituye una planta que, en poco tiempo, podrá vivir de forma independiente. Qué gozada, no?
Como se trata de trozos de raíz que deberé poner de forma horizontal, he preferido meterlos provisionalmente en un cacharro con agua para que no se deshidraten y en unos días me pensaré si los pondré en varios contenedores o directamente en el lugar que crecerán.
2.- Segundo ejemplo de planta en la que no ha habido intervención alguna de mi parte: Las sierpes de un Philadelphus.
Llevo ya años queriendo independizar estos tallos que emergen de una zona lateral del celindo pero por unas cosas u otras nunca he encontrado el momento de hacerlo. El domingo, aprovechando que había venido a trabajar en mi jardín mi ayudante y teniendo el tiempo necesario para realizar este trabajo que requiere el uso de herramientas, me decidí a realizarlo.
Habitualmente los Philadelphus crecen en forma de arbusto compuesto por infinidad de tallos que emergen del suelo. Se pueden conducir dejando solo tres o cuatro que formen una especie de tronco y permitiendo que las ramas broten únicamente en la parte superior. El resultado es precioso:
Las ramas cuelgan desde arriba formando una especie de paraguas con sus ramas arquedas.
El mío crece así sin haber hecho yo nada. Por cierto, tengo otro celindo que estoy intentando el mismo resultado pero aunque voy arrancando los brotes que salen del suelo de alrededor de los tres o cuatro que dejé entrelazados, no hay manera, salen y salen más y más...y es un fastidio estar siempre eliminándolos.
No sé si con el tiempo lograré que no salen muchos y tengan eliminar solo alguno de vez en cuando.
Así que vienen que este pequeño que brota al lado del padre tiene la pinta de crecer con las mismas características aunque con retraso por fin ya he logrado dos ejemplares iguales!!
Aquí veis el celindo con el acolchado retirado antes de incorporar el estiércol. Este celindo está cultivado en el suelo original del jardín, es decir, que la tierra está muy compactada y requirió la intervención de mi ayudante que con una pala de punta cuadrada fue bordeando el cepellón ayudándose de la fuerza del pie sobre ella.
No fue fácil. Las raíces se extendían por la zona próxima y hubo que utilizar una azada en las proximidades para ablandar el terreno y facilitar la extracción.
Por último, con ayuda de una podadora se cortó la raíz mediante la que se unía a la planta madre.
Listo! Planta madre "liberada" del hijo que vivía a "su costa" y bien nutrida. Y yo con otro ejemplar nuevo ajjajajja
No logramos sacarlo con demasiado suelo adherido a sus raíces pero tiene un buen sistema radicular desarrollado.
Eso sí, el desarrollo de su parte aérea es excesivo así que antes de plantarlo en un contenedor lo he podado bien reduciendo muchísimo el largo de sus ramas para que tenga posibilidades de sobrevivir.
3.- Un tercer caso de "gratuidad" total: Renuevos de una Syringa vulgaris (Lila). De esta me percaté este invierno pero hasta ahora no me he puesto a independizarlo.
Ya veis, en el lateral y a cierta distancia de la lila madre, emergía un pequeño conjunto de tallos que debía llevar creciendo cierto tiempo dado que tiene la madera madura.
No me ha resultado difícil separarlo. He ido clavando alrededor del crecimiento una pala de punta recta y con la fuerza de mi pie sobre ella he ido clavándola en todo el perímetro a la mayor profundidad que me ha sido posible.
Noté con la pala la gruesa raíz que la unía de la planta madre así que tuve que usar para cortarla una podadora fuerte.
Y aquí tenéis al nuevo bebé, un pequeño lilo con un cepellón perfectamente desarrollado. Este desde luego no tiene pinta de tener problemas lejos ya de su progenitor.

