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Convertir una simple caja de los chinos en una maleta retro con encanto

Tenía ganas de colocar sobre la parte superior del armario de la ropa blanca de mi dormitorio una maleta con aire vintage pero conseguir una de tu gusto no siempre es fácil además del precio que suelen tener.
Solución? Invertir un poco de trabajo en una caja adquirida en los chinos y convertirla en una maleta retro.
Os muestro a continuación el proceso que seguí para la transformación. Veréis que es fácil y que el resultado es una preciosa y romántica maleta dónde guardar recuerdos, fotos antiguas o simplemente objetos de tocador.

Durante los días de esta última Navidad, al ir a pasar las Fiestas con mi familia, encontré en Béjar, en una de las tiendas de los chinos, una caja bastante sólida y del tamaño que me convenía. Era francamente fea y los herrajes de retro no tenían nada. Pero eso era lo de menos. La forma y tamaño me convencían, ya la transformaría yo a mi gusto en su aspecto!

Lo primero que hice fue retirar todos los herrajes, de una parte no pensaba volver a ponerlos dado que el estilo no me gustaba nada pero de la otra, poder separar las dos partes de la caja me facilitaría enormemente el trabajo.
Apliqué un par de manos de pintura Chalk Finish de Americana Decor, en color "inocencia" ADC05). Se trata de una pintura con aspecto completamente mate que por contener yeso resulta muy empolvada.
No había probado hasta ahora este tipo de pintura tan de moda y he de decir que si bien tiene un acabado muy sedoso que otorga un aspecto añejo a los objetos que decoramos con ella, temo que no se trate de pinturas con un gran agarre y de hecho aconsejan protegerlas con ceras o barnices una vez finalizados los trabajos si se trata de muebles de mucho uso para evitar que la pintura se deteriore.
Este aspecto en el caso de mi maleta no me preocupaba demasiado dado que, al tratarse de un objeto decorativo, lógicamente, no tendría demasiado uso.
Necesité una tercera mano para llegar a ocultar del todo el estampado original de la maleta. 
Esta pintura deja el rastro del pincel o brocha que usemos y aunque ese efecto puede gustarme en otros trabajos, en este en concreto no me apetecía, de ahí que entre capa y capa lijara ligeramente con lana de acero para eliminar un poco las pasadas de la brocha.
En este momento estaba lista para decorarla aplicando sobre su superficie una decoración en relieve valiéndome de una plantilla de estarcir normal y corriente y pasta de textura.
Como no había usado este tipo de producto, pensé que era aconsejable probar primero los resultados sobre una simple hoja de acetato. Así me familiarizaría con la pasta y evitaría algún error que otro.



