Me voy de él en su peor momento, en lo más duro del invierno. Sin vegetación, sin flores, sin la belleza que generalmente lo cubría. Mejor así, cerrar esta etapa y dejarlo vestido "de gala" seria más difícil aún para mí. Un tanto abandonado, con los rosales sin podar a la espera de ser trasladados, con las ramas casi sin hojas, desguarnecido...hojas muertas en los arriates, ramas desnudas que dejan a la vista algunas macetas olvidadas, las hojas de las hostas congeladas sobre la tierra, los escaramujos de los rosales sin brillo ya... le dan un aspecto desolado. Me fumo un cigarrillo en la terraza desde la que lo contemplo y siento tanta melancolía!!
Tan pequeño ..Apenas 60 metros cuadrados!! No sé como han cabido en él tantas de mis ilusiones!! Tan cambiante con cada estación. Aunque, la verdad, no dejaba de ser, mejor, no deja de ser... un jardín fundamentalmente de vivaces y rosales. Apenas un par de arbustos y un pequeño manzano que no tendré tiempo de ver crecer.
No hubo espacio para más. No pude alargar el tiempo de interés con plantaciones de arbustos y árboles con coloraciones otoñales y frutos que además de belleza aportaran sustento para la vida que lo rodea. No había espacio. O lo uno, o lo otro. Y elegí rosas, muchas rosas y flores, muchas flores.
En otra parte decía que en realidad no era, no es, un verdadero jardín. Viene a ser una especie de patio sin solar pero a mí, en mi deseo de tener uno que no fuera de "juguete" como éste mío, me gustaba "subirlo" de categoría :)
Me llevaré de él todas las plantas que pueda para que sigan viviendo en el otro jardín así que en el momento en que comience a desplantar aparecerán hoyos en su suelo, aparecerán los huecos que ahora ocupan las plantas y ...empezará a dejar de ser. Qué pena!! Será como mover el tiempo al revés. Aun recuerdo cuando el 15 de enero de 2011 comenzamos a crearlo. Día a día crecía...y ahora, de repente comenzará a desaparecer.
Quería dejar aquí algo así como un homenaje. Alguna fotografía de lo que era antes de comenzarlo, de lo que fue mientras lo cultivé. También algún vídeo con sonido que podrá proporcionar a quién lo visualice bastante más que imágenes...el sonido de la infinidad de pájaros del entorno, unos perros ladrando (los míos) y en algún momento se escuchan unas niñas que cantan a coro una canción infantil...Todo esto, también era el jardín :)
Teniendo en cuenta que ésto que aparece en las últimas dos fotografías es de dónde partimos... creo que no hicimos poco...
Este jardín nunca desaparecerá, María... estará contigo por siempre... Bssssss
ResponderEliminarPues sí, estará conmigo en mi recuerdo, cuidarlo ha sido una de las oportunidades más bonitas que me ha brindado la vida estos años. Muchas graicias, Cali.
ResponderEliminarSobre tu jardín no encuentro palabra que lo describa, los menos que puedo decir es ¡hermosísimo! Trasmite el amor de quien lo fue haciendo y cuidando. Si el que dejé fuera así no se cómo me sentiría, se que hubiera sufrido mucho más al tener que abandonarlo. Estoy emocionada y no puedo seguir ¡tanto significa para nosotras ¿eh María? Besos y lágrimas
ResponderEliminarIrene, muchas gracias :) La verdad es que era una miniatura. Y lo pesada que me hacía colgando miles de fotos de él en el Grupo de Facebook y en el foro jajajaa Qué pesada!! :D Pero es que era tan feliz viéndolo florecer a lo bruto...Como una madre presumiendo de su hijito aunque sepa que ni es el más alto, ni el más listo ni el mejor pero para ella... En fin, eso, que cuando le echamos ilusión y pasión a las cosas y ponemos el corazón en ellas necesariamente tiene que proprorcinarnos felicidad. Verdad?
ResponderEliminarEste jardín es fabuloso, me llama la atención la planificación que has tenido para poner todas y cada una de esas plantas en su sitio adecuado, tan cerca una de otra de forma que tenga continuidad. Tienes que tener las ideas muy clara sobre como lo quieres y que plantas puedes utilizar. Es precioso.
ResponderEliminarSí, es verdad que yo tenía una idea bastante ajustada del tipo de jardín que deseaba. Y si me apuras tenía aún más claro qué era lo que No quería. Lo cual no quiero decir que no pueda respetar y admirar jardines de estilos que no tienen nada que ver con el mío. Muy al contrario. Estoy pensando ahora en una gran amiga que tengo que cultiva un jardín absolutamente precioso!! Cuidado, pulcro, elegante. Como ella!! Pero es que no es una acumulación de plantas ni está plantado al azar: ahora compro esto y lo pongo aquí; ahora dejo crecer un esqueje que me ha arraigado allí... su jardín tiene un hilo conductor, tiene una sensación de un todo, no de un conjunto de partes disgregadas. Ese tipo de jardines me producen admiración porque en realidad es lo que considero un verdadero jardín o más bien es lo que va con mis gustos.
ResponderEliminarAhora bien, luego cada uno tiene sus preferencias, sus gustos, sus inclinaciones. Los míos jamás irán por lo recortado, lo forman y lo superordenado. Sencillamente porque creo que nuestros jardines nos representan. Son un poco nosotros mismos, al fin y al cabo somos nosotros los que los creamos. Y lo hacemos en función de nuestra forma de ser en gran parte. Me gustan los jardines un poco "desmelenados", un poco naturales, un poco campestres... Debemos sentirnos bien en nuestro jardín. Eso es lo importante. Yo me sentía bien en aquel jardín :)