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Plantación de rosales en ubicaciones problemáticas

Me gusta plantar los rosales a raíz desnuda en noviembre. Ahora ya se producen heladas nocturnas y el suelo está en peores condiciones pero este año me retrasé en el pedido de rosales y hasta ahora no me llegó el envío.

Antes de plantarlos y tras hacer los hoyos de plantación regué en profundidad para que la zona dónde los ubicaría estuviera previamente húmeda además de comprobar, como hago siempre, el drenaje del hoyo.
Quisiera hablaros hoy de dos de los problemas con los que nos enfrentamos a la hora de elegir dónde cultivaremos nuestros rosales
Uno es la competencia de raíces. No siempre es fácil resolver este asunto y como veréis generalmente no queda otra que trasladarlos de lugar si es que crecen cerca de ellas o, "ingeniárnosla" de alguna forma para que el rosal tenga alguna posibilidad de salir victorioso frente a ellas. Al menos intentarlo. No es fácil como digo!! 
El otro problema en mi jardín es más acuciante cuando se trata de la zona alta. Allí no son las raíces lo que genera la dificultad, allí es la insolación inaguantable que se da en verano. Es decir, el problema son las temperaturas extremas en verano que favorecen la deshidratación. Aquí no queda otra que usar mezclas que ayuden a conservar la humedad.
Antes de entrar en materia quiero deciros que esta vez mi pedido se ha limitado a tan solo unos pocos. Este invierno no han sido muchos los que he solicitado. El jardín ya lleva creándose casi cuatro años y el número de rosales que cultivo ya va siendo numeroso. Pero claro, con esta pasión que tenemos por ellos, es difícil resistirse a la tentación de aumentar las existencias.
Rosa 'Souvenir de la Malmaison' arbustivo. Cultivo el trepador, por cierto, sin mucho éxito ya que creo que los trips han decidido nutrirse de él y no le dejan vivir en paz. 
Es una rosa que me encanta así que he querido introducir en la parte frontal de la casa este de crecimiento arbustivo.
Rosa 'Reine des Violettes'. Lo cultivé en le otro jardín de la casa dónde viví anteriormente pero no me lo traje y es una rosa tan sumamente hermosa que esta vez no he podido resistirme a pedirla. En aquel jardín, no aguantaba bien el sol. Sus rosas languidecían con las altas temperaturas y los pétalos se achicharraban de manera que esta vez voy a cultivarlo en unas condiciones un tanto fuera de lo común pero sí, voy a probar a hacerlo así. Me refiero a que la ubicación es debajo de un pino en el huerto. A ver qué tal se desarrolla.
Si no funciona en este lugar, pues eso, lo que hacemos siempre para que el trabajo del jardín no tenga fin ajjajaja, trasladarlo de lugar!
Rosa 'Madame A. Meilland' arbustivo (También conocido como 'Peace' o 'Gloria Dei') Un clásico entre los clásico. Es un híbrido de té de 1935 cultivado por Francis Meilland .
Lo que son las cosas... Aunque hace treinta y tantos años, cuando yo tuve mi primer jardín no entendía absolutamente nada de plantas, este fue el primer rosal que compré por casualidad. En versión trepadora, eso sí. No cultivo híbridos de té en mi jardín, creo que este es el único, pero ha sido por motivo más sentimentales que otra cosa por lo que lo he pedido. Se trata de un arbusto de buen tamaño con rosas tan hermosas!! 
Rosa 'Souvenir du Docteur Jamain' una rosa antigua perteneciente al grupo de los híbridos perpetuos de 1865, divino como pocos.
Rosa 'Goldfinch' no es nuevo este rambler en mi jardín pero me pasó con él lo que no me ha ocurrido nunca con ningún rosal. Desgraciadamente se murió el que planté el año pasado por mi culpa. Me despisté al plantarlo y cuando lo hice dejé pendiente la instalación del riego por goteo correspondiente. Se me fue del todo de la cabeza y se quedó sin agua así que el pobre murió. Tenía ganas de cultivarlo así que decidí volverlo a pedir, esta vez con la determinación de no dejármelo morir.
Rosa 'Lady Emma Hamilton' Tampoco es nuevo pero precisaba un rosal de hermosas rosas anaranjadas que destacara sobre la celosía derecha que da entrada al jardín trasero.
Y por último, Rosa 'Mermaid' (en sus raíces). Estoy enamorada de este rosal desde hace tiempo pero este es de esos rosales que tienes que tener muy, muy claro dónde se van a cultivar. Mermaid no se pude poner en cualquier parte. Requiere espacio, mucho espacio para lucir en todo su esplendor. Se trata de un vigoroso trepador de enorme desarrollo, un híbrido de R. bracteata de rosas grandes de pocos pétalos pero muy refloreciente y de un amarillo de gran delicadeza.
He tenido que recurrir a la socorrida Wikipedia para mostraros esta belleza... lindo!! Eh! :) Delicado y elegante. Ummmm ya sueño con él. Por cierto, para los que siempre van olisqueando, sí, sí, tiene aroma también!!