Una vez extraído el joven ejemplar tuve que reponer todo el terreno y adecentar de nuevo los acolchados.
Estoy entusiasmada con su obtención porque mis lilos son muy antiguos y por los años de abandono y los nulos cuidados que recibieron durante muchísimo tiempo, están muy castigados. Están en el jardín desde hace treinta o cuarenta años y me encantará asegurarme de seguir cultivándolos. Con este "duplicado" tengo asegurada la supervivencia de ellos en mi jardín. Además, florecerá en color lavanda, como su progenitor ya que es un clon de él. Cosa que por cierto, me encanta!
4.- Por último y aunque esta vez sí ha habido intervención de mi parte al hacer un par de acodos con dos de sus ramas el verano anterior, he obtenido otro ejemplar de una planta a la que le tengo mucho cariño por ser un regalo de mi amiga Isabel. Me trajo un esqueje (no recuerdo si enraizado o no) de esta Buddleja x weyeriana 'Sungold'. Florece en amarillo lo que la hace bastante original. Pero además resiste mucho mejor que otras budleias que tengo en el jardín el calor y la sequía del suelo. Así que me interesaba obtener más ejemplares.
Igual que en los casos anteriores, aprovechando la retirada del acolchado de la Catalpa, quise comprobar si los dos acodos del verano habían enraizado.
Con muchísimo cuidado fui retirando el suelo alrededor de ellos hasta llegar a la altura que hundí las ramas. Una de ellas vi que aunque tenía raíces no eran suficientes y decidí volver a cubrirla con suelo y dejarla una temporada más.
La segunda sí, me pareció claramente enraizada. Simplemente practiqué un corte entre la rama que provenía de la budleia madre y el acodo y repuse el terreno que rodea la Catalpa aplicando el estiércol también.
Aquí está, lista para su plantación!
En fin, ayer domingo fue un día de lo más productivo!! Estoy contenta con mis nuevos ejemplares. Proceden todos de plantas preciosas y ellos, con genes idénticos a ellas, serán igualmente hermosas. Tardarán un tiempo en convertirse en ejemplares adultos y de buen tamaño pero no hay prisa... asistir al proceso será mágico y me producirá una gran alegría lograr que con mis cuidados, lleguen a convertirse en magníficos ejemplares.
Que tengáis buen lunes, queridos lectores. Gracias, gracias, siempre por vuestro apoyo, por vuestro cariño hacia mí que tantas veces demostráis en vuestros correos y comentarios y por la amistad que tengo con muchos de vosotros.

Ni siquiera un paseo. Un puñado de imágenes que he logrado entre lluvia y lluvia estos días.

Llover y llover y llover. No lo deja! Por supuesto es necesaria el agua pero para un jardinero estar metido en casa días y días y no poder pasar revista a su jardín, aunque solo sea para acercarse a las plantas y que se te vengan a la mente imaginaciones de esporas dispersándose a tutiplén y pulgones reproduciéndose como locos en este ambiente húmedo y de temperaturas suaves. Así es, aunque solo sea para sufrir los jardineros precisamos comprobar, tocar, mirar. Una por una...cada esquina, cada recodo y saber qué ocurre. Qué está pasando en nuestro jardín. Necesitamos verter nuestra mirada sobre todos los rincones. En ellos sigue transcurriendo la vida. Evidentemente. Unos bichos se comen a otros bichos; los capullos de rosas siguen engrosando; las floraciones se preparan para salpicar color sobre los arbustos; las hojas se desperezan recien abiertas las yemas...Claro, el jardín sigue siendo jardín sin nosotros, somos nosotros los que somos algo menos jardineros sin él jejeje
La ausencia tan prolongada durante días me produce cierto malestar. Así que por las tardes, ando mirando por los cristales a ver si la lluvia me da alguna tregua, aunque sea unos minutos y salgo tan pronto veo que deja de caer agua. Y trato precipitadamente de ver lo más posible, consciente del poco tiempo que  tendré antes de que de nuevo empiece a caer agua del cielo. A veces no me da tiempo ni de llegar a muchos espacios del jardín. Cámara en mano doy unos pasos y apenas he recorrido unos metros otra vez comienza a caer agua!! jejejje y vuelta para casa.
Así que esta recopilación que no puede llamarse paseo en esta ocasión, es un manojo de imágenes que he logrado sacar entre lluvia y lluvia estos días. Luces distintas, tonos de vegetación diversas por las distintas horas de la tarde.
Algunas veces ha sido tan breve el tiempo que apenas si he logrodo llegar al portón de la fuente tras cuya celosía crece un precioso rosal Rosa 'A Shropshire Lad' con una vegetación tan especial que no me resisto a mostraros con una foto de esta tarde en la que no ha llovido y he logrado plasmar sus hojas secas y sin brillos para que podáis ver su coloración. Produce una rosas elegantes, llenas de una hermosura sensual, casi abrumadora pero no son solo sus rosas lo bello de este rosal. Sus hojas, de miles de tonos de verdes y rojos lo hacen especialmente bonito.
Cerca, en la misma valla divisoria los Allium ya apuntan sus capullos, tan gruesos que no tardarán en abrir mostrando sus esféricos pompones en tonos malvas y azules. Qué divinos!! A ver si tengo suerte y florecen a la par de los rosales, con esa idea planté unos ochenta en el jardín trasero. Rosas, magentas, malvas y azules. Una gama que me encanta. Dejaré sus flores secas hasta el otoño porque me parece que son interesantes incluso en tonos pajizos. 


