Thalictrum delavayi 'Splendide' lo etéreo hecho flor!!

De julio a septiembre, se abren las diminutas flores de Thalictrum delavayi 'Splendide'  de la familia de las ranunculáceas que proviene de China, una vivaz que puede alcanzar el 170 cm en un par de años. Me fascinan sus flores!! tan chiquitas como lentejas pardiñas! De un creíble, delicado y dulce tono violeta.. las tengo en el borde de uno de los arriates del jardín trasero de tal manera que si silueta se al transitar el inicio del camino sin entorpecer la vista, más bien adornando con sus vaporosas flores que parece que sobrevuelan los arriates. 


Estoy entusiasmada con esta vivaz, los tallos largos y esbeltos pasan desapercibidos entre la vegetación más baja que los bordea y de repente, arriba, como si no estuvieran apoyadas en nada aparece una nube de flores de preciosos estambres pendiendo en el centro de los cinco pétalos abiertos como pequeñas maripositas!!

Sin ninguna complicación en su cultivo como no sea cuidar de que el suelo tenga cierto grado de materia orgánica. No agrego más que la que corresponde a las dos veces que suelo añadir estiércol a los arriates (en otoño y al final del invierno).
Eso sí, no está bien a pleno sol y aunque no requieren de un riego superior a otras, precisan cierto grado de humedad para encontrarse bien Una semisombra es su sitio idóneo pero puede cultivarse incluso en plena sombra. Cuando llegan los fríos la parte aérea desaparece para rebrotar cuando llega de nuevo la primavera. 
Incluso cuando no está en flor es una planta preciosa. Y si no, mirad sus etéreas y delicadas hojas trilobuladas como pequeños tréboles.. verde claro y jugoso prendido de sus finísimos tallos bastante quebradizos. Todo en esta planta es pura delicadeza y todo en ella la hace vaporosa.

Me parece una opción ideal para intercalar entre otras plantas en los arriates. No ocupan prácticamente espacio en su parte inferior y cuando realmente saltan a la vista lo hacen a una altura que parecen suspendidas en el aire como una mancha transparente de color malva.


Incombustible incluso en verano!! Rosa 'Munstead Wood'

Este julio ha sido terrible para todos los arbustos en general y para los rosales en particular, letal incluso para alguno de ellos. Algunos han llegado a tener todas sus hojas literalmente quemadas y las que no, estaban tan en malas condiciones que he llegado a estar muy preocupada. Casi diría que llegaron a "menguar" y a pesar de ser seres que no saben hablar, gritaban a voces el sufrimiento que padecían bajo un sol que los achicharraba de día y unas noches que no les daban tregua. 
Mi clima es horrible en verano y éste lo ha sido mucho más, hubieran precisado algo de sombreo pero cómo se sombrea un jardín grande? Es difícil. No me ha quedado más elementos para luchar que el uso de la manguera para procurar que al menos no llegara a faltarles un agua que les resultaba imprescindibles para sobrevivir. Aún tan en mal estado procuraba seguir viendo algo positivo y lo lograba cuando pensaba que al menos las gruesas capas de acolchado que les proporciono estaban paliando, aunque fuera en algo, su sufrimiento.
He tenido que desfoliar casi todos y ahora estoy bastante más animada. Las yemas latentes sobre algunas de sus estípulas se han activado y están dando lugar a pequeños brotes con hojas sanas, verdes...es como si hubiera vuelto a la vida a ellos!! Qué alegría!! Verlos cesar en su agonía..
 
Ahora, ya templadas las temperaturas parece que van recuperándose e incluso varios han ofrecido una floración que aunque escasa y consistente en rosas de un tamaño y calidad en nada parecidas a las primaverales, han hecho que tenga la esperanza de que sea posible la recuperación de la mayoría de ellos. Cierto que casi todos los que han reflorecido lo han hecho con unas rosas que no eran ni la sombra de lo que fueron pero...Miro algunas rosas ahora y me digo que de no saber yo de qué rosal se trata se me antojarían irreconocibles si las comparo con la imagen de la rosas que producen en la primavera. Pero el verano es así... Qué le vamos a hacer!!