Llevo años queriéndolo cultivar pero sin decidirme a hacerlo por no tener elegido el espacio adecuado. Por fin creo que le he encontrado la ubicación en la que puede lucir su hermosura
Pero tiene un problema este espacio asignado: Las dichosas mimosas!! No obstante yo soy bastante empecinada y cuando quiero algo, al menos lo intento. Si no tengo éxito siempre pienso que estoy a tiempo de modificar los emplazamientos o las condiciones de cultivo o simplemente asumir mi error y desistir jajaja
Quisiera mostraros este rosal antes de plantarlo. como veis no se trata de un Rosa 'Mermaid' injertado si no de un ejemplar que crece en sus propias raíces.
La importancia de las raíces de los rosales no es tema baladí. Los que me leéis con asiduidad, sabéis que a la hora de plantarlos siempre lo hago con el punto de injerto hundido con la idea de que con el tiempo, aunque me veo obligada a adquirirlos casi todos injertados, terminen por crecer en sus propias raíces. Son varias las ventajas que le veo a esta forma de hacerlos crecer.
Podéis echar un vistazo a un artículo en el que se trata con algo de profundidad los pros y los contras del cultivo de rosales injertados frente a rosales que crecen en sus propias raíces pinchado en el vínculo anterior.
Estoy convencida que los rosales que crecen sobre sus propias raíces terminan siendo rosales más fuertes, de mejor desarrollo pero sobretodo en este caso, estoy interesada en un rosal que me emita constantemente brotes basales que me permita ir rejuveneciéndolo con los años. Preferiría que este rosal no creciera con tallos largos, excesivamente lignificados y desnudos en la base a pocos años que pasen. Me gustaría tener una parte inferior poblada desde el suelo ya que se trata de una zona que se ve mucho al venir el camino que recorre el seto norte en nuestro ascenso hacia la parte alta del jardín. Y esto, sin duda, será más fácil si este rosal crece desde el inicio en sus propias raíces.
Fijaos como ha venido. Un buen cepellón lleno de raicillas bien desarrolladas que tan pronto toquen el sustrato que les he preparado espero que se animen a desarrollarse de forma saludable y vigorosa en él.


De todos modos este mes no han sido estos siete rosales únicamente los que he plantado. He tenido que trasplantar otros siete de lugar porque dónde crecían estaba claro que no tenían ninguna posibilidad de prosperar.
Hoy va la cosa de ubicaciones problemáticas para los rosales. Empecemos por un buen ejemplo de este problema,  el de este rosal Rosa 'Mermaid'. y ello hay que "agradecérselo" como os digo, a las raíces de las mimosas que crecen en este arriate.
Sabiendo que en general es difícil  salir victoriosos del problema, no quiero dejar de intentar salirme con la mía :)
Ni se me ocurre plantar directamente en el suelo al pobre rosal. Sé que tendría sus días contados. La competencia de estos árboles es tan enorme que no tendría posibilidad alguna de sobrevivir siendo tan bebé.