Vuelve a llover!! Para casa!! Pero antes antes de cerrar la puerta me da tiempo de fijarme en Parthenocissus tricuspitada 'Veitchii' con sus hojas aún plegadas y sus raíces adventicias afianzándose a las paredes de mi casa recorriéndolas como un río con mil afluentes. Es maravillosa la rapidez con la que cubre de hojas lo que ahora parece casi desnudo una vez dice a salir de su letargo. Qué estrategias tiene la Naturaleza!!
Paciencia, en la siguiente escapada me resistiré a comprobar si la Catalpa ha abierto ya sus yemas porque si lo hago y me paro a mirar, sé que no llegaré al jardín frente a la fachada sur de la casa así que protegiendo bajo la camiseta la cámara bajo las escaleritas de piedra para comprobar qué tal van los Iris germanica cuya floración apenas podré disfrutar si sigue esta lluvia. Pero me llevaré sus flores en mi cámara y en casa podré seguir admirándome de cómo una planta tan humilde produce unas flores tan sumamente complejas y hermosas. Qué más quisiera una orquídea igualarse en hermosura!! Las matas de lirios proporcionan un aspecto de cierto "asiento" a los jardines, les da un aire campestre que me entusiasma. Frente a ellos me viene siempre a la cabeza una palabra con la que los asocio, la naturalidad.
Este año están que se salen. Cuajadas de capullos con sus pétalos aún envueltos como flechas hinchadas...
Crecen en muchas zonas de mi jardín pero sobretodo sobre un muro de piedra que sostiene la entrada de coches, entre rosales y alrededor de las escaleras de bajada del camino de las acidófilas. Poco a poco iré sacando de estas matas más matas e iré salpicando con ellas otros rincones del jardín.
No soy lo que se dice tacaña a la hora de comprar plantas pero me ocurre algo curioso con los Iris. Nunca compré ninguno. Me parecen tan exageradamente caros que no estoy dispuesta a pagar por un trozo de raíz de apenas unos centímetros seis o siete e incluso ocho euros. Ni hablar del peluquín!! Así que solo cultivo en mi jardín lirios de los de siempre, de los que llevo toda la vida viendo en todos los jardines. Sin identificar y seguramente sin nombre ni apellido pero que a mí me parecen preciosos y de momento no introduciré variedades que puede que sean más exóticas pero no estoy segura de que les pudieran hacer demasiada competencia a estos:) 




Quedan bien en cualquier parte y al lado de casi cualquier planta. Cerca de ellos el Prunus cerasifera 'Pisardii' parece ya totalmente arraigado y ahora recuerdo al mirarlo, que alguien lo calificó de "árbol de hojas desvaídas' pero con quién no estoy de acuerdo en absoluto. Estos días, con la lluvia, sus flores han ido a parar al suelo y la base del tronco se ve rodeado de pétalos de suave rosa. Pero en las ramas permanecen aún sus cálices tiernos y de un burdeos claro que contrasta maravillosamente con el tono oscuro con tintes morados de las hojas de este árbol que de tan visto solemos menospreciar pero que a mí me parece que contrasta entre los demás árboles poniendo un bonito contrapunto y cuyas ciruelitas adornan graciosamente más delante sus ramaje. Qué más contraste podría tenerse teniendo cerca las preciosas y jugosas hojas de Carpinus betulus 'Fastigiata'?



Esta vez voy a tener suerte y llegaré a la plataforma de hormigón y comprobaré como casi ni me he dado cuenta de la preciosa floración de Amelanchier lamarckii. Qué se le va a hacer!! Esperaremos a volver a disfrutar de sus bonitos frutos, como diminutas cerecitas y me los disputaré con los pájaros que si me descuido no me dejarán probar ni uno!!