Lo cierto es que no tiene complicación alguna. Conviene, eso sí, fijar con cinta de carrocero la plantilla para que durante el trabajo ésta no se desplace. Una vez situada la plantilla en su sitio se trata de, con espátula de pintor o una simple tarjeta de crédito vieja, rellenar la plantilla con la pasta relieve tratando de alisarla lo mejor posible (si es que queremos ese resultado).
Estas pastas de textura tienen un secado bastante rápido así que hay que retirar la plantilla con cuidado, despacito pero sin esperar en exceso una vez se aplica la pasta.
Por el mismo motivo, la plantilla deberíamos limpiarla con rapidez si queremos conservarla en perfectas condiciones. La eliminación del producto se realiza con facilidad introduciéndolas en agua jabonosa y tras ello, pasarles una toallita hidratada (de las de bebé) para eliminar cualquier resto que haya quedado.
Como mi pretensión era que la decoración exterior de la maleta recordara muy lejanamente los tejidos adamascados, necesitaba que los dibujos provocados por la plantilla  salpicaran toda la superficie y hubiera quedado muy artificial si no hubiera colocado en algunas partes la plantilla de manera que abarcase la parte superior e inferior de la maleta.
En este caso primero hacía una de las partes y una vez seca la pasta relieve, cerraba la maleta y colocaba la plantilla de modo que pudiera terminar el dibujo cerciorándome de que ambas parte tenían una perfecta continuidad.
No sé si lo he dicho en alguna parte de este blog pero hace unos quince años tuve abierto al público un taller en el que yo impartía clases sobre muchas técnicas decorativas (cocción en horno de piezas de porcelana decorada, pintura de seda, repujado de plata y estaño, pintura al óleo...en fin todo lo que abarca los trabajos de tipo artístico) Bien pues durante aquellos años me gustaba aconsejar a mis alumnas el uso de unas pátinas cuyo resultado me parecía maravilloso. Se trata de las pátinas de la marca DecoArt "Heavenly Hues". Proporcionan a las piezas un aspecto sedoso y suave maravilloso. Se aplican muy fácilmente y se retiran con esponja húmeda sin dificultad alguna.
Como podéis comprobar por los últimos artículos estoy dedicándome a decorar algunas piezas del interior de mi casa y aunque mi artesal de pinturas, pinceles, pátinas y todo tipo de productos es inmenso precisamente por haberme dedicado durante años a, como os comentaba, la docencia de este tipo de actividad, la verdad es que han pasado años ya desde que cerré mi taller en Málaga y estaba necesitada de algunos productos para afrontar los trabajos que tengo entre manos.
Me decidí a hacer el pedido a través de la página web de una de las casas de venta de productos de manualidades más conocidas de Madrid, Manualidades y Bellas Artes Topaz, sin saber muy bien qué tal funcionarían. Ya sabéis que me gusta informar siempre a mis lectores sobre los lugares dónde compro los productos de jardinería y ahora no quería dejar de hacerlo aunque se trate de otro tipo de artículos.
Debo decir que antes de realizar mi pedido a través de la página les hice alguna consulta a través del teléfono. La atención no pudo ser mejor. Amables, educados, un gusto tratar con gente tan sumamente agradable!!
El pedido me llegó en un tiempo record. Rapidísimo! y aunque desafortunadamente en el transporte mi paquete debió sufrir algún golpe que provocó que uno de los botes de pintura Chalky finish se rompiera y manchara el resto de artículos del pedido, también es cierto que tan pronto me puse en contacto telefónico con el dueño de Topaz, fui atendida muy amablemente y rápidamente subsanaron el percance enviándome de nuevo el producto dañado con la mayor diligencia. Pero además tuvieron la gentileza de meter de regalo en el envío algunos botes de estas pátinas que os comento y que ya han retirado de la venta. Desde aquí muchas gracias de nuevo a Topaz por su buen hacer y por el estupendo funcionamiento de su negocio que redunda en un magnífico servicio para su clientela.
Así que tomad nota, si precisáis productos de este tipo y no os apetece desplazaros en persona para su adquisición esta es una casa fiable dónde podéis adquirir un gran surtido de artículos para este tipo de trabajos a un precio razonable y con la seguridad de que tendréis una muy buena atención además de que os solucionarán cualquier problema en el envío en el caso de que se produzca. Vamos, lo que queremos todos los clientes cuando compramos online. Verdad?:)
De modo que entre los botes que yo conservaba de Málaga y los que Topaz me regaló me fue posible realizar algunas mezclas de colores hasta obtener el tono que necesitaba para mi maleta.
Con tres de ellos obtuve un tono rosa antiguo con un matiz amarronado que me permitiría "matizar" el tono rosa demasiado "plano" que decoraba mi maleta. Agregué una cuarta pátina en tono oro que produciría unos leves "destellos" y que creo quedan preciosos cuando se ve la maleta de cerca.
Con esponja natural (la que tiene agujeritos) trabajé la mezcla de pátinas Heavenly Hues por todo el exterior de la maleta, tanto en el fondo como sobre las formas recién hechas con pasta de textura (ya completamente seca, claro está).  
Dejé secar bastante y luego, en algunas zonas fui retirándola levemente por algunas partes con la esponja limpia y apenas húmeda. Fui poniendo más producto allí dónde había retirado demasiado y eliminando de las zonas que me parecía tenían en exceso. Lo trabajé hasta que la maleta tuvo el aspecto un poco como si fuera de piel. El brillo muy, muy satinado de este tipo de pátina creo que contribuye a que tenga este aspecto apolvado y tan suave.
Dejé secar completamente y luego trabajé toda la pieza con piel seco en tono blanco cargado con pintura acrílica de La Americana.
Para aquellos lectores que no sepan de qué se trata esta técnica del pincel seco les diría que es un modo de matizar las piezas otorgándoles una tonalidad que las cubre totalmente o en algunas zonas pero sin llegar a pintarlas. El tono de debajo sigue "transparentándose" debajo del color que se aplica.
Para ello hay que utilizar un pincel de cerdas bastante duras. Hay pinceles específicos para el pincel seco pero a mi me funciona perfectamente una brocha de pelo bastante duro pero con cierta flexibilidad que tengo desde hará más de veinte años y que uso siempre que tengo que aplicar esta técnica. Conserva su forma a pesar del trote que lleva encima y no pierde en absoluto cerdas por mucho que la use. Por cierto, lo que hace las cosas buenas! Es verdad que son más caras pero duran una eternidad y facilitan enormemente el trabajo además de garantizar resultados óptimos. Es la brocha que veis en la foto de la mezcla de tonos de la pátina. Mira que llevo años y años trabajando con ella, pues está como nueva!!
