Mostrando entradas con la etiqueta Rosal GOLDEN CELEBRATION. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Rosal GOLDEN CELEBRATION. Mostrar todas las entradas

Rosal GOLDEN CELEBRATION (Ausgold), otro insomne!!

Otra rosa con insomnio!! Ya puedo asegurar que ha enraizado!! Qué alivio.. Trasplantada en marzo del año pasado cuando ya estaba brotada y sin apenas raíces le costó muchísimo recuperarse del cambio. Pero que esté desde el verano floreciendo hasta ahora en pleno invierno es prueba evidente de que ha arraigado.
De todos los rosales que me traje del jardín pequeño solo me faltaba tener seguridad sobre éste. Y yo creo que ya puedo tenerla. Todos salvados!!! Si había alguno que hubiera sentido especialmente su pérdida hubiera sido Golden Celebration. Un rosal que David Austin introdujo en 1992. Su catálogo lo incluye en el grupo de rosales híbridos ingleses Leander. Un grupo que a decir del propio obtentor incluye rosales fuertes y con el característico "arqueo" de sus rosas que a mí tanto me gusta. Es un grupo que contiene bastantes rosas en preciosos tonos amarillos y dorados muchos de ellos (y Golden Celebration es paradigma), con un aroma delicioso.
Tal como se describe el grupo en el catálogo así se ha comportado siempre este rosal en mi jardín. Por eso hubiera sentido tanto perderlo, porque es una joya!!
Como descansando estas rosas hoy se tumban  sobre sus hojas pulverulentas tras la aplicación de azufre y parece decirme que le robé tiempo en primavera por traérmelo cuando no debía y que ahora, aunque le cueste, se lo va a tomar por su cuenta sin importarle el invierno y sus heladas. Buen presagio para este hermosísimo rosal de aroma como casi ningún otro que yo cultive!! Aún tiene seis o siete capullos por abrir. Yo creo que con estos despachará la temporada porque a este paso le va a tocar la poda y aún no dio por finalizado su ciclo. 

Día de Navidad: El frío y la escarcha que lo cubre todo

Salgo al jardín y veo como la noche lo ha cubierto todo con un manto de escarcha. Me pregunto qué momento carece de belleza en el jardín y no hallo ni uno solo.
Todos me emocionan, todos me sorprenden...Qué suerte tenemos los jardineros de tener siempre razones para disfrutar de la belleza. La primavera porque me emociona con su virginidad y su pureza; el verano porque es la exuberancia...y el otoño? Ay!! El otoño...No hay estación más hermosa para mí!! Pero es que en el invierno, hasta las ramas desnudas de los árboles y arbustos me parecen tan hermosas....Qué se puede decir incluso de las hojas caídas de los lilos? Acaso son más bonitas en primavera que hoy? Yo diría que no!!


 El geranium sanguineum aún con sus colores otoñales hoy está espectacular con esa capa que parece la de un pastel espolvoreado de azúcar glas..


Las hojitas de Campanula Muralis perfiladas con un hilo blanco de hielo..
Golden Celebration al que tanto hice sufrir cuando lo trasplanté apenas sin raíces no quiere dormir y sigue diciéndome que está aquí ofreciéndome todavía bastantes capullos que ni siquiera espero que lleguen abrir pero que tienen suficiente belleza rodeados como están de este manto blanco para no precisar la exuberancia de una rosa plena y abierta.
Las hojas acorazonadas y chiquitas de Campanula Sarastro con sus verdes musgo se me antojan encantadoras hoy!!
Y James Galway, el rosal que produce rosas como helados de fresa y nata...
Las piedras que borden las terrazas del jardín delantero y a las que les ha costado tantos años llenarse de esa pátina que da el tiempo siempre resultan preciosas, en cualquier momento del año. Desde el otoño resplandecen con su musgo vivo y lleno de mil tonos de verde y hoy parecen salpicadas de pequeñas esponjas empapadas de blanco lechoso.

Los troncos desnudos de los árboles resaltan la verticalidad y desde este punto en el que tomo la fotografía parecen enmarcar al Prunus Cerasifera Pissardii que aún conserva sus hojas. Unas hojas que a estar tan altas brillan  enseguida bajo  los rayos del sol mientras el resto de esta parte del jardín permanece en sombra.

Todo hoy en mi jardín me hace estremecer. El frío por fuera, la belleza inspiradora por dentro. Ojalá nunca pierda la capacidad de la emoción...
Feliz Navidad a todos!!

Rosal GOLDEN CELEBRATION, parece que comienza a salvarse...

