Mostrando entradas con la etiqueta plantas perennes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta plantas perennes. Mostrar todas las entradas

Geranium x magnificum. Azul violeta!

He cultivado otras variedades de Geranium y debo decir que  no con muy buenos resultados. Me traje del anterior unas matas de Geranium 'Johnson´s Blue' que si bien allí durante los dos primeros años se convertían cuando llegaba la primavera en matas preciosas, aquí jamás prosperaron dignamente.

Esta variedad aquí, en mi jardín, eran plantas con cuatro o cinco tallos larguiruchos que se desparramaban por el suelo sin formar las matas tupidas y redondeadas que he llegado a ver en otros sitios. Aunque los tallos de los Geranium suelen ser largos con bastante distancia entre nudo y nudo. Unas cuántas ramitas no se sostendrían en altura, precisan que sean muchas para formar matas densas y bonitas y que la mata gane en altura. Ya digo, aquí fueron decayendo hasta que este año incluso veo que no han vuelto a brotar. Creo que los planté en lugares con demasiada insolación!!

Pero soy persistente ajajja y en mi memoria guardaba la imagen de una variedad que vi por primera vez en El Jardín del León de la rosaleda de David Austin. Me encantó las hojas más semejantes que otras variedades  a las del género Pelargonium (con el que no hay que confundir los Geranium) Unas hojas profundamente lobuladas y cubiertas de pelusilla. Me pareció una mata más densa, más tupida que otras variedades de geranium que he cultivado. 
Debido a su preciosa gama de color, al planificar el jardín trasero pensé en esta variedad pero no la encontré disponible en ningún vivero de modo que me decidí a introducirlo en el último pedido de vivaces que he hecho a través de una página web.
Me encantan sus flores llenas de "venas" y sus bonitos estambres. Viendo sus capullos no me extraña que a veces estas plantas se confundan con los más conocidos "geranios" que tanto se cultivan en España. Pero no, son géneros distintos aunque ambos están incluidos en la familia de las Geraniáceas. Lo que conocemos con el nombre común de "geranios", también herbáceas aunque muchísimo menos resistentes a las bajas temperaturas, pertenecen a un género distinto, los Pelargonium. Estos en cambio, como hemos dicho, forman el género Geranium. Vivaces que en climas con heladas pueden llegar a desaparecer su parte aérea totalmente durante el invierno volviendo a brotar de nuevo en primavera.

El primer año no forman nunca matas tupidas, debe pasar para ello una o dos temporadas más. Geranium x magnificum no es una variedad de larga floración pero no la elegí solo por el precioso color azul violáceo de sus flores. Decidí cultivarla porque me encantan sus hojas incluso sin flor y porque además éstas adquieren preciosas tonalidades rojizas en otoño. Puede alcanzar unos 60/70 cm de ancho por lo mismo de altura.

No es una variedad especialmente propensa a contraer enfermedades ni plagas y su cultivo no presenta dificultades. Se adapta bien a distintos tipos de suelo y diría que en nuestros climas tan calurosos en verano se hace mejor en una semisombra que a pleno sol. Una vez asentada es bastante a cierta falta de riego.
Aunque como digo no es excesivamente exigente en cuanto a suelo, prefiere algo de humus en el hoyo de plantación y enriquecerla con materia orgánica en la capa de acolchado.

En general los Geranium son herbáceas vivaces que requieren ser divididas cuando pasan algunos años. Se levantan del suelo con una pala eliminándose aquellas partes viejas y secas y dividiéndolas en varias partes con lo que aumentaremos el número de nuestro ejemplares) antes de volver a plantarlas. Esta labor conviene hacerla antes de que inicien su plena brotación en primavera.

Othonna cheirifolia

Othonna cheirifolia es una asterácea resistente, con hojas de preciosos tonos grisáceos y una alegre y brillante floración. Podría decirse que es una todoterreno. Aguanta bastante bien la falta de agua aunque conviene regarla de vez en cuando el primer año hasta que arraigue. 

Cuando llevan un tiempo plantadas desarrollan unos tallos semileñosos sobre los que brotan sus hojas que por lo carnosas no pareciera que aguantan las temperaturas tan bajas como resisten. Una vez arraigadas se extiende sin dificultad con sus tallos postrados y forma matas bastante amplias en poco tiempo y de poca altura. Lo que convierte a Othona cheirifolia en una planta idónea para tapizar zonas soledadas que además se mantiene todo el año "impolulta". Prácticamente no hay que limpiarla de hojas secas porque ya digo, mantiene una salud envidiable y su aspecto carnoso y liso me encanta!!

Resiste bastante bien mi clima con heladas no demasiado profundas pero sí frecuentes y es una buen opción de hoja resistente para zonas sin problema de drenaje en el suelo, cosa que detestan. Puede crecer incluso en suelos bastante pobres y sin demasiados cuidados siempre que reciba muchas horas de sol.
Las flores según van secándose adoptan un aspecto precioso, seco pero muy bonito y en su parte inferior, los sépalos (no estoy segura de que sean sépalos, puede que sean brácteas) también alargan el tiempo de interés de la planta. Por cierto, con estos los sépalos de sus flores una vez pasadas pueden usarse para arreglos florales que duran mucho tiempo.
Tengo varias matas en el jardín, con ubicaciones distintas y cada una florece en un momento distinto. Ahora en primavera están en flor pero también he tenido alguna en verano.
En fin, una planta fácil y bonita que no precisa de nada especial para tapizar un buen espacio y premiarnos con una bonita y prolongada floración y que además no nos dará ningún quebradero de cabeza porque no es nada tendente a plagas ni a enfermedades.