Cargaremos de pintura solamente las puntas de la brocha. Descargaremos el exceso en un trapo o trozo de papel de cocina y cuando la brocha apenas manche "cepillaremos" con ella las zonas de la pieza que deseemos. No hay que apretar, si no simplemente cepillar suavemente y muy despacio la pieza por las zonas que queramos matizar.
En mi caso decidí aplicar el pincel seco con color blanco a toda la maleta. Especialmente insistí en los bordes de los motivos que había realizado con la pasta de textura que al estar muy ligeramente levantados con relación al resto de la superficie de la maleta, me resultó muy fácil aplicarlo.
En esta fotografía se puede apreciar a la izquierda una zona antes de aplicar sobre ella pincel seco y a la derecha una vez hemos cepillado con el tono blanco.
Así trabajé toda la maleta. Muy despacio. Con el pincel seco no hay que correr. Si cargamos demasiado pintura corremos el riesgo de provocar manchones de pintura opaca sobre la pieza que sería algo difícil rectificar. Es mejor is poco a poco, cargado muy poco el pincel y trabajando insistiendo en las zonas que queramos "blanquear" con el tono blanco.
Hay que llevar cuidado con esta técnica cuando se aplica en superficies totalmente lisas. Ahí es mucho más fácil que hagamos manchones. Por el contrario, en las zonas rugosas o con relieves resulta mucho más fácil realizar.
Como dije antes esta maleta no tendrá un uso diario así que quizás podría haberla dejado sin barnizar pero he preferido preservarla con una capa de barniz mate que me permitirá limpiarla cuando se necesario con una bayeta húmeda sin correr el riesgo de que la pintura se me manche con el polvo o la suciedad.
Con este barniz el trabajo no finalizaba. Los herrajes de esta caja eran todo menos bonitos así que hace unas semanas me fui a una de esas tiendas antiguas de Madrid dónde se puede adquirir esas cosas que ya no venden en casi ningún sitio y allí compré los cierres, bisagras y asa de mi maleta para poder sustituir los que tenía. Tengo todavía que ingeniármelas para cubrir los tornillos nuevos que usé para atornillar las piezas a la maleta con una especie de "tapones" metálicos que me dieron y que son del tono de los herrajes. Es una cuestión de detalle que permitirá que se vea mucho más bonita pero en tanto no se me ocurra de qué modo fijar sobre los tornillos estas piezas que me dieron, está así...
El último trabajo que requería mi maleta era su interior. Quería un aspecto femenino, muy romántico y qué mejor para ello que una hermosa tela de cretona con estampado de rosas de estilo inglés?
Cuando vivía en Barcelona tenía las cortinas de mi salón confeccionadas con esta tela de cretona. La mayor parte de ellas las he reconvertido en colchas y otras piezas de decoración pero me habían sobrado unos trozos que no utilicé nunca así que me han venido de maravilla para forrar el interior de mi maleta.
Simplemente tomé las medidas que precisaba primero para los laterales de la maleta y calculé el doble para poder pegarlo rizado y que quedara "fruncido". La pistola que llamamos de silicona me ha venido de maravilla. Estas barritas que no son silicona si no pegamento pegan a la perfección y de modo inmediato casi cualquier cosa. Con la tela desde luego no da problema alguno.
Una vez forrados los laterales hice la pieza que luego encajaría en la parte inferior de la tapa de la maleta.
Con un trozo de esponja de las dimensiones del fondo de la maleta que pegué a un cartón bien rígido lo cubrí con tela de cretona y pegué el conjunto en el fondo de la maleta. Así queda acolchadita.
Igual hice con la tapa superior. Primero forré los laterales y luego confeccioné la parte interna de la tapa.
El último detalle era hacerle el bolsillo con blonda de la tapa superior (que también pegué con la pistola). Tomé las medidas necesarias que me permitieran fruncir la blonda. Pasé un pespunte con la máquina de coser por arriba y por abajo de la blonda para fijar los frunces y le cosí en el borde superior una estrecha cinta de raso en tono mantequilla. 
Forré un trozo de cartón con la tela de cretona y sobre esta pieza pegué el bolsillo de blonda. Una vez todo bien unido con el pegamento de la pistola pegué el conjunto a la tapa superior de la maleta.
Y ya! Terminada.
Es cierto que seguramente la maleta permanezca la mayor parte del tiempo cerrada y que por ello puede que el trabajo del interior me lo hubiera podido ahorrar pero aunque yo no la abra con mucha frecuencia quiero que cuando lo haga, aparezca un interior tan precioso como éste y no la tela de papel que tenía originalmente. Nada que ver. Este es un interior delicado y bonito y aquello era una cutrez.
Qué os parece? Es linda. No? :)
A mi me parece muy romántica y con un aire reto que me cautiva. No voy a decir que haya realizado este trabajo en un par de horas pero lo cierto es que no tiene excesiva dificultad y que he disfrutado mucho transformando la caja original.
Con nuestro trabajo podemos transformar todo. No solamente nuestros jardines ajajajaj :P Con nuestras manos, ilusión y algo de trabajo, una pieza bastante indigna podemos transformarla en algo delicado y bello y que pase a formar parte de la decoración de nuestra casa alegrándonos la vista cuando lo contemplemos. 
No me he gastado nada del otro mundo y además tengo la satisfacción de haberlo hecho yo misma con mis manos y mi trabajo. Indudablemente las cosas que hacemos son mucho más nuestras que las que compramos. No es cierto? :)
Ahora no sé dónde colocarla, si en la parte superior del armario, si encima de una de las tres estanterías de libros...si en el suelo..No sé, ya me decidiré! De momento está sobre el velador al lado del sofá de piel. Ya veremos dónde termina puesta...
Feliz domingo, queridos lectores!!
Como hago otras veces, aquí tenéis los materiales usados:
  • Caja de la tienda de los chinos
  • Pinceles y brochas
  • Para pintar el exterior: Pintura acrílica Chalky finish de Americana Decor tono rosa "Inocencia" (ADC05)
  • Plantillas de estarcir
  • Pasta relieve marca "Chopo"
  • Una espátula de pintor o una simple tarjeta de crédito vieja
  • Para la pátina los siguientes colores de Heavenly Hues de DecoArt:
  • DHH02 - Soft black (Negro suave)
  • DHH08 - Misty mauve (rosa antiguo)
  • DHH16 - Golden halo (ocre muy claro)
  • DHH17 - Heavenly gold (dorado)
  • Para el pincel seco: (DA1) Pintura acrílica de La Americana - DecoArt Titanium (Snow) (blanco) 
  • Barniz de madera interior acrilico de Leroy Merlin
  • Herrajes y asa adquiridos en tiendas del ramo (ferreterías especializadas)
  • Pistola para aplicar pegamento en barra con calor
  • Barritas de pegamento para la pistola
  • Esponja para acolchar el fondo de la maleta
  • Tela de blonda
  • Cinta de raso
  • Tela de cretona estampada