Durante la primera semana de marzo desplanté del suelo de mi antiguo jardín un rosal precioso, GOLDEN CELEBRATION. Un rosal que florece en un amarillo dorado muy hermoso y de un aroma delicioso. Estaba ya bastante crecido y, aún sabiendo que debiera haberlo podado más, me dio pena, así que dejé ramas más largas de lo que debiera.
Se hizo del modo y en el momento inadecuados pero fue inevitable. Lo sacamos de la tierra cuando ya estaba brotado y además no logramos extraerlo con suficiente cepellón para no dañar en exceso las raicillas, en realidad prácticamente salió a raíz desnuda así que las probabilidades de supervivencia no eran demasiadas.
Una vez había brotado no debiéramos haberlo sacado de tierra, tendríamos que haber esperado al invierno en que la actividad vegetativa está parada pero eso no era posible, o lo sacábamos entonces o las posibilidades de hacerlo el siguiente invierno eran remotas así que había que arriesgarse.
El segundo error como digo fue no cortarlo más. Las pocas raíces eran claramente insuficientes para mantener en actividad tanto tallo como dejé. 
A pesar de que aquella misma tarde que lo sacamos de tierra lo metí inmediatamente en agua al llegar a casa para que se hidratara algo y así permaneció hasta el día siguiente en que lo planté, no tardaron en pasar apenas unos días cuando los primeros síntomas de que la cosa iba mal comenzaron a manifestarse. A pesar de los riegos constantes, los brotes comenzaron a decaer y a languidecer al cabo de una semana.
El tiempo que tardó el rosal en perder la poca energía que conservaba en sus pocas raíces y dejó de haber alimento y posibilidad de llevar agua a los brotes incipientes que tenía antes de ser trasplantado, no pasó de una semana. Poco a poco el rosal iba perdiendo sus hojas o tornándose tan secas que yo misma las iba retirando. 
Hasta que quedó sin hoja alguna.
Varios tallos fueron muriendo y los fui eliminando con la podadora. A mediados de abril este era el aspecto que presentaba: sin una hoja y sin actividad aparente alguna. Muerto no estaba pero brotar tampoco brotaba. Me fijaba en las yemas y no veía signo de actividad alguna en ellas. La verdad es que creí que probablemente acabaría por morir. Cada día arrodillaba en el suelo y lo miraba de cerca con una preocupación creciente.
Pero a primeros de mayo, sin poderlo asegurar, tuve la impresión de que algo en el aspecto de alguna de sus yemas había cambiado.
Mi naturaleza hace que siempre cuestione si las impresiones que tengo son reales o producto de mi deseo así que con interés creciente las observé durante los días siguientes...y sí, no era solo mi deseo, era una realidad, una de las yemas comenzó a tomar un color claramente rojizo... signo inequívoco de que comenzaba a tener actividad. 
Hasta bien pasada la mitad de junio  no empezaron a romper algunas yemas y a brotar de ellas las primeras hojitas.
El trasplante con la actividad vegetativa ya iniciada y con tan pocas raíces ha supuesto un gran stress para él y se ha tomado su tiempo para recuperarse de él pero está demostrando ser un gran campeón en cuanto a resistencia. A ver si nada se tuerce y seguimos con la misma línea.
Así está ahora (estas últimas fotografías son del 30 del mes pasado)...llenito de brotes nuevos...que me colman de alegría.
Ahora vuelvo a tener esperanzas de que este precioso rosal tenga bastantes probabilidades de salvarse.
Deseo intensamente que sea así y poder volver a disfrutar de sus deliciosas rosas.
Lo cierto es que he podido comprobar que los rosales son plantas más duras de lo que uno pudiera pensar, aguantan bastante "maltrato" y situaciones bastante adversas. Quizás el siguiente año de un trasplante no permite a un rosal una floración digna de tirar cohetes pero que se salve ya es un éxito suficiente para mí. Me conformo con que durante este verano/otoño vuelva a echar raíces y a generar ramas que la temporada que viene se cubran de capullos.
Estoy segura que, de salvarse definitivamente, se encontrará más a gusto que en su antigua ubicación dónde recibía sol en exceso. Allí las rosas apenas duraba bonita un par de días tras los cuales la excesiva insolación que recibían las hacía languidecer. Es un rosal para una fachada orientada al este u oeste pero no al sur, al menos en el clima de la Sierra de Madrid. En este jardín está plantado al lado de un lilo que le quitará sol del mediodía y junto a otro rosal no menos hermoso aunque de un estilo totalmente distinto: Sally Holmes, un precioso rosal de pétalos blancos y corazón amarillo, de rosa muy sencilla (Cinco o seis pétalos) cuyo color y sencillez contrastarán con la soberbia belleza de Golden Celebration
Los ingredientes: fortaleza del rosal, cuidado en la hidratación y mucha paciencia de mi parte para esperar algún síntoma alentador.


Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...