Y si hablamos de floraciones dignas, Rosa 'Guirlande d´Amour' que parece incansable, se lleva la palma en reflorecencia, pero tras él sin duda debería situar a Rosa 'Munstead Wood'. Ningún otro rosal ha superado en número y hermosura sus rosas de verano. 
La floración estival de este rosal es en tonos bastante más oscuros, floreciendo en solitario y no en ramilletes de hasta diez rosas!! De menor tamaño y con muchísimos menos pétalos pero con el mismo aroma...y con la misma resistencia al sol a pesar de sus tonos oscuros.



Mientras llega el otoño seguiré esperando de él rosas que se parezcan más a estas de mayo... qué hermosas verdad? Llego a estremecerme contempládolas... Quizás la siguiente estación quiera regalarme alguna!! Cada vez que vuelvo a verlas, aunque sea ya en la pantalla de mi ordenador y logro acompañar la visión con el recuerdo de su aroma y de la suavidad de sus pétalos que conservo en las yemas de mis dedos.. me digo que todos los desvelos que a veces tenemos que tener para cuidar estos seres tan hermosos que son los rosales, merece la pena!! Sin duda!!


Uno de los trabajos más bonitos: Plantar un árbol en el jardín!!

Plantar un árbol en el jardín es uno de los trabajos que más me gustan hacer. 

Hoy, tempranito, llegó el camión de Viveros Sánchez, un centro magnífico de venta de plantas ubicado en Guadalajara. Hasta allí me desplacé el mes pasado para adquirir unos cuantos árboles en contenedor que son los que han traído hoy. 
Qué ilusión ver cómo los bajaban del camión!! ummm me encantan los árboles, no hay planta que me guste más en un jardín... :) y aunque éstos son aún pequeños, ya crecerán y proporcionarán sombras, y floraciones, y aromas y sutiles juegos de luz!!
Desde arriba fueron descargándolos uno a uno. Venían tumbados. Qué altos se veían!! jajaja Uno a uno los han ido bajando. Primero fue la Tilia cordata (Conocido como tilo norteño, tilo silvestre o tilo de hoja pequeña), luego la Koelreuteria paniculata (Jabonero de la China o árbol de los farolillos), a continuación dos Paulownia tomentosa (Árbol de la vida) que por cierto, me ha costado lo suyo encontrar y por último, una Catalpa bignoniodes que es la que hemos plantado hoy.
Hemos dejado los árboles tumbados sobre el suelo del jardín para evitar que el viento los hiciera caer, a la espera de ser plantados.

Los días ya se van acortando, las temperaturas se han ido suavizando. Ya no padecemos el rigor insoportable del verano con sus tórridas temperaturas. Es un buen momento para comenzar a plantar árboles y arbustos en contenedor. Haciéndolo ahora aún les queda algo de tiempo antes de que llegue el pleno invierno para que vayan produciendo raicillas que  vayan adentrando en la tierra que les rodea y arraiguen poco a poco. Cuando llegue la primavera tendrán ya este trabajo en parte hecho y podrán dedicarse a empezar a crecer un poco porque estas pequeñas raíces les posibilitará tomar el agua y los nutrientes del suelo que circundante.
He comprado dos Catalpas en dos formatos distintos. En un principio, en esta esquina tenía pensado plantar no esta Catalpa en contenedor que me han traído hoy si no una que tengo encargada en un vivero y que ha sido cultivada en tierra y que vendrá en cepellón. Lógicamente tendrá un pan de tierra (cepellón) mucho más grande que el de estos árboles que han llegado hoy de ahí que le tuviera preparado este hoyo de 1 x 1 m. El sistema para plantar un árbol es igual tanto si adquirimos el ejemplar en contenedor o en cepellón, lo que varía es el momento del año en el que debemos hacerlo. 
Pero en el último momento me han entrado ganas de terminar esta esquina donde llevamos ya semanas trabajando.  Me apetecía ver plantado ya el árbol que correspondía aquí. Así que dejaré la otra Catalpa en cepellón para el invierno, cuando pierda la hoja ya que ahora no es conveniente que la arranquen del suelo hasta que esté a sabia parada.
Ay!! Me enrollo, venga, manos a la obra a plantar esta preciosa Catalpa bignoniodes!!
Las dimensiones del hoyo de plantación es un asunto importante. En la medida que podamos, es conveniente que sea bien amplio, especialmente en lo que hace a su ancho más que a su profundidad. Cuánto extensa sea la zona de tierra mullida y fértil que rodea el cepellón, libre de piedras y raíces, más fácil será que el árbol arraigue. Las nuevas raicillas que crezcan, no tendrán que luchar contra tierra dura o contra rocas en su crecimiento y podrán por tanto desarrollarse más, mejor y más rápidamente al poder penetrar esta tierra con facilidad. 