11 comentarios:

  1. Te ha quedado preciosa y original. Me encantan estos trabajos y descubrir cosas nuevas. Tomo nota de todo. Las ferreterías, a veces me cuesta encontrar cosas especiales como cantoneras para una caja que aún no he encontrado. Como tengo varios proyectos ya te preguntaré por privado.Vivo en Madrid y ya me he pateado mucho buscando estos comercios tan necesarios en las restauraciones.

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    1. Hola, Loli. Gracias por tu comentario. Estos herrajes de la maleta no los compre en una ferretería, se trataba de una tienda especializada en herramientas para trabajar el cuero pero además tenían herrajes, no muchos pero me resuultó suficiente. Ya se me hacía tarde y no tenía tiempo de pasarme por una ferretería especializada que me aconsejaron. No sé decirte el nombre pero está en la Plaza Mayor. No creo que haya muchas ferreterías antiguas de las de toda la vida allí, Por lo visto esta de la calle Mayor tiene mucho más surtido de cosas que en la que yo compré.
      Un saludo. Feliz domingo.

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  2. Muy bonita la maleta, yo tambien utilizo pintura a la tiza para cambiar algun mueble de aspecto y quedan muy bonitos

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  3. ¡Oh, qué rebonita te ha quedado! Tienes mucho arte para este tipo de manualidades y muy buen gusto ¡me encanta!
    Un beso grande.

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  4. Te he quedado preciosa!! Me encantan las cosas que hace uno misma!
    Buena mañana. Mª Carmen

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  5. Pense que este blog trataba de jardineria��

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    1. Fede, este blog trata de jardinería y de muchas otras cosas más. Comparto en él muchas de mis vivencias... espero que no te moleste. Gracias por tu visita.

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