Estas son las raíces de una mimosa que he sacado de entre un rosal que crecía cerca de ellas. Impresionante la "cabellera" que han desarrollado, verdad? Cómo iba a desarrollarse el pobre rosal con una competencia de este calibre enrollada a sus raíces!!

Por eso he excavado un buen hoyo, de amplitud suficiente para albergar en él un gran contenedor. Ahí podrá tener mi Rosa 'Mermaid' la hidratación, nutrientes y sustrato que precisa para empezar a desarrollar un buen cepellón.

Cuando en dos o tres temporadas se haya desarrollado lo suficiente, excavaré mucho más profundamente y agrandaré el hueco que he practicado ahora. Construiré luego un pequeño "tabique" vertical que rodee el cepellón del rosal con suficiente profundidad, con ladrillos o piedras de manera que le proteja de la competencia de las dichosas raíces y espero (cruzo los dedos) que siendo para ese momento, un ejemplar ya bien desarrollado tenga posibilidades de sobrevivir junto a la mimosa. Espero que las raíces se desarrollen hacia abajo, a más profundidad de lo que lo hacen las raíces de la mimosa que suelen ser bastante superficiales y en estas condiciones pueda no sufrir tanto por el agua robada por la mimosa.
Como os comentaba no encontraba un lugar adecuado para este rosal pero ahora tengo la idea de ubicar una pérgola adosada a la fachada este de la casa. Quizás (ya veremos) construya bajo ella un espacio para dedicarlo a zona de pintura al óleo que es una afición que quiero volver a practicar. Los caballetes, lienzos y material de esta hobby ocupan bastante espacio y aunque en este momento tengo dedicado un dormitorio a ello, creo que la luz que tendría en este lugar para pintar sería magnífica.


En fin, digo todo esto porque un Rosa 'Mermaid' creciendo enloquecido hacia arriba y durmiendo sobre el tejado de esta pérgola podría quedar precioso. O no? :P

A veces ubicamos los rosales pensando que tienen la luz adecuada y llenamos los hoyos de plantación con las mezclas de sustratos que necesitan pero no tenemos en cuenta algunas circunstancias que impedirán su desarrollo.
Es la experiencia la que te hace ver hasta qué punto algunas ubicaciones son imposible. Es el caso de la zona central de mi jardín. Allí crecen dos grandes olmos cuyas raíces resultan una competencia imposible de vencer para casi cualquier arbusto y en concreto, los siete rosales que crecían hasta ahora junto a ellos, después de tres años no han prosperado lo más mínimo.
Está claro que ya no era cuestión de darles más tiempo. Fijaos en estos dos rosales. Ambos se tratan de Rosa 'Wild Edric' plantados el mismo año, con el mismo sustrato, con la misma orientación....el desarrollo no tiene comparación!!

Esta foto anteerior es el rosal que he trasplantado ahora y la siguiente fotografía corresponde a otro R. 'Wild Edric' no esta primavera si no la anterior....no hay color, verdad? :)

Sin duda son las raíces de los olmos los que impedían su desarrollo. Así que no voy a esperar a que sigan sufriendo otra temporada más. Los he sacado de su ubicación y les he asignados nuevos lugares en mi jardín.
Mis sospechas se han confirmado cuando he ido sacando los rosales. Los hoyos de plantación estaban llenos de raíces de los olmos y el desarrollo del sistema radicular de estos rosales era mínimo, apenas el suficiente para que los pobres no murieran pero ni de lejos el preciso para que se desarrollaran con normalidad.
De todo se aprende!! Ya no se me ocurrirá más ni el intento de hacer crecer rosales plantados directamente al lado de raíces que compiten con ventaja frente a las de los rosales.

El segundo problema con el que suelo enfrentarme en mi jardín a la hora del cultivo de rosales está dado por el tipo de suelo que tengo y por mi propio clima. Como sabéis mi suelo es arenoso, en él se filtra demasiado rápido agua y nutrientes y de ahí que tenga la necesidad de hacer aportes constantes de materia orgánica. 
Las temperaturas del verano de Madrid no son fáciles de superar con éxito para los rosales. Conviene ayudarles un poco!! Una forma de combatir la sequedad del sustrato es usando mezclas que retengan al menos un poco, la humedad.
Quisiera compartir con vosotros la elaboración de una mezcla de sustratos que creo que irá muy bien para mantener mejor la hidratación tanto de los nuevos rosales que han venido como de los rosales que he tenido que trasplantar desde el centro del jardín.