Es conveniente dejar pasar algunas semanas entre el momento en que se hace el hoyo y la plantación del árbol. Durante este tiempo ese espacio se orea. Eso es lo que se lee en manuales y en páginas especializadas en la Red pero lo cierto es que yo no he encontrado un lugar dónde se expliquen con detalle las razones de hacer esto. De hecho no suelo esperar este tiempo en ninguna plantación.
En este caso sí ha transcurrido estas semanas porque el hoyo se hizo cuando hicimos los poyetes de piedra y entre que hemos terminado este trabajo, construimos la fuente de piedra y luego hemos acometido el los trabajos en madera con un arco en la entrada al jardín trasero, ha pasado tiempo.
Otro factor importante es el relleno del hoyo de plantaciónEs fácil que todas nuestras atenciones vayan dirigidas hacia la parte aérea de las plantas pero es un error. Pensemos que las raíces son las partes más importantes de cualquier planta. Ellas son las que proporcionan el anclaje, el alimento y el agua que precisan para crecer y desarrollarse y en la medida que sean abundantes y sanas, lo será la planta que sostienen. Regalar a nuestras plantas un buen medio dónde crecer es garantizar en cierta medida el éxito en su cultivo y en buena medida determinará su futuro crecimiento y desarrollo.
Lógicamente he tenido que pedir algún metro cúbico de tierra vegetal enriquecida con algo de abono orgánico (con estiércol muy curado en este caso) para el relleno de los hoyos de plantación de estos árboles.  

Sobre el fondo del hoyo hay quién opta por poner una capa de estiércol bien fermentado (unas cuantas paladas) y luego una buena capa de tierra vegetal o del sustrato con el que se rellenará el hoyo, para que las finísimas raíces que salgan del cepellón  no crezcan directamente en el estiércol para evitar que se quemen. Cuando las raíces se desarrollen y vayan profundizando y lleguen al nivel de este estiércol, que ya estará bien fermentado y constituirá una reserva de alimento sin riesgo de quemarlas. Lo hacen así porque esta será la única oportunidad de aportar nutrientes a esta profundidad ya que luego, tras la plantación el único abono que se podrá proporcionar será superficial.
Pero como todo, también aquí hay teorías. Leed lo que comenta Patapalo (un forero muy conocido en estos medios jardineriles) en Infojardín
"Un árbol debe de pasar algo de hambre y sed y la comida y la bebida hay que ponérsela algo lejos (se suele decir que en la proyección de la copa en el suelo), y nunca en el pie. se trata de que el árbol haga crecer sus raíces por el terreno para buscarse la vida.
Es lo que se llama "efecto maceta".
Conclusión: está bien algo de abono en el fondo (un vasito de yogourt de un abono de liberación lenta o similar), algo de humus de lombriz,.... pero no hagáis -recomiendo yo- lo que muchos dicen: capas y capas de abono con estiércol y cosas raras."
 Personalmente suelo aportar este abono de fondo porque el suelo de mi jardín es muy arenoso y pobre. Este aporte de materia orgánica en el fondo del hoyo de plantación siempre lo hago asegurándome de que las raíces recién salidas del cepellón no tocarán nunca el estiércol que podría quemarlas y lo he hecho en una cantidad no exagerada, tres o cuatro paladas. Claro está, esta cantidad dependerá lógicamente del tamaño del hoyo. 
En esta ocasión, en todo caso me he decidido a no aportar nada en el fondo porque el hoyo era mucho más grande de lo que hubiera sido preciso y este árbol tendrá espacio de sobra para desarrollar durante muchísimo tiempo sus raíces en un medio que tiene nutrientes.
Una vez creada una buena capa con la tierra vegetal con la que hemos rellenado la totalidad, tocaba extraer el árbol del contenedor. He preferido hacer esta operación dentro del hoyo por temor a dañar el cepellón. 
Como es lógico un contenedor de estas dimensiones y el propio tamaño del árbol hacía que su manipulación fuera difícil debido al peso. Ha sido más fácil apoyar con mucho cuidado el tronco sobre el poyete sobre un cojín para evitar lesiones o arañazos. En esta posición hemos retirado el contenedor. Ha costado un poco porque las raíces venían bien pegadas al interior.