Bajando hacia el amelanchier paso por delante de un viejo lilo (Syringa vulgaris) que por cierto, a ver cuándo me decido a podarlo!! Perder una floración me cuesta y es que con los lilos no hay otro remedio. Pero sí, tendré que hacerlo tras la floración aunque me pese. Este lilo necesita rejuvenecerse o terminará por deteriorarse. Pero es que él parece querer convencerme con tanta y tanta panícula que son promesas de flores de aroma que no puede ser más delicioso!! Pero no, este año no me dejaré convencer!!
Hay que limpiar algo la hierba que crece en estas escaleras. Cómo crece atizada por la humedad!! Bueno, crece la hierba pero también crece todo lo demás. Lo uno por lo otro!! Cómo está el acanto!! La temporada pasada no hizo demasiado pero parece que está ha empezado a tomar cuerpo y está sacando una espléndidas hojas que ahora, al bajar no puedo resistirme a tocar y ver lo crujientes que están con la humedad. Acanthus mollis me parece tan escultural!! Supongo que este año se dignará a mostrarme sus impresionantes espigas de flores.. 



Otros días he podido llegar sin mojarme al seto sur y compruebo con alegría que las matas de Salvia officinalis que este año ya han crecido y han dejado de ser los cogollitos que planté al año pasado para convertirse en algo digno de llamarse mata jeje :) Espero ansiosa su sencilla y azulada floración. Mira que lo dudé al colocar esta delate de Artemisia arborescens. Pero sí, sin duda, es una bonita combinación de colores los grises y estos verdes claros de las salvias.
Me gustan las salvias!! Y no solo estéticamente. No hay una sola vez que pase por delante de alguna que me resista a pellizcar alguna hojita y comérmela. Me gustan los sabores amargos y la salvia lo es pero tiene un punto refrescante que me chifla!!
Me doy cuenta de cómo ha cambiado este seto. Aún queda mucho espacio entre las plantaciones pero no, ya no tienen el aspecto del año pasado. Siempre me sonrío internamente al ver como pasito a pasito el jardín va consolidándose lentamente pero de forma que de año en año se percibe sin duda el cambio.


Si me doy prisa lo mismo llego con luz suficiente! En frente del seto, a unos metros, luce solitario el tronco de una Paulownia tomentosa plantada este invierno que aún no dio todavía signos de querer brotar pero que seguramente cualquier día de estos empezará a salir de sus yemas sus enormes y bonitas hojas, o eso espero :) 
Me dirijo a la parte baja de las escaleras de madera para comprobar si esta tarde ocurre como en otras algo que de tan simple me emboba jajajja  Quizás habiendo llovido, no. 
Pero sí, a trasluz las veo revolotear. Sobre la hierba revolotean unas cuantas mariposillas diminutas que mi cámara recoge con una forma irreal al haber tirado la foto con una velocidad demasiado lenta. Qué efecto más simpático. No? Hasta aquí llego y de nuevo no tengo tiempo de llegar a ver qué tal van la Kerria japonica del final del jardín. Quizás mañana la lluvia me dé más tregua ajjajaja


Mi gozo en un pozo, toda la tarde esperando a ver si puedo salir y al final...la tregua dura un suspiro!! Empieza a chispear de nuevo mientras el sol se va. Pero no me importa, lo hace como siempre, acariciando con sus rayos las hojas de las plantas de esta zona que están todavía a su alcance y tiñéndolas de una luz brillante que las hace resaltar entre las sombras claras que ya se han vertido en el resto del jardín. Llevo días sin mirar estos rosales rugosas cuyos fuertes y precioso brotes son una verdadera atracción para los pulgones y que el año pasado logré mantener a raya a base de manguera sin otro producto. No los veo mal, de momento no veo hormigas merodeando. Buena señal!! Me regreso a casa con la esperanza de que los capullos que he visto tengan tiempo de abrirse antes de que las dichosas hormigas los estropeen. 


Más de una semana sin parar. No deja de llover!! Y otro intento que no dura más que unos minutos, los que tardo en llegar al lilar con paso ligero mientras recorro el seto norte y me da tiempo de tirar algunas fotos a la zona central del jardín llena de verde su suelo. Qué gusto andar sobre el mullido suelo cubierto de cientos de geranium con sus diminutos flores rosas. Ni se me ocurriría arrancar esta que llaman malas hierbas y que a mi me parecen deliciosas. En apenas unos meses el suelo de mi jardín se teñirá de colores pajizos así que quién desaprovecha la ocasión de algo de verde!! Desde luego nadie que tengamos el jardín en una zona geográfica como la mía que no disfruta de la humedad de los jardines del norte con un perpetuo verde en su suelo.


 
Precipitadamente compruebo si hay plagas sobre la Genista apenas empezando a florecer estos días y también hurgo entre las hojas todavía arremolinadas recién brotadas de Sacumbus nigra 'Black Tower Eiffel'. Me alegro de haber elegido esta variedad tan oscura y flores en panículas de tonos rosas antes de que se abran las blancas flores. Está brotando con fuerza. Sí señor!! El año pasado se dedicó a echar raíces, éste seguro que se va a dedicar a crecer, eso parece al menos...Tenía muchas ganas de tener un hermoso arbusto de Saúco. Es de esas plantas de siempre que cada día se ven menos en los jardines pero que ofrecen a la vista y aroma del jardinero grandes satisfacciones y desde luego para los pájaros constituyen sus bayas un estupendo banquete.  




El lilar está hecho un desastre con la pinaza mojadas sobre las plantas!! Pero el desorden y algo de desaliño en los jardines no son capaces de eclipsar la belleza. Sobre las piedras llenas de líquenes yacen algunas ramas de Kerria japonica 'Pleniflora' pintada ya de amarillo. Como las Forsytias en pleno apogeo. No, la pinaza no me distrae de tanto color oro... afortunadamente ;)


Ya que estoy aquí no puedo desaprovechar el echar un vistazo al huerto y ver qué tal van las habas y si tienen muchos pulgones. Veo alguno sobre algunos tallos. Temblad, malditos!! No saben que tengo preparándose, en maceración, un buen manojo de ortigas ejejje les queda tres telediarios...
Me percibo lo cambiante que es este huerto. Bueno, este huerto y cualquier rincón del jardín. Vienes a una hora y parece uno, regresas a otra al día siguiente y parece haber cambiado tanto...


Ya de subida me paro en uno de los celindos (Philadelphus), el que crece a los pies de la plataforma de hormigón y lo veo cuajadito de capullos!! Ni rastro este año de plagas...bien, vamos bien!! Llevo ya dos años queriendo cambiarlo de lugar porque creo que rompe la vista de subida hacia la casa y que está ahí en medio, como sin demasiado convencimiento el pobre...ajjajaja pero no hay manera, se me pasa la temporada de hacerlo y siempre me digo: el otoño que viene lo haré y de paso sacaré de su base unos hijos con raíz para tener dos ejemplares. A ver si tocando el final de este año saco un rato para hacerlo...
Este celindo es precioso. No crece en forma de mata espesa y cuajada de ramas desde el suelo como los otros. Tiene un par o tres de troncos lignificados y es en su extremo, en lo alto, dónde brotan las ramas largas y elegantemente arqueadas que en breve se cubrirán de blanco.


La tarde termina y me encamino ya hacia la casa. Los últimos rayos de sol se posan en las yerbas que crecen sobre el cemento que cubre el viejo suelo de una de mis terrazas. Qué aspecto de pequeño mundo dentro de otro mundo me da esta imagen :) Una simples yerbas pero qué bonitas me parecen con esa luz sobre ellas!!

Todavía abajo, de nuevo, mi enclenque higuera (Ficus carica) volverá a dar frutos que yo calificaría de "indignos" pero que a tenor de cómo los devoran los pájaros está claro que a ellos les parecen deliciosos. Que les aproveche!!
Antes de entrar en casa paso al lado de ellos. Compruebo como este año, de nuevo florecen los diminutos bulbos de Muscaris que hace dos años, plantando una bolsa de ellos en una maceta, se me cayeron y que fueron a parar a las hendiduras de las baldosas. Florecen entre yerbas que crecen entre ellas y que junto con musgo y líquenes, han dado al cemento del borde de la terraza un aspecto que si no supiera qué es, diría que se asemeja a la piedra un poco...lo que hace el tiempo, unas veces todo lo deteriora pero otras... otras lo transforma embelleciéndolo :)



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