Hace ya casi un año recogí ocho o diez sacos grandes de hojas que metí inicialmente en una compostadora que tengo para este fin en el jardín. Luego vi que el compost se haría mejor metiendo las hojas en bolsas negras de jardín y regándolas bien antes de cerrarlas.
Así estaba este compost en mayo de este año. Como veis, estaban bastante compostadas pero todavía se podía apreciar claramente que eran hojas.
Una vez pasado un año, podéis ver en qué se han convertido aquellas hojas: una mezcla negra, ligera, mullida, suelta...un magnífico sustrato ácido que aligerará cualquier mezcla en la que participe. No aportará demasiados nutrientes pero que retendrá el agua de los hoyos de plantación evitando en parte la deshidratación del rosal.

Aunque a la hora del color final de las rosas hay otros factores como las temperaturas y el sol que reciben, también el pH del suelo dónde se cultivan interviene. Debo deciros que como ya he comentado en algún artículo, tengo comprobado que en suelos de cierta acidez, los tonos de los rosales que florecen en la gama de magentas, púrpuras, violetas...tienden más a tonos más azulados en suelos ácidos que cuando se cultivan el medios más alcalinos.
Me gustan en general más los malvas y violetas que los más rojizos, de manera que además de ser mi jardín de suelo con cierta acidez, tiendo a acidificar un poco más los hoyos de plantación agregando a las mezclas elementos que favorezcan en este sentido.
Así, esta vez he mezclado turba rubia, vermiculita, compost de hojas ya bien maduro y sustrato de estupenda calidad.
El compost de hojas no aporta muchos nutrientes como os digo pero da esponjosidad a la mezcla, convierte el sustrato en un medio poroso, bien aireado donde las raíces crecerán con menos dificultad.

El conjunto forma una mezcla bien mullida, esponjosa, ligera... la vermiculita, la turba y las hojas ayudarán en los dos sentidos en los que estoy interesada, de una parte aportarán algo de acidez y de la otra favorecerá la conservación de la humedad.
La experiencia es un grado en jardinería, como en todo!! Recuerdo la primera vez que hice mezclas de varios elementos y que como no tenía práctica trataba de hacer toda la mezcla necesaria de una vez. No me resultó este sistema nada bien!!
Así que esta vez tenía claro que no iba a mezclar toda la turba y hojas de una vez. Plantar veinte rosales precisa de bastante matrial. Como es muy difícil calcular qué cantidad se precisará para los rosales que tenía pendientes de plantación o de trasplante, lo que hice fue hacer una primera mezcla anotando las cantidades de cada elemento.


Hice una primera remesa de sustrato con tres carretillas de sustrato, una cuarta parte de la bala de turba que tenía (80 litros) y un saco y medio de compost de hojas más un poco de vermiculita. Comprobé que quedara a mi gusto y vi para cuántos rosales me daba. Aproximadamente unos cinco.
Preferí ir haciendo un montón echando un poco de cada sustrato e ir repitiendo estas capas hasta terminar con ellos. Así el montón estaba un poco mezclado antes de removerlo bien con la pala.

A partir de aquí y sabiendo de antemano las cantidades que de cada sustrato necesitaba para los siguientes rosales, fui cortando con una sierra la bala de turba, disgregándola previamente para facilitar luego la mezcla con los otros elementos y haciendo igual con cada bolsa y media de hojas compostadas. De poco en poco me resultó mucho más cómodo, además de que todas las mezclan han quedado con la misma proporción de todos los componentes.
Bueno, pues eso es todo por hoy, mis queridos lectores :)
Que tengáis todos un feliz fin de semana y ...abrigaos!! Que ya hace un frío que pela!! ;)

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