Puesto el árbol de esta manera me ha resultado mucho más cómodo comprobar que no había raíces enfermas, dañadas o rotas y en ese caso eliminarlas.
La Catalpa de esta manera estaba lista para ser plantada. Ahora venía posicionarla de forma correcta dentro del hoyo de plantación.

La hemos "presentado" para ver qué tal quedaba, girándola hasta dar con la posición más adecuada para que las ramas existentes crezcan en la dirección que más convenía.
Hago esto siempre y me gusta retirarme y mirar el árbol desde cierta distancia, así me aseguro de que queda bien y de que no lo he puesto en una posición en la que alguna de las ramas principales va a crecer hacia dónde no me convenga.

Hay que tener en cuenta de no hundir demasiado el punto de injerto. Éste debe de quedar a ras del nivel del suelo de plantación. Como no había suelo en la parte del hoyo que toca el poyete del suelo, era difícil calcular bien. Así que hemos echado tierra en esa zona y con un listón atravesando de punta a punta el hoyo y ayudándonos de un nivel hemos calculado sin problema a qué altura debía estar el injerto.

Que el agua llegue en abundancia a una profundidad semejante una vez plantado el árbol es tarea difícil y yo prefiero que todo el espacio que rodea las raíces está perfectamente hidratado cuando hago las plantaciones así que riego el fondo del hoyo en profundidad asegurándome así de que el árbol podrá abastecerse de agua durante muchos días y de paso me aseguro que hay un drenaje adecuado y el agua se absorbe correctamente.

Me han hablado mucho y bien del uso de hongos formadores de micorrizas y me he decidido a hacer uso de ellos. Como no he encontrado en el vivero al que fui otros, he comprado el de la casa Flower comercializado con el nombre de "micoplus".

Se trata de una combinación de propágulos de hongos ecto y endomicorrizógenos, un producto biológico natural capaz de colonizar las raíces de todo tipo de plantas estableciendo así una simbiosis entre el árbol y el hongo micorrício que favorece un proceso que de forma natural se forma en los suelos.
El uso de este tipo de productos mejora la absorcción de agua y nutrientes, especialmente de los micronutrientes) incluso en suelos con condiciones poco favorecedoras. También aumenta la resistente a algunos patógenos del suelo y al estrés hídrico.
Pueden aplicarse disueltos en agua sin mezclar con ningún otro producto.
Hay que saber que la aceptación de las microrrizas y la rapidez de los efectos es mejor cuánto más joven es la planta. Y al contrario, cuánto más grande y más edad tiene una planta mayor será la cantidad de producto a utilizar y más el tiempo que se tarda en que los hongos se establezcan por toda la raíz. De ahí que se recomiende aplicar las microrrizas ya cuando se pone a germinar la semilla o cuando la planta es muy joven en el vivero.
Aunque se pueden utilizar en cualquier momento del año parece que es preferible hacerlo en el momento de mayor actividad radicular, esto es, en primavera y otoño.
Como la cantidad que viene en un sobre es muy pequeña (3 g.) me ha parecido no disolverla en agua y aplicarla directamente sobre las raíces externas con un pincel en distintos puntos bien distribuídos del cepellón totalmente húmedo por haberlo regado previamente.