Trasplantando y dividiendo vivaces y perennes

Aprovechado que con el final del invierno las matas de perennes aún están paradas en su mayoría en su actividad vegetativa pero "desperezándose"  he desplantado los Chrysanthemum frutescens, una mata a la que tengo mucho aprecio por el colorido que aporta al jardín y porque no es una planta que tenga especiales dificultades de cultivo.
Creo que el grupo de las perennes (plantas no leñosas) sean perennifolias (que conservan sus hojas en invierno) o sean vivaces (que pierden durante la estación fría su parte aérea conservando con vida sus raíces de las que rebrotarán de nuevo los tallos con la llegada del buen tiempo) no es bueno que las dejemos años y años plantadas en el mismo lugar sin "renovarlas" Mi experiencia con ellas es que con el tiempo tienden a envejecer muchas de ellas y que desplantarlas cuando están dormidas, aprovechar para limpiarles las partes secas, viejas o dañadas y volver a plantar solo las partes sanas y fuertes ayuda a rejuvenecerlas y a la larga favorecemos que alarguen la vida. De hecho esta última temporada, he observado que la parte central de las tres matas de margaritas que tenía en el jardín pequeño iba muriendo mientras que la zona periférica se iba extendiendo. De ahí que llegara a la conclusión de que era buen momento para hacerle una buena limpieza.
Es aconsejable hacer esto cada tres o cuatro años, volviendo a replantar solo las partes que no están dañadas. La planta lo agradece porque es una forma de "rejuvenecer" este grupo de plantas que tanta floración nos aportan.
Con la pala he recortado el cepellón con cuidado de dañar lo menos posible las raíces.
Una vez fuera de la tierra, como digo, le he hecho una buena limpieza, cortándole todas las partes secas o muertas y dejando únicamente la parte sana de la planta.
Este grupo de plantas es idóneo para reproducirlas por división. Un sistema barato y fácil de aumentar el número de plantas sin esfuerzo alguno. Con un cuchillo afilado o con el borde de la pala seccionamos el cepellón en tantas partes como deseemos (por supuesto todas deben tener raices :)). Aquí en esta fotografía se puede ver que esta mata la he dividido en dos. Incluso formaré una tercera matita con las ramas que se han desprendido en el proceso y que llevan raíces. Quizás será pequeña esta temporada pero para la próxima disfrutaré de una preciosa margarita florida.
Incluso formaré una tercera matita con las ramas que se han desprendido en el proceso y que llevan raíces (A la izquierda de esta foto) Quizás será pequeña esta temporada pero para la próxima disfrutaré de una preciosa margarita florida.

Una vez limpia ya no queda más que hacer un buen hoyo en el suelo del jardín, de dimensiones bastante superiores a lo que ocupan las raíces y llenar su base con una mezcla de compost y buena tierra vegetal. Si vemos que se trata de una planta con dificultad para arraigar podemos añadir un puñado de activador de raíces, en este caso concreto, con las margaritas no es necesario.
Depositamos la mata ya limpia sobre esta base enriquecida y vamos rellenando con buena tierra vegetal mezclada con algo de estiércol bien maduro o de compost.
Acabamos de rellenar hasta cubrir totalmente las raíces mientras vamos compactando con las manos la tierra para que se eliminen posibles bolsas de aire que son muy perjudiciales.

Finalmente regamos en profundidad y cuidamos con esmero la hidratación de estas matas recién trasplantadas hasta tener certeza de que están bien arraigadas.
Lo mismo puede hacerse con cualquier otra mata. Este fin de semana he hecho lo mismo con las Espuelas de caballero (Delphinium Elatum de las variedades "Black Knight" y "Blue Bird"). Si hay alguna vivaz a la que es conveniente hacerles esta limpieza y replantarlas son las espuelas. Me parecen espectaculares con sus impresionantes espigas florales y se convierten en absolutas protagonistas cuando están en flor.
La lástima es que también tienen sus "pegas", tienden a la clorosis y muchas partes de las matas mueren en pocos años. En 2012 tuvieron una floración mejor que en la última temporada de 2013 así que pienso que les va a venir bien este rejuvenecimiento, a ver si esta primavera vuelven a florecer como hace dos años.


Aunque el arriate dónde las he plantado tiene muchísimo sol he preferido preservarlas un poco de él hasta comprobar que han arraigado perfectamente. Con unas ramas de arizónicas que podé les he hecho una especie de "paraguas" para que no les de el sol del mediodía. Dentro de unas semanas se lo retiraré, a ver cómo responden al pleno sol.
Los geranium vivaces son otra mata idónea para dividirlas de esta manera. En poco tiempo se extieden formando matas cada vez más grandes. Esta es la floración que me dieron al siguiente año de ser plantados, no podía estar más bonitos!! 
Este invierno ha sido muy suave, tanto que los Geranium no han llegado a perder completamente sus hojas. Otros años, las heladas fuertes provoca que la parte aérea de la planta desaparezca totalmente.

Tutorial: Pomazón, cojinete, guantelino, cojín o almohadilla de dorador. Cómo hacerlo paso a paso

Son muchos los nombres por los que se conoce (guantelino, cojinete, cojín de dorador...) aunque pomazón y almohadilla de dorador son los más...