Después del disgusto que me llevé el viernes con los daños ocasionados en mi jardín por las lluvias torrenciales al día siguiente pensé que me merecía darme una alegría.
La había visto muchas veces expuesta entre otras parecidas pero me gustaba ésta en concreto. En varias ocasiones estuve tentada de llevármela pero por unas cosas u otras, al final no me decidía y es que ya se sabe, siempre hay dónde gastar el dinero y que corre más prisa.
Pero el viernes por la noche me dije: Nena, porque tú lo vales!! Mañana mismo te compras la tinaja que tanto te gusta.
La había visto muchas veces expuesta entre otras parecidas pero me gustaba ésta en concreto. En varias ocasiones estuve tentada de llevármela pero por unas cosas u otras, al final no me decidía y es que ya se sabe, siempre hay dónde gastar el dinero y que corre más prisa.
Pero el viernes por la noche me dije: Nena, porque tú lo vales!! Mañana mismo te compras la tinaja que tanto te gusta.