Y ahora ya tocaba ir rellenando el hueco de plantación con la tierra vegetal enriquecida. Yo voy alternando capas que voy compactando con una herramienta de cierto peso. 

La zona que toca directamente con las raíces prefiero compactarla con una estaca de punta redondeada que me parece que tiene menos peligro de dañar las raíces.
Riego varias veces en este proceso según voy agregando tierra al hoyo para que una vez relleno tenga seguridad de que tiene suficiente humedad. Este agua de riego facilita la compactación del terreno eliminando así posibles bolsas de aire muy perjudiciales para las raíces.

Me gusta que la zona que rodea el árbol esté a un nivel ligeramente inferior al nivel del suelo del jardín. Se forma así un alcorque que facilitará en el futuro los riegos, al impedir que el agua escurra hacia zonas alejadas de la raíz manteniéndola hasta que es absorbida por el suelo justo dónde se necesita.
Cuando tengamos relleno el hoyo habremos terminado de plantar el árbol una vez demos un último riego para que toda la zona quede bien húmeda.

Sólo nos restará el anclaje del mismo que ya hoy, por la hora a la que hemos terminado no será posible.
Éste puede hacerse clavando una estaca o tutores fuertes bien honda, antes de rellenar el hoyo pero en este caso, se tendría que haber clavado dentro del cepellón y ello hubiera quizás dañado las raíces. 

Así que he preferido sujetar el árbol con unos tiravientos que lo mantendrán en su posición vertical impidiendo que se mueva en exceso cuando el viento sople fuerte.
Deberíamos aclarar que cuando se usan tutores éstos deben estar ubicados del lado en que más sopla el viento dominante y que debemos asegurarnos de que están hondamente clavados (al menos medio metro) para que sean efectivos. También es importante sujetar el tronco al tutor con material que no dañe el tronco y que tenga cierta elasticidad para que, cuando sople muy fuerte el viento, permita algo de movimiento al tronco y no llegue a quebrarse.
Bueno, y aquí la Catalpa bignonioides finalmente plantada en su sitio. A ver si hay suerte y se desarrolla en unas condiciones que permitan que brote fuerte y sana y me pueda deleitar con su preciosa floración!!




Consideraciones a la hora de comprar nuestros árboles

Elegir y comprar un árbol no se hace cada día. Son plantas caras, difíciles de transportar y cometer errores con ellas tienen soluciones más difíciles que los que se cometen con un pequeño arbusto o un rosal.
Parece importante por tanto pensar muy bien las cosas antes de tomar decisiones. 


La elección de la especie adecuada a nuestro suelo y clima es algo que no podemos ignorar. El pH de la zona dónde crecerá el árbol, las características del suelo, su capacidad de drenaje o no...determinan muchas veces que un árbol pueda o no prosperar. Hay árboles precioso sí, pero quizás son incompatibles con nuestro clima o con el tipo de suelo que tenemos en nuestro jardín. Tratar de que prospere un árbol en condiciones inadecuadas, además de trabajo para nosotros, sobretodo, supondrá un sufrimiento cruel para el propio árbol además de unos resultados poco aceptables. Incluso en casos extremos puede llegar a no prosperar.
Lo ideal es elegir especies aclimatadas a nuestra zona como las especies autóctonas u otras que sin serlo, crezcan sin dificultad en las condiciones reinantes en nuestro jardín.
La elección de la ubicación en el jardín es determinante. Trasladar un árbol de un lugar a otro del jardín, además del trauma que ocasionamos al ejemplar, no es tarea fácil por la envergadura del propio árbol y por el de las raíces que ahondan en la tierra un vez arraigado. 
Las buenas relaciones vecinales serán difíciles de mantener si plantamos árboles tan cerca de la divisoria que invadan el terreno anejo con sus raíces, extiendan sus ramas más allá de nuestra propiedad o tapen la vista y la luz de nuestros vecinos. Así que yo aconsejaría respetar escrupulosamente lo que a este respecto la normativa que haya desarrollado nuestro Ayuntamiento y si no existe, en última instancia, siempre será de aplicación los Artículos 91 y 92 de nuestro Código Civil que regula las distancias de plantación a la divisoria
En relación a este asunto añadiremos una obviedad que en ocasiones olvidamos, los árboles, como cualquier planta, crecen!! Por tanto, en el momento de elegir el sitio en que los plantaremos no deberíamos olvidar que lo que un día mide dos metros metido en un contenedor, dentro de siete o diez años habrá alcanzado varios metros de altura y de envergadura.
El espacio del que disponemos tendrá que ser adecuado a la plantación como es lógico. Los árboles son seres impresionante hermosos y hacerlos crecer constreñidos entre muros, sin la luminosidad y el espacio alrededor adecuados, no conduce precisamente a tener ejemplares dónde su belleza se pueda desarrollar con todo el esplendor del que son capaces algunos de ellos.
Las distancias entre las plantaciones son de suma importancia. Las plantas no pueden crecer sin el espacio suficiente. Una proximidad excesiva entre ellas provoca competencia en nutrientes y agua que les perjudica impidiéndoles crecer sanas y fuertes.
Así pues, cuando decidamos ubicar un árbol en nuestro jardín deberemos pensar también en qué plantas lo rodean y como van a ser esas mismas plantas y el propio árbol dentro de unos años.
El tamaño que irá adquiriendo con el paso del tiempo, inevitablemente irá condicionando y modificando el espacio próximo. Así los arbustos que hoy, cuentan con determinadas horas de sol por no tener plantaciones de gran tamaño a su alrededor, dentro de un tiempo puede que queden totalmente umbríos debido a la sombra que proyectan los árboles cercanos al crecer. Y sabemos cuan determinante es el grado de luminosidad que disfruta una planta para poder vivir de forma adecuada. 
Y no serán solo las plantas alrededor las que se vean afectadas por esta merma de luz, también pueden serlo ventanas de la casa o zonas de estar en las que precisemos de sol.
Los árboles caducifolios ubicados en las fachadas sur de las edificaciones quedan protegidas del calor en verano y permiten disfrutar de zonas frescas bajo su sombra permitiendo el paso de la luz y el calor en invierno cuando sus ramas ya están desnudas.
Pero además, en su proceso de crecimiento, los árboles también modificarán el suelo en la medida que irán desarrollando raíces que pueden provocar la total invasión de plantaciones cercanas
En relación a ello consideremos que hay árboles con raíces que, por no extenderse horizontalmente no perjudican gravemente pero hay otros que se convierten en verdaderas pesadillas cuando comienzan a emitir chupones (Tal es el caso de mis odiadas mimosas o mis "simpáticos" Ulmus pumila ajajja)
Pero existe un aspecto que puede llegar a ser mucho más grave. Las especie con raíces invasivas pueden llegar a ocasionar graves daños en infraestructuras como conducciones de agua e incluso en los cimientos de las edificaciones.
Determinadas especies de árboles además, pueden ser un problema en el momento en que llegue el otoño y sus hojas caigan al suelo. Todos sabemos qué suponen las hojas de un Prunus cerasifera esparcidas sobre un suelo de piedra o unas baldosas!!! Hojas, frutos, vainas... elementos que pueden ser muy ornamentales, pero que depositados en zonas inadecuadas se convierten en problemas sin provocan resbalones en zonas de paso o hacen imposible su limpieza.
No quiero dejar de mencionar otro aspecto a tener también en cuenta a la hora de la elección. Hay especies muy propensas a contraer determinadas enfermedades o plagas. Quitar el pulgón de un rosal, por poner un ejemplo, no es una tarea imposible ni mucho menos. Eliminarlo de un ejemplar al que para llegar a la parte superior de la copa debamos subirnos a escaleras o contratar un servicio profesional para realizar la tarea, puede llegar a ser muy costoso y en todo caso, siempre será un problema.
Elijamos por tanto especies que sean poco propensas a la enfermedad y nos facilitaremos bastante la vida!!

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Bien, hasta aquí he enumerado algunas de las consideraciones que creo que se deberían tener en cuenta a la hora de comprar un árbol. Una vez elegida la especie sabemos que los árboles podemos adquirirlos en distintos "formatos"

Es posible comprar árboles en contenedor (Habitualmente de plástico). Es la forma más habitual de encontrarlos en los viveros y el que da mayores porcentajes de arraigo. Se trata árboles crecidos en los terrenos del vivero y que luego se trasplantan (ya sea en cepellón o a raíz desnuda) al contenedor en el que los adquirimos. Deben arraigar en este sustrato antes de ponerse a la venta. De venderse sin dar tiempo a ello puede redundar en los resultados a la hora de plantarlos en tierra.
Teóricamente, dado que las raíces permanecen intactas al plantarlos,  se puede realizar este trabajo en cualquier momento del año pero es preferible hacerlo en momentos en los que las temperaturas no sean extremas. Así, no se aconseja plantarlos cuando el suelo está helado o anegado y tampoco en pleno verano debido a las altas temperaturas.
Lo ideal es plantarlos al inicio del otoño, cuando las temperaturas se han suavizado y aún pueden arraigar antes de que lleguen las heladas del invierno.
Son fáciles de transportar y existe muchísima variedad en viveros especializados.
Quisiera apuntar aquí algo sobre lo que hay que estar precavido si el vivero en el que adquirimos nuestros ejemplares no es de nuestra confianza. Es frecuente que algunos viveros extraigan árboles del suelo y los enmaceten poniéndolos a la venta de inmediato y con ello no dándoles tiempo de que lleguen a emitir raicillas en el sustrato del contenedor. Es aconsejable asegurarnos de que el árbol está bien arraigado y para ellos simplemente deberemos tirar de él hacia arriba, que salga del contenedor sin dificultad puede hacernos pensar que no lleva el tiempo suficiente en él como para haber arraigado. Ojo con la picaresca!!
Pero también hay que tener cuidado con el caso contrario. El de ejemplares que llevan demasiado tiempo creciendo en el contenedor. El contenedor estará atiborrado de raíces que se han ido emitiendo en exceso durante los años de cultivo en él y el que éstas salgan por abajo, por el orificio de drenaje es una clara pista de este problema.
Las plantas que llevan demasiado tiempo en el mismo contenedor presentan el problema de que las raíces crecen de forma circular persistiendo esta tendencia muchas veces aún tras ser plantadas con lo que será muy difícil su arraigo ya que dificultará que el árbol emita raíces hacia el exterior del tronco que es lo correcto.

Árboles "en cepellón". Éstos tienen la desventaja de que inevitablemente, por mucho cuidado que se ponga, parte de su sistema radicular queda dañado cuando el vivero debe extraerlo de la tierra para transportarlos a nuestro jardín. Normalmente, una vez extraído del suelo, el pan de tierra suele cubrirse con arpillera o cualquier otro material que evite en buena medida la deshidratación de las raíces. Además, si el pan de tierra es de dimensiones algo grandes, los viveros suelen ponerles una especie de "cinchas" que recorren el perímetro para que el cepellón se mantenga lo más firmemente posible.
Se usa en especies que aguantan mal la plantación a raíz desnuda. y al igual que ellos, deben plantarse cuando el árbol está a savia parada. Es decir, cuando ha parado su actividad vegetativa y ha perdido la hoja. De hacerlo durante una estación en la que haga calor y las hojas aún permanezcan en el árbol, éstas precisarían de un aporte de agua y nutrientes para su conservación que el árbol, recién amputadas partes de sus raíces, y antes de haber tenido tiempo de emitir pequeñas raicillas en el suelo que rodea el cepellón tras la plantación, no estaría en disposición de proporcionar. 

En cepellón escayolado. Cuando el ejemplar es extremadamente grande y para preservar el pan de tierra con sus raíces a veces no hay otra manera que "escayolar" (con yeso) la parte externa del pan de tierra. La técnica consiste en excavar alrededor de las raíces hasta formar un buen cepellón y una vez extraído el árbol de la tierra, envolverlo con malla metálica que a su vez se cubre con una buena capa de escayola. 
Ello permite la manipulación y el transporte a grandes distancias y puede, si llega el caso, permanecer el árbol sin plantar durante algunas semanas ya que el yeso permite que las raíces respiren. También se usa este sistema en casos en especies que sufren mucho en el trasplante al romperles las raíces. Con esta técnica, que permite  la formación de cepellones de mayor tamaño se puede paliar de alguna forma lo traumático que supone el corte de la raíz pivotante.
No hace falta decir que ya que suele usarse en ejemplares de gran tamaño con la dificultad del manejo de cepellones muy voluminosos, éste en sí y la mano de obra que su preparación exige, encarece este tipo de formatos.

Y por último, a raíz desnuda. En cuestión de árboles no es un formato muy usado en nuestro país a nivel de aficionado (no así si hablamos de profesionales que sí suelen usar este formando), en cambio, cada vez aumenta más la plantación a raíz desnuda de otro tipo de arbustos. Pensemos en nuestros rosales. Un formato que abarata muchísimo los costes y que tiene un alto porcentaje de arraigo.
Los árboles a raíz desnuda (siempre caducifolios) son extraídos del terreno de cultivo dónde hayan crecido sin tierra alguna adherida a sus raíces. Ello limita su período de plantación y por tanto también de compra. Solamente los veremos a la venta en invierno ya que es únicamente es en esta estación cuando pueden ser plantados. En invierno el árbol está a savia parada. Sin actividad alguna y por tanto no sufrirá en el trasplante al no requerir humedad para alimentar a las hojas que ya no están.
Evidentemente  para los viveros son de más fácil transporte y manipulación con lo que se convierte en el formato más asequible económicamente.
Si se efectúa en el momento y de la forma correcta, no tienen por qué presentar indice de arraigo excesivamente inferior que los árboles vendidos en otros formatos.

Oferta de bulbos de Allium y herramientas de jardín en el Lidl esta semana 17-09-2015

No soy muy asidua de este supermercado salvo para cuatro o cinco productos que me gustan especialmente y que veo muy bien de precio y ya que estoy, siempre suelo buscar si hay algo que me pueda interesar para el jardín, ayer había algunas variedades de bulbos de Allium que vi bastante bien de precio. Qué rabia haber tirado el ticket porque sé que eran a dos euros y pico pero no recuerdo el pico. 

He tratado de mirar a ver si encontraba en la Red el catálogo en el que vinieran estos bulbos pero no lo he visto, el que hay no incluye estos Allium. Deduzco que quizás no están disponibles en todas las tiendas. En fin, por si las moscas, os pongo sobre aviso por si queréis acercaros a ver si hay a la venta en vuestra tienda más cercana.
No obstante este es el enlace de las tiendas Lidl y ahí podéis consultar el catálogo con ofertas de herramientas de jardín para la semana. Ofertas tiendas Lidt
A partir de hoy hay oferta de bastantes herramientas de jardinería y otros artículos relacionados con nuestra afición.
Elegí cuatro variedades cada una con un calibre diferente. Qué barbaridad estos Allium 'Gladiator' verdad? Las otras variedades también estaban bien de tamaño y los he visto bastante sanos. Al final me compré cuatro bolsas con estas variedades:
30 Allium 'Violet Beauty', 5 Allium 'Gladiator', 6 Allium aflatunense 'Purple sensation' y 20 Allium 'Purple Rain